Ahora tengo lo serenidad
que antes no tenía
tengo el dominio del tiempo
y sé, cuando debo pararme
o lanzarme al vacío
o simplemente ponerme a andar o a correr.
Ahora me encanta la calma de un instante
y procuro que ese instante sea previo a tomar una decisión
y desde esas me va mejor por la vida.
En mi vida hubo épocas en que no tomaba decisiones
me ponía de perfil o me bebía otra cerveza.
Hubo otras en que era inundado por las dudas
y de ese círculo vicioso era imposible que saliera.
Y en una época de cuando era joven y desde hace unos años,
tomo las decisiones con pausa previa
y respiro profundamente antes de hablar
y hablo, digo, opino y decido
y hay otro salto cualitativo en mi vida,
lo que decido lo hago y estaba sin darme tiempo ni para respirar.
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