MI AUTOBIOGRAFÍA

 


Mi autobiografía...

El ayer fue grande e inmenso.

El hoy es esplendor en la hierba que va quedando.

El mañana

será que para lo que me queda en el convento

me cago dentro.

DIFUMINARSE




Tan importante es aparecer

como darse por desaparecido.

Difuminarse en el aire fresco de la mañana,

levantarse de madrugada

y decirse a si mismo

si esto sigue así

me voy a evaporar

y me haré gota en el cristal de la ventana,

mis dedos serán átomos de agua

y mi cerebro será un riachuelo 

que a cuentagotas inundará la porcelana de mis lágrimas.

EXPLOTA TODO

 


Hay un momento en que todo se rompe,

hay un momento en que todo hace ¡plaf!

y adiós... a la mediocridad del flotar y del disimular que estás fatal

y adiós... al volver atrás y por la misma senda de antes.


Hay algo que explota sin dinamita, 

sin mecha,

sin puentes tendidos al entendimiento,

sin hilos de los que tirar y para aproximar...


Explota todo y nada más,

explota y ahí no quedan prisioneros

ni muros que nos puedan cobijar.

ALGUIEN DIJO QUE PRIMERO FUERON LAS DEUDAS (Manuel Vázquez Montalbán)

 

ALGUIEN DIJO QUE PRIMERO FUERON LAS DEUDAS


Bilbao, noviembre, mañana y frio por Pablo Müller



«Cuando pague mis deudas

y entierre a mis muertos

                                          ya seré viejo

me lo dirá el frio cierre

del mar hasta mi cuello

el último poniente de un verano

la piel que pide abrigo de toalla

 

en cada deuda perdí tiempo

en cada muerte memoria de mi

 

sin nadie que me cuente

el porqué de mis sombras

quedaré a vuestra merced

                                            mis bien pagados acreedores»

Manuel Vázquez Montalbán

 

LAS GRANDES IDEAS

 


LAS GRANDES IDEAS
Día 13 de Octubre y Domingo del año 2019. Hoy me vengué de mi falta de sueño y quería dormir sobre 10 horas y en realidad dormí 13 largas horas seguidas. Desperté a las 7 y media y para llamar y decir que hoy entraba de guardia de avión de 24 horas y desde las 8 de hoy hasta las 8 de mañana y porque estoy obligado a hacerlo. Además me parece muy bien el que se nos controle, dado nuestro trabajo (soy médico), Doy la entrada con mi nombre, apellidos y con mi número de teléfono y es como dar el santo y seña para decir...estoy dispuesto. Después a los 5 minutos me llaman ellos y no para decirme que tenía un traslado de avión, sino que como se había enfermado un compañero médico en la UVI móvil, pues era para saber si yo podría tapar ese hueco.

Y ni un segundo tardé en darle la contestación pertinente: no puedo o no quiero y no puedo porque estoy escarallado y feito polvo y tengo derecho a ello. Y no quiero y porque mi vida no está basada en el 061 y ¡coño! tengo otras muchas cosas que hacer en mi puta vida de perro. Y es que con el paso del tiempo o de los años, se incrementa la necesidad de tener que descansar y porque sino lo haces no remontas el vuelo y casi sin darte cuenta, entrarás en una dinámica cansina y sin alicientes. Ahora, hay que cuidarse más que nunca y hay que mimarse tiernamente y hacer los descansos que tocan y que no tocan y dormir las horas que nos aconsejan y de vez en cuando hay que meterse una "jartá" (hartada) de horas durmiendo (es lo que se llama, terapia del sueño).

Pues en 13 horas de dormida continua e intensa, he soñado de todos los colores y en todas las situaciones que os podéis imaginar. Me he cansado de cambiar de decorado y de pasar de héroe a villano y de ser el ejemplo a seguir a ser el más arrastrado del lugar. Bueno, al final se me mezclaron tanto los sueños que el resumen es demasiado abstracto para poder ser contado. ¿Qué os voy a contar yo sobre el surrealismo de los sueños?. Todos sabemos de que va el tema problema y cuando son 13 horas seguidas pariendo sueños y a la velocidad del sonido...pues el resultado final, es un nudo demasiado complejo de sueños demasiado enmarañados y que a veces y tal como me resulta ahora, me resulta imposible de desatar, de interpretar o de desatascar.

La sensación es de masa ocupante de espacio en un cerebro comprimido entre las tapas duras del esqueleto o hueso, que a su vez envuelve nuestro precioso cerebro (el Cráneo) y según hacia donde comprima te produce un sueño o te produce otro. Y lo único que se puede hacer ante éste desorden temporal y espacial, es dejar pasar el tiempo y las horas y porque a poco ese efecto de nebulosa confusa, se irá descomprimiendo y entonces vendrá un período ventana y en donde lo claro y nítido, se hará lo dominante. Después de una espesa niebla vienen los días o momentos más brillantes y así al final se acaba demostrando la teoría que dice que después de un relajado, intenso y largo descanso tienen que venir tus momentos más alucinantes. Por tanto, las grandes ideas se preceden de largos descansos...


































































Jordi Mier Aliaga, Carmina Rodriguez Zuloaga Montesino y 5 personas más

JOSÉ MARÍA CUMBREÑO

 


«Los bolsillos de los abrigos

se comunican

con los inviernos anteriores.»


