Una vez encontró en los arbustos
una jaula de palomas.
Se la llevó
y para eso la tiene
para que siga vacía.
Amigos...amigos...
Añoro a mis amigos y amigas,
a los que un tiempo lo fueron,
a los permanentes que apenas me quedan,
y a los que lo fueron en sueños.
Añoro a todo tipo de amigos,
a los de llorar en su hombro
a los que te abrazaban tiernamente,
a los que te acariciaban con la mirada
y hasta los que hacían que te escuchaban.
Añoro las conversaciones de amigos,
los paseos entrañables de media tarde,
las risas cómplices,
las pausas en el camino,
el hermanamiento académico,
la calidez en el entendimiento
y la forma de decirse
¡te quiero!
sin tener que decirse nada.
Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...