LA FELICIDAD

 La felicidad que tú me diste
fue tan corta, tan fuerte y tan intensa
que a veces hasta recuerdo
como se deslizaba bajo mis costillas.
La felicidad debía ser infinita
pero en mi caso fue un espasmo transitorio
duró lo que dura un instante
y a la vez, me crujieron todos mis huesos
y hasta producirme
un delirio de amor incomprendido.
Y más tarde,
vino la resaca
y tomó forma de dolor insondable,
hasta que un día y no sé como fue...,
tuve un estallido dentro de mi viejo cuerpo,
al tiempo que salió una burbuja de oxígeno por mi boca
que me hizo recordar
que todavía seguía vivo.
Y en esas estoy ahora,
en seguir viviendo
y buscándome la vida.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

YO HE SIDO MUCHAS COSAS Y A LA VEZ Y AL MISMO TIEMPO

Aquí estamos de nuevo, buscando cosas, rebuscando en otras, removiendo pasados y no dando un punto a ningún remordimiento. Le hecho hecho es...