FORGES


 

"Cardiopatía", Cristina Peri Rossi

 

 "Nunca he podido

estar segura de mis sentimientos;

en cambio,

siempre lo he estado de mis emociones.

(Así es como deben producirse los

infartos)".


















OTOÑO EN CASA


 

JOAQUÍN CAMPS

 

A veces inventamos personas,
y las inventamos tan bien y tan a nuestra medida
que se hace muy difícil olvidarlas.
Y muy doloroso.
Es como si mataras algo en tu interior,
porque, en efecto, sólo es allí donde han habitado.

















 



WISLAWA SZYMBORSKA


Cuando pronuncio la palabra Futuro,
la primera sílaba pertenece ya al pasado.
Cuando pronuncio la palabra Silencio,
lo destruyo.
Cuando pronuncio la palabra Nada,
creo algo que no cabe en ninguna no-existencia.















HABLEMOS

 

Hablemos de atentados,
y de granadas anti persona.
Hablemos de muertos de primera
que estos si valen
y de los segunda que apenas cuentan,
y hablemos de pactos de conveniencia
y del poder de las civilizaciones
que se consideran superiores.
Hablemos de venganzas,
de todo el arte destruído,
del miedo sin contemplaciones,
del hambre de la guerra
y por supuesto,
hablemos del odio y de la xenofobia.
Y hablemos de todo esto,
pero hablemos claro y contundente:
"no habrá paz mientras se quiera guerra".



















QUE POCO DURA LA VIDA

 


Que poco dura la tarde,
y que poco dura la vida.
Que poco dura el amor en estado efervescente
y que poco duran los días otoñales.
Que corta...que corta...,
es la pasión ciega y desinhibida.
Somos carne,
carne putrefacta que será pasto de los gusanos.
Somos huesos,
huesos carcomidos por pirañas
que han salido de nuestras entrañas.
Somos tendones contraídos,
y haces de músculos relajados.
Somos partículas de aire,
de aire viciado, libre y contaminado.
Somos entelequias abstractas con dos piernas,
pensamos que tenemos soluciones para todo
cuando en realidad,
solo ponemos parches temporales.























ÁNGEL GONZÁLEZ


 

A veces cuelgo poemas del techo

 

A veces cuelgo poemas del techo

y como farolillos rojos en una noche de verano

los enciendo con la llama de mis dedos.

Otras veces entierro poemas entre las plantas de mi terraza

esperando que crezcan como crecen las flores de mi pequeño, 

pero coqueto y hermoso, jardín.

Hay días en que me pongo a escribir bajo la lluvia

y como si mi portátil fuera mi salvavidas

ante un improbable, tsunami

pues ahora sé... 

que nuncas podré ver.

En realidad

poco importa donde deje mis poemas,

ellos crecen y se amamantan solos

ellos son como la mala hierba

crecen en contra del tiempo y del viento

y sobre todo crecen...

en contra de todo lo que se llame, ley.

 



















Cristina Peri Rossi

 

Yo tenía cinco años. La maestra escribió en la pizarra: "Todos los hombres son mortales". Sentí un enorme alivio, un gran regocijo.
Esa tarde, cuando salí del colegio, corrí a mi casa y abracé muy estrechamente a mi madre.
"Qué suerte Mamita, tu no te vas a morir nunca!" le dije, arrebatadamente.
"Qué?" preguntó mi madre, sorprendida.
Me separé apenas de ella y le expliqué:
-La maestra escribió en la pizarra que los hombres son mortales.
Y tú eres mujer!. Por suerte, eres mujer, dije y volví a abrazarla.
Mi madre me separó tiernamente de sus brazos.
-Esa frase, querida mía, incluye a hombres y mujeres. Todos y todas moriremos algún día.
Me sentí completamente consternada y desilusionada.
-Entonces, por qué no escribió eso?: "Todos los hombres y mujeres son mortales"? pregunté.
Bueno- dijo mi madre, en realidad, para simplificar, las mujeres estamos encerradas en la palabra "hombres".
-Encerradas?- pregunté. Por qué?
-Porque somos mujeres- me contestó mi madre.
La respuesta me desconcertó.
Y por qué nos encierran? le pregunté.
Es muy largo de explicar, respondió mi madre. Pero acéptalo así. Hay cosas que no son fáciles de cambiar.
-Pero si digo "todas las mujeres son mortales"? también encierra a los hombres?
-No- contestó mi madre. Esa frase se refiere sólo a las mujeres.
Me entró una crisis de llanto.
Comprendí súbitamente muchas cosas y algunas muy desagradables, como que el lenguaje no era la realidad, sino una manera de encerrar a las cosas y a las personas, según su género, aunque apenas sabía qué era género: además de servir para hacer faldas, el género era una forma de prisión.





























