ALMA Y MAGIA

 Yo no sé si con el tiempo me estoy volviendo demasiado legal y se me ve venir por donde vengo y hacia donde voy. A veces tengo miedo a ser demasiado transparente y que sin darme cuenta puede que haya dejado mi alma al desnudo, pero supongo que son peligros que uno asume al escribir de esta forma y manera (algunos le llaman, escribir a lo crudo). Si uno quiere interpretar al mundo, cuidado porque el también te interpretará a tí. Y hablo de mundo, pero podría hablar mejor de personas.