José María Cumbreño

FRASE de GLORIA FUERTES

 


«La libertad no es tener un buen amo
sino no tener ninguno.»

Gloria Fuertes

METÁFORA (Carmen Beltrán Falces)



Metáfora 2016 Festival de poesía de Navarra



 

estarás a la intemperie

que es lo que queda

lejos del poder

y sus focos

sólo ahí se es libre

y también desgraciado

(no conozco yo aún

premio sin herida)

contigo crecerán

tus cicatrices

ámalas

cuídalas

porque serán

el mapa que te explica

 

en ellas florecerá la luz

de quien te quiera

 

Carmen Beltrán Falces - Metáfora

CON LAS MANOS (Gata Cattana)

 


Mural de Álvaro Díaz García

CON LAS MANOS

No aman de igual forma
los ricos y los pobres.

Los pobres aman con las manos.
Los pobres aman en la carne y con gula,
en las peores estampas,
en condiciones famélicas y con
todo en su contra.

Los pobres aman sin bonitos decorados.
Entienden de lunes y de tedios domingueros
y de gastos imprevistos
de facturas y de angustias
que embisten
mes a mes
a quemarropa.

El amor de los pobres
no sale por la ventana
aunque el dinero entre
por la puerta,
(que nunca entra),
(aunque no haya ventanas).

Los pobres han aprendido
a amarse a oscuras por eso mismo.
Han aprendido a amarse mal alimentados
mal vestidos, malqueridos,
porque el hambre agudiza el ingenio
y en sus jardines también crecen las flores
(aunque no haya jardines).

Los pobres han aprendido a aprovechar
los vis a vis, entre jornada y jornada
de trabajo,
(aunque no haya trabajo)
y saben darse placeres nunca tasados
de valor incalculable
y han aprendido a disfrutar las circunstancias
y la sopa de sobre,
el viejo colchón y la cuesta de enero.

Y parece que su amor se yergue
indestructible a pesar de,
a pesar de las miles de plagas,
de los sueños frustrados y fracasos andantes,
de las crisis cíclicas y de hambrunas y de guerras,
más valiente que Heracles,
más Odiseo que Odiseo.

Y parece que su amor se extiende y se multiplica
al ritmo que se multiplican los pobres,
al ritmo que se multiplican los infortunios
y los desastres naturales que golpean
siempre en las casas de los pobres.

Y ese amor está a la altura de Urano,
a la altura de Urano y de Gea juntos,
y es el única arma
que tienen los pobres
para defenderse.

Por eso han aprendido a cultivar flores
y a cantar bien sus penas
y han inventado las mejores obras
y los mejores instrumentos.
Por eso entienden de arte y saben
encontrarlo donde lo haya,
aunque no lo haya,
(que siempre lo hay).

Y han aprendido a aprovechar el carisma
y la jerga,
y a escribir poemas inmortales
sobre amores complicados,
y saben de cosquillas,
y saben de boleros
y saben de desnudos
y de darlo todo,
que no es más que lo puesto,
las manos y la lengua
la forma de otear el horizonte
y los cánticos en contra del patrón.

yo solo se amar de esta manera
yo te amo como aman los pobres
y me temo
que por mucho mucho tiempo

esto seguirá siendo así

EN REALIDAD...



En realidad tengo dos hermanos,

dos hermanos de los que nunca hablo

y por estar emborronados, 

difuminados 

y tachados.


En realidad fueron mis hermanos,

ahora me quedan vestigios de su existencia

pues ahora y desde hace un tiempo, 

he pasado página,

cambié de capítulo

y hasta tiré el libro de familia


Y ahora son mis hermanos

porque llevamos los mismos apellidos,

porque tuvimos los mismos padres,

pero no queda una señal amable dentro de mi alma,

ni amable, ni cariñosa,

ni una sonrisa conmovedora,

ni siquiera queda un recuerdo que merezca la pena ser recordado.


Al final,

dirán que yo he sido el malo de la película

y lo he sido...

pero que quede igual de claro,

que ellos no ejercieron de buenos.

 Y si yo he sido el malo

ellos han sido peores.


 

DECISIONES

 


Yo no soy de los tipos que empieza su relato

con monsergas de éste tipo... 

cada vez que cojo un avión

siento que quiero cambiar mi vida

y al mismo tiempo pienso en mi infancia

y que mierda de infancia tuve

y cuando estoy a más de 10.000 pies de altura

no me da por pensar que soy un cero a la izquierda

y que necesito un cambio radical en mi vida.


No, no soy de esos.


Lo mío es mucho más suave y más tranquilo.

Yo claro que pienso en los cambios,

pero la diferencia estriba

en cual es mi mejor sitio para tomar decisiones,

y por mayoría absoluta 

gana la alternativa...de cuando estoy en el water.


Ahí, si que decido cosas importantes.