DESPUÉS DEL TEMPORAL... (Hace 2 años)

 

Dicen que después del temporal viene la calma más apacible. Por tanto yo debía estar en modo calma, pues ha pasado por delante de mí viejo cierpo, todo un temporal de emociones, algunas son las habituales que hay alrededor de la muerte de alguien cercano (y en éste caso, fueron dos personas) y otras son más raras o menos reconocidas por mis antenas sensitivas... por ejemplo, el miedo a que esté llegando tu hora y porque como decía el otro, de cada vez los disparos y las bajas son más cercanas. Y ¿qué podemos hacer ante ello?...pues muy poco. Podemos dejar que el tiempo transcurra y porque tiene que transcurrir. Podemos tapar los mayores desaguisados que hayamos cometido (los que puedas, tampoco te hagas el mártir sacrificado) y sobre todo, podemos disfrutar de la paz después de las tormentas y dejar que fluya esa paz...Ahora bien, sin caer en la placidez tontuna del que flota porque es su filosofía de vida. Lo que sí podemos hacer es mejorar en nuestras relaciones diarias y hacernos más comunicativos y más amables con el entorno y con los demás, pero insisto...sin que eso nos lleve a darnos todos por el culo...pues estoy convencido que para ello hay que seguir siendo selectivos, cuidadosos y nunca dejar de ser cariñosos con los que se merecen ese cariño. Qué vamos a ver, que de repente no nos pongamos todos en fase trascendental y de exaltación de la amistad y porque morir vamos a morir igual y por muy amigos que seamos también moriremos igualmente. Nadie se va a salvar de la quema final...
Que sí...que hay que aprender y mucho de los que se han ido. Él (mi compañero de trabajo)... tuvo una muerte repentina y eso lo envidio y en cambio Ella (mi amiga)... tuvo una muerte larga y agónica y que supo llevar con la mayor dignidad del mundo y eso sobre todo, lo admiro y lo honro y hasta me saco el sombrero. Quiero decir que para mí no hay mayor honra en ésta vida que saber morir con dignidad y Ella, ya en vida me lo había demostrado, pero cuando tuvo a la muerte de cara, me lo acabó de confirmar. Hay gente o personas que saben morir con dignidad y no con dignidad doblegada y pedigüeña tipo cristiana, sino que saben morir con la cabeza bien alta y mirando a los ojos de los que le rodean y porque no hay nada que ocultar y si hay, dará igual y porque morirá igualmente con toda su dignidad íntegra y porque los defectos de uno también han sido aceptados. Pocos o pocas pueden decir esto, pero además pasa que nunca lo van a decir y porque su dignidad se mueve dentro de su amable silencio y se llevarán ese secreto a la tumba...pues ellos son de otros mimbres y no tienen necesidad de halagos y carantoñas innecesarios y les llega con la carga emocional más espartana y más básica y con un simple beso y un simple adiós... cargan su mochila emocional para su próximo viaje. La sencillez de todos su actos, les precede. Y la Humildad y el saber estar y no podía faltar, su gran Humanidad.
Pero así es la vida y unos mueren de repente (y yo me pido eso) y otros mueren largamente y su agonía se hace dura, duradera y por desgracia, sumamente dolorosa. Pero nadie tiene el poder escoger su tipo de muerte, (salvo claro está, el que se suicida) y a los demás nos toca esperar primero...el momento, segundo... la forma de muerte y tercero...el como y su tiempo de evolución. Y el porqué...queda sin contestar, pues lo evidente no se contesta, ya que una vez que hemos nacido ya sabemos que hemos de morir igualmente. Y esa es ley de vida y no se hable más...Pero igualmente a mí y vuelvo a insisitir en el tema, me gustaría morir dignamente...

















LOS AMIS



Y las personas que todo lo personalizan, o sea que todo lo que se diga y cualquier tema que se toque, a ellos les ha pasado y si no es a ellos, es a un amigo íntimo, o a un vecino o simplemente lo han leído pero siempre lo han leído antes que los demás. El caso es seguir dando la nota y tener la voz cantante. El otro día me tocó un plasta de estos, el tío no paró de repetir lo que los demás decíamos, pero cambiando los protagonistas y añadiendo alguna nota discordante, claramente improvisada y para disimular que no era una copia exacta. Menudo plasta de tío y era para mi desgracia un compañero de mi trabajo, pero por suerte nunca coincidimos, pues estamos en distintos turnos. Si me llega a tocar con él, yo juro que éste tío ya estaba empalado. Y yo, sí yo, me encargaría de ello.
Estos elementos no pierden comba y si ven que la conversación no gira hacia donde ellos quieren, interrumpen a todos y meten su historia, con calzador, o sin él o simplemente por su puta cara. Su fin es claro, es volver a ser el centro de la movida. A éstas personas tan manipuladoras no les importa mentir o falsearlo todo, con tal de que ellos o sus amigos salgan como héroes de un cuento inventado. O eso piensan ellos, que salen como héroes,porque los que realmente salen son los demás y como si tuvieran un petardo en el culo. Hombre, siempre hay un alma caritativa, que le aguanta su egocéntrico discurso y hasta el final. En fin, siempre hay y habrá tontos en el mundo.
Es un tipo de personas, por llamarle de alguna manera, que si les das la mano te pillan el brazo y cuando te das cuenta, ya los tienes metidos en tu cama y pidiéndote que les lleves el desayuno. Si le das tu número de móvil, cuidado, porque si están aburridos, te fríen a llamadas y peor si se enteran que tienes wasá, pues te van a matar a base de mensajes. Ellos no entienden, que llegado a tres o cuatro mensajes tú ya dejes de contestarle, digamos que por saturación mensajera y porque te importan un huevo los mensajes del menda, pero con ellos no va así la cosa, pues ellos se consideran personas tan interesantes como para no ser oídos por el resto del mundo y por eso, tu silencio no lo llegan a entender. Es como el que cuenta cuentos y cuentos y llega un momento en que se los cree, pues estos elementos son así, de tanto inventarse y reinventarse, llega un momento es que se consideran imprescindibles. Y os juro que es lo contrario, que son los sujetos más prescindibles que puedan existir, incluso echo más de menos a mi querido perro, que a un sujeto tan engreído y tan plasta. A los engreídos, que les den por el culo.
Los engreídos son fantasmillas y su creatividad la malgastan reiventándose historias. Ellos saben, entienden, conocen, y siempre estuvieron allí antes que tú y además también estuvieron de safari por África, Sudamérica les resulta pequeña, Nueva York, buff!! Nueva York, la conocen como la palma de su mano y en la Patagonia estuvieron antes de que se montar el circuito turístico y así, y así, y así.
A mí, a mí, a mí, ellos son así, son los AMIS. A mi pasó lo mismo, a mí me duele más que a tí, a mi, a mi y a mi. Sueñan y viven para el AMI y no pueden disfrutar de nada sin él, sin su AMI. Lo mejor de todo, es cuando se encuentran dos AMIS, entonces es una lucha de ombligo de titanes. Bueno sí, a tí te pasaría eso, pero a mí me pasó mucho más que eso y el otro contraatacaría, sacando otro tema mucho más fantasma. Y lo más cojonudo de todo, es que los AMIS después duermen a pierna suelta, son seres sin conciencia, ni tienen remordimientos, son felices viviendo en su globo terráqueo y sintiéndose el puto eje del mundo. ¡ Hay que joderse!.





























COSAS MÍAS

 

"Siempre llamó mi atención esa dulce luz tras las ventanas, de por ejemplo, ese tercer piso de la casa de ésta hermosa fotografía. Soy un alma sensible que de vez en cuando se alimenta de ternura externa, aunque para decirlo sinceramente, casi siempre me alimento de la mía propia. Me encanta el sentirme un alma entrañable y sensible que se ilumina con la luz de la luna y que si no hay luz de luna, me alimento con la luz del resto de los astros o a veces, como ésta vez, que se enamora de las luces de una galería. A veces, con una estrella fugaz me llega para varios años y más. Y la luz de un mechero me sirve para encender la chimenea y unas cuantas velas que mueven la luz de forma ondulante en ésta noche otoñal y casi invernal. Yo en éste mismo momento, viviría en ese tercer piso y me importaría un huevo, que no tuviera ascensor. A veces, para disfrutar de la belleza, primero hay que sufrirla".


 















Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...