Ahora mismo
me giro hacia tí y no te veo.
pero ahí me quedo y hasta ahí llego y no más.
No me gusta dramatizar en cantidad,
ni llamar amor a un amor incomprendido,
además,
lo mismo que la arena se escapa entre mis dedos,
el amor y los sentimientos
tienen sus propias vías de escape
y en cuanto cierro el puño,
puedo sentir el vacío dentro de mi mano
y es cuando me doy cuenta
que todo aquello que antes me dolía tanrio,
se ha quedado hueco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario