Ahora vivo adentro y hacia dentro
vivo envuelto en mi propio caparazón
que poco a poco
y con tanto mimo y paciencia, he construido.
Y hago nido entre la carne y el hueso,
ahora soy un quiste pulsátil que late y crece con vida propia,
ahora soy un ser ocupante de espacio
estoy lleno de vida interior
y la expando y la esparzo
y hasta la mando a larga distancia.
Ahora bien
no invado nada
yo me asiento donde me dejan
y allí, sigo a lo mío
que es vivir sin molestar
y sobre todo es
hacer entrañable mi soledad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario