LA MOCHILA

A éstas alturas de la vida es muy difícil desenvolverse cordialmente y como sino pasara nada y porque cada uno tiene su mochila particular suficientemente cargada y por tanto, no está para muchas cargas extras. Y todas las personas que te encuentras más o menos de tu edad, tienen sus propias cicatrices o heridas que aún emanan sangre fresca y reluciente y es lógico, no somos niños ni somos pequeños palomos que no se atreven a volar, somos gente derecha que almacena millones de pensamientos y por tanto eso supone, que la visión de futuro que tenga cada uno, tiene una gran parte de pasado, de mejor o peor pasado, pero pasado al fin y al cabo. Y con ello quiero decir, que una persona te puede atraer por el como es, por como es en su presente actual, pero antes de tomar una decisión debes escuchar su carga del pasado.

Sí, porque hay personas que están tan sobrecargadas que digamos que su período de normalidad actual es un lapsus, pues en realidad se han quedado anclados en su pasado, es decir se han quedado sin resolver sus malditas contradicciones y toda su visión de futura está teñida de asuntos del pasado. Y es que hay mucha gente arrepentida, arrepentida de lo que hizo, no hizo y dejó de hacer y cuando toda esa mierda sale lo hace en forma de inmensa catarata interminable. Bueno, ahí es cuando te das cuenta que no tienes nada que hacer con esa persona y porque yo no voy a renegar de mi pasado en aras de otro pasado y en el que además, yo no participé.

Hay muchas contradicciones sueltas, hay muchas comeduras de coco sin resolver, hay muchas proyecciones para escapar del pasado, pero todos sabemos que no va a ser así, que no puedes construir un futuro sin resolver lo anterior y porque tarde o temprano esas contradicciones van a volver a salir. Y nunca es tarde, pero en éste caso casi lo es y porque ya estás tan hecho que casi no cabe la vuelta atrás y que se ha vuelta atrás tiene que ser individual y propia y no arrastrando a otra persona ajena a tu anterior proceso. Yo no puedo resolver las contradicciones de nadie y además, no quiero y porque ese es un asunto personal e intransferible y yo no soy nadie para dar consejos puntillosos de un pasado que no me pertenece y es que me resulta un tema agresivo del yo metiéndome en vida ajena. La madurez se demuestra andando con la carga mínima, pues hay que pensar que a éstas alturas de la vida, todo dios está sobrecargado de pasado, digamos que el 90% de tu mochila lo ocupa tu pasado y el 10% restante lo ocupa tu presente y tu futuro y o aligeras la carga de tu pasado o es mejor que sigas tu camino tu solo. Pero bueno, siempre hay quién por no estar solo es capaz de compartir de forma engañosa su mochila.