Yo quiero decir, que está muy bien analizar el pasado, pero sin olvidar el presente y lo que nos queda por delante. Y no es que me ponga en plan flamenco y que me importe una mierda nuestra procedencia, pero a lo que no estoy dispuesto es que las tradiciones se conviertan en nuestras cadenas. Si hay que romper con todo, se rompe, si hay que destrozar los prejuicios, se destrozan y se hacen añicos y entonces vendrán otros tiempos que quizás no conocemos, pero la duda es buena, la duda nos hace avanzar en la vida. Pues resulta que no, que la duda no está permitida, que ser un tío seguro de no se qué... es lo que más se valora en ésta sociedad de mierda.
Y si estás seguro y te has basado totalmente en el pasado, ya eres la hostia bendita, pues ya eres el puto rey de las tradiciones. Yo odio (es una forma de decir) a los que interpretan el mundo basándose en que siempre se hizo así y toman ese hecho como una verdad inamovible. Que nadie se sorprenda con que en estos tiempos negros en que vivimos resurgan los odios más ancestrales, las envidias más cochinas, las patrias feudales con sus castillos medievales y por supuesto que se imponga de nuevo la santa inquisición y venga a rodar cabezas y a mutilar cuerpos. Lo antiguo, siempre hay que verlo desde esta perspectiva, que fueron otros tiempos y que haremos lo que sea para no volver a ellos o sí y depende de como se montaban nuestros ancestros. Cosa que no hacen los yidahistas ni los católicos ultraortodoxos, ellos quieren volver a lo más oscuro, más temible e inhumano de nuestro pasado.
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