Mis mejores decisiones en ésta vida

las tomé cagando 

y de alguna forma le sigo rendiendo homenaje a ese acto,

por eso cuando tengo un gran problema

lo aplazo y hasta que me aprieten las ganas.


Merece la pena esperar.

PERRO DE HUESO (Eva H.D.)

 

Perro de hueso  




Volver a casa es horrible,
ya sea que los perros te lamen la cara o no.
Ya sea que tengas una esposa
o una soledad en forma de esposa esperando por ti. 
Llegar a casa es terriblemente solitario, 
tanto así que añoras con ternura aquella 
opresiva presión barométrica 
de donde acabas de volver,
porque todo es peor
una vez que estás en casa.

Piensas, con nostalgia,
en las alimañas que se aferran a los tallos de la hierba,
las largas horas de camino,
la asistencia en carretera, los helados
y las formas peculiares de ciertas nubes y silencios,
porque no querías volver.
Regresar a casa es
espantoso.

Y los silencios domésticos y sus nubes
hogareñas no contribuyen en nada
más que a todo el malestar.
Miras con sospecha las nubes como son,
hechas de una materia distinta
de aquellas que dejaste atrás.
Tú mismo estás cortado de una tela diferente,
turbia.
Devuelto,
repudiado,
mal recibido
por la luz de luna, infeliz de regresar,
holgado en todos los puntos equivocados,
como un traje lleno de costuras,
un trapo andrajoso de cocina, usado.

Llegas a casa
como a otro planeta, ajeno.
El tirón gravitacional de la Tierra,
un esfuerzo ahora redoblado,
suelta los cordones de tus zapatos
y hace que arrastres los hombros,
grabando aún más profunda la estrofa
de la angustia en tu frente.

Vuelves a casa hundido,
como un pozo sin agua ligado al mañana
por una frágil hebra de “qué más da”.
Suspiras frente a la avalancha de días idénticos,
bien podrían ser uno solo, y uno a la vez.

Bueno,
qué más da,
volviste.

El sol sube y baja
como una puta cansada,
el clima inmóvil 
como un miembro roto mientras envejeces.
Todo permanece inmóvil,
menos las mareas cambiantes
de sal en tu cuerpo.
Tu visión se nubla,
llevas encima tu clima contigo;
una gran ballena azul,
una oscuridad hecha esqueleto.

Vuelves a casa
con visión de rayos X,
tus ojos convertidos en hambre.
Y así, regresas con tus dones
mutantes a una casa de hueso.
Todo lo que ves ahora, todo, es hueso”.

LU SESMA



Después de varias semanas
de oscuridad,
hoy por fin, abro el armario
para guardar en él
todas mis gastadas vestiduras.
Las perchas se apelotonan
en su barra
como los años recorridos.
Cojo la primera percha
y cuelgo en ella la angustia,
arrugada y descolorida
de tanto usarla.
En la segunda percha
cuelgo el miedo.
La coloco al fondo
para que me cueste encontrarla
la próxima vez
que abra el armario.
Busco otra percha vacía
y cuelgo en ella las manías,
son muchas,
tendré que comprar perchas nuevas,
así que, por el momento
dejaré algunas fuera,
que todavía me pongo.
En la última percha
colgaré algún sueño perdido
que ya no me sirve.
Lo estiro bien,
con cuidado, con mimo,
por si tengo que volver
a ponérmelo alguna vez.
Lo pongo entre las perchas
de la nostalgia y la infancia.
Sigo buscando más perchas vacías,
quedan pocas,
y me cuesta encontrarlas.
Descubro la percha donde hace meses colgué la ilusión.
Hoy me apetece ponérmela,
me queda bien, me encuentro guapa.
Cierro el armario
hasta la próxima vez.
Nunca me ha gustado
colocar los armarios,
seguiré otro día. 

JULIO CORTÁZAR




Si de tu boca no sé más que la voz
y de tus senos sólo el verde o el naranja de las blusas,
cómo jactarme de tener de ti
más que la gracia de una sombra que pasa sobre el agua.
En la memoria llevo gestos, el mohín
que tan feliz me hacía, y ese modo
de quedarte en ti misma, con el curvo
reposo de una imagen de marfil.
No es gran cosa ese todo que me queda.
Además opiniones, cóleras, teorías,
nombres de hermanos y de hermanas,
la dirección postal y telefónica,
cinco fotografías, un perfume de pelo,
una presión de manos pequeñitas donde nadie diría
que se me esconde el mundo.
Todo lo llevo sin esfuerzo, perdiéndolo de a poco.
No inventaré la inútil mentira de la perpetuidad,
mejor cruzar los puentes con las manos
llenas de ti
tirando a pedacitos mi recuerdo,
dándolos a las palomas, a los fieles
gorriones, que te coman
entre cantos y bullas y aleteos.

ME ABURRO POR AQUÍ, ME ABURRO POR ALLÁ...

  Me aburro por aquí, me aburro por allá, haciendo esto o lo otro me aburro igualmente. O sea me aburro por los cuatro costados y me siento ...