Mientras esperaba la llegada de mi hijo, ví pasar de nuevo al cojo de ayer y tampoco hoy logré reprimirme. Mi primer pensamiento, fue colocarle una cáscara de plátano debajo se su pierna buena y menuda hostia se metería. Menos mal que salió mi ángel bueno y me echó una bronca que no veas: ¡que si era un sádico, un animal sin escrúpulos, una mala bestia inmunda! y la verdad, que no me quedó otro remedio que reconocerlo, soy un animal con muy malas ideas. Después pensé, en que si el cojo sabía que había escrito sobre él y por si acaso, lo miré de refilón y como escondiéndome de su mirada y por la vergüenza que me produjeron mis propios pensamientos.
Me acuerdo cuando llegué a Chiclana (Cádiz), hará como 18 años (ahora, hará como 30 años), me llamó la atención unas pintadas que proliferaban por todo el pueblo y hablaban de la Nasa, decían más o menos: "no escucháis el zumbido en vuestros oídos, la Nasa nos está espiando" y más frases parecidas y sobre el mismo tema. Y yo pensaba; es simpático el colgado éste, pero eso no se lo cree ni él. Vamos, que para mí era un iluminado en pleno brote psicótico o en plena fase maníaca obsesiva. ¿Y ahora?, ahora pienso que tenía más razón que un santo, que realmente nos espían, nos espía la CIA, la NASA, los satélites y hasta el mismo Obama desde el Capitolio. Todos nos espían en un contubernio universal y judeo masónico y entonces, ahora ¿quién es el colgado o el iluminado o el simpático loco?.
Ahora ya sabemos que nos espían y que leen nuestro correos y las páginas web y todo lo que escribas por internet. Claro que entre tantos de miles de millones de personas, tendrán frases de alarma, por eso de ir descartando, sino no veas y por ejemplo, yo creo que les saltará la alarma: si ahora me cago en Obama, o digo, Yanquis asesinos, ya está, ya estoy fichado. O a lo mejor su método es con palabras clave, palabras que hacen poner en rojo su botón de alarma, su botón de posible terrorista. Y voy a probar con algunas posibles: Bin Laden, Torres Gemelas, 11-S, armas de destrucción masiva o armas químicas o aviones cargados de bombas, o Vietnam, o Corea del Norte. Hay tantas palabras clave en el espionaje yanqui que se podía escribir un libro sobre ellas. Pero bueno con éstas me llegan para estar ya y desde ya, en la lista negra.
Esta noche, cuando una nube tape la luz de la luna, vendrá a Es Castell (Menorca) o sea a mi pueblo, un helicóptero Apache y de él descenderán unos hombres vestidos de negro y enfundados con aparatos de visión nocturna. Se meterán en mi casa y me llevarán a Guantánamo. Si mañana no escribo nada, ya sabéis lo que me ha pasado y quedais advertidos y allá vuestras conciencias, pero aquí queda dicho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario