NO HAY FIN QUE LO JUSTIFIQUE

                                   El otro día lo pensaba, creo que me estoy volviendo no violento, porque la violencia y su sangre no merecen la pena, además después de aplicarla, por cojones te tienes que lavar las manos y eso me resulta demasiado incómodo. Bueno, ahora está de moda, pero yo llevo más tiempo dándole vueltas a éste tema, llevo como años, como décadas, como unos cuantos siglos y porque la vía violenta para cambiar de sociedad está acabada. Ya pasaron esos tiempos de  guerrillas y guerrilleros y de hacer ejércitos del pueblo y para después de que corrieran ríos de sangre, acabaran siendo ejércitos de la nueva clase dirigente, la que se autonombraba la portavoz del pueblo. Y bueno y ahora tengo que aprovechar el momento para mandar mis saludos al Nicolás Maduro y para que vea que en España nadie se olvida de él, unos porque le odian (los Peperos) y otros (como yo) que nos acordamos de él para que nunca nos olvidemos de lo que no debemos hacer como Pueblo que lucha por su liberación y en definitiva para que no existan personajes como él.

                                   Claro que volviendo al tema que toca, uno puede ser o hacerse no violento, pero el enemigo a lo mejor no. Bueno, ya me entendéis, enemigo es el señor o señores que te quieren imponer su régimen y sus leyes y estos suelen ser y por desgracia, bastante violentos y porque les va toda la parafernalia que rodea a los uniformes, armas, torpedos y botones nucleares. Pero vamos a ver otra cosa y esa es ¡qué remedio nos queda!. O sea, en plan pelea violenta estos señores nos pueden y nos pondrían del revés, por tanto hasta por posibilismo adquieren más fuerza mis argumentos. Y yo no era pacifista, pero el tiempo y las pocas ganas que me quedan de pelearme, me han dicho que hay que... y que más vale ser pacifista.

                                   Es el gran dilema de la izquierda y hasta ahora, la violencia era la única vía de conquistar el poder. Pero yo ahora creo que esa violencia genera ideas de prepotencia y poder belicista y al final, tendremos un ejército llamado popular, que será casi igual que el que hemos desmontado. El fin es conseguir una sociedad mejor y donde no haya armas, ni uniformes, ni guerras y la pregunta del millón es: como se va a conseguir ese objetivo usando armas, ejércitos, uniformes y hasta matando al "enemigo". No se pueden usar argumentos que van en contra de ti y de tus propias ideas y además, no hay fin que lo justifique.