A veces siento que el final se acerca,el final de una etapa o el final del camino,
el final de un capítulo o el final de un libro,
el final de una era y el comienza de una nueva,
no sé, pero todo se mueve a mi alrededor,
y oigo voces que vienen del otro lado,
del otro lado de la calle,
del otro lado del lago,
del otro lado de la vida,
son voces sin rostro, sin lengua,
y sin cuerpo que las sostenga,
exclaman y me piden ayuda,
como si yo tuviera el poder de los dioses,
como si yo pudiera dar vida a la muerte,
y no saben que yo no soy nadie,
solo soy un ser sufriente,
al que le duele la vida,
y le duele tanto,
que a veces pienso en el final de mi existencia,
y desde aquí conjuro a los astros
y al poder de la naturaleza,
para que me señalen con sus luces,
el atajo que pondría fin a mi vida.
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