10 años dejándome los dedos en el teclado
y la verdad,
es que esperaba más de todo éste asunto.
Algún día y por no decir muchos
pensé que todos mis escritos y poemas
no llegarían a premio nobel...pero casi
es decir,
tendría que camuflarme por las calles de mi ciudad
y desaparecer cuando el sol me diera de cara.
Y nada de esto pasó,
y soy tan desconocido como antes
y grito y nadie se entera
y lucho y me he quedado sin dientes
y escribo y apenas digo lo que quiero decir.
Yo,
me sitúo frente al mar,
blandiendo mi espada de fuego
y siendo sincero
con las espaldas quemadas por tanta sal.
Al final
sol y sal y poco más.

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