DIOS DA PAN A QUIEN NO TIENE DIENTES (Desahogo)

En días como estos en que recorre mi cuerpo una suave pero agradecida brisa, me reconcilio con mi entorno, menos con mi casa, pues esa herida permanecerá abierta durante mucho tiempo y suponiendo que llegue a cicatrizar algún día. Intento escribir pero mi cabeza está en otras cosas más mundanas, por ejemplo estaba pensando donde meter las cosas del baño. Y ya estoy en plan sobrepasado y me estaba contestando a mi mismo, pues te las metes por el culo o sea que como veis, va bien la cosa. Y las cortinas que llevan unos canutillos y que aún que comprarlos y la terraza que hay que comprar el brezo y ponerlo y las bombillas y el somier de una cama, que no sé de donde sacarlo. Bueno, son los primeros síntomas o los pródomos de que esta vez reviento.

                         Es mi primer descanso y va a ser el único en todo el día, si es que el día hoy va a tener un final y no se va a juntar con mañana. Ahora acaban de llamar de Ikea, para decirme que no pueden traer los muebles hasta ésta tarde y así todo se complica y se junta y se almacena. Dios da pan a quién no tiene dientes y a mi dió unos muebles de Ikea desmontados y unas manos que son garfios y es tal el cabreo que tengo, que los voy a montar del revés y lo voy hacer con los pies y con una venda en los ojos.

                         Sólo por joder y también por ver si me salen mejor montados de ésta manera, pues si sigo su hoja de ruta y su plan de montaje, me pasará como siempre, que me van a sobrar unos cuantos tornillos y unas piezas de madera, y de nuevo encontrarme con el mismo dilema, o desmonto todo de nuevo o queda así y ya lo revisaré posteriormente, y al final, para decidir lo de siempre, el mueble se sostiene y da el pego y esa es la función de un mueble de Ikea y entonces guardo las piezas sobrantes, con la vana esperanza que algún día lo vuelva a desmontar y lo recomponga. Aún tengo las piezas sobrantes de los otros muebles de Ikea que compré hace años y a lo mejor con todas las piezas, hago un mueble nuevo de Ikea, un engendro Ikeano, un mueble de diseño de interiorista y firmado por mí, firmado por Bruno Lamoso, interiorista y especialista en muebles Ikeanos..

GEORGE ORWELL