No sé quién está más nublado, el día o yo. Yo sí que estoy fundido y fiebre y dolores musculares y articulares y por supuesto, dolor de la meada y con esa sensación de que nuca acabas de mear y acompañado de un buena y sabrosa diarrea. En fin, nada que no se sepa y es que los manuales de medicina lo dicen claro, tendrás febrícula, dolor de cabeza, tiritonas y mearás a cachos y mientras tanto yo estoy intentado mantenerme en pie y por eso de que no me apetece ni un huevo el meterme en la cama. Total es mal cuerpo y ya está o eso me digo, para tener un consuelo.
Yo es que odio a los Pupitas, a los que se quejan de todo, a los que exageran los síntomas, a los que quieren ser el centro con sus males y a los que sólo hablan de sus putas enfermedades. No hay otro tema, bueno lo hay, pero a ellos les da igual. Su dolor lo quieren hacer tuyo y su angustia siempre es la misma: me duele tanto y tanto que no puedo ni respirar, pero coño, sí que pueden hablar y hablar del puto tema. Dicen que hay un umbral del dolor y que no todos los humanos lo tenemos igual. Los Pupitas desde luego que no lo tienen y un simple estornudo es para ellos el preludio de una Gripe o de un mal mayor.
Sí, que hay gente que se queja de todo y sus dolores superan a cualquier tipo de dolor. A ellos les gusta ser el centro del grupo y que todo lo que se hable sea de sus enfermedades. Pobrecitos los Pupitas, pobrecitos. Ellos eran personas y por su dar pena, se conviertieron en máquinas de la llorada y un simple sarpullido en la piel, se convierte en un cáncer de piel. Pero ellos siguen a su ritmo y a su alrededor va muriendo gente, pero ellos se conservan en sus penas y como peritas en dulce.
Yo es que odio a los Pupitas, a los que se quejan de todo, a los que exageran los síntomas, a los que quieren ser el centro con sus males y a los que sólo hablan de sus putas enfermedades. No hay otro tema, bueno lo hay, pero a ellos les da igual. Su dolor lo quieren hacer tuyo y su angustia siempre es la misma: me duele tanto y tanto que no puedo ni respirar, pero coño, sí que pueden hablar y hablar del puto tema. Dicen que hay un umbral del dolor y que no todos los humanos lo tenemos igual. Los Pupitas desde luego que no lo tienen y un simple estornudo es para ellos el preludio de una Gripe o de un mal mayor.
Sí, que hay gente que se queja de todo y sus dolores superan a cualquier tipo de dolor. A ellos les gusta ser el centro del grupo y que todo lo que se hable sea de sus enfermedades. Pobrecitos los Pupitas, pobrecitos. Ellos eran personas y por su dar pena, se conviertieron en máquinas de la llorada y un simple sarpullido en la piel, se convierte en un cáncer de piel. Pero ellos siguen a su ritmo y a su alrededor va muriendo gente, pero ellos se conservan en sus penas y como peritas en dulce.
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