LA ARAÑA


No es que haya desaparecido,

más bien me han dado por muerto,

las mismas leyes, las normas establecidas,

los dictados a pie de página, 

las memorias históricas oficiales,

los prólogos anticipados, 

los epílogos en el equinoccio,

los diccionarios de otras lenguas

y todos se han puesto más o menos de acuerdo,

en condenarme al ostracismo más absoluto.

Hasta a veces se ponen de acuerdo

los perfiles más contrarios a mi parecer,

ellos dicen, que si el fin merece la pena

ellos se juntarán y pondrán los medios más adecuados.

(el fin justifica los medios).

Lo que ellos no saben,

es que los medios acaban deformando al fin en si mismo.

Si usas la violencia

y para conseguir un fin pacífico,

al final acabas convirtiendo la paz final

en otro conflicto bélico y violento.

Y de toda esa telaraña solo se libra la araña,

que es la que nos ordena

defender la patria o lo que le convenga en cada momento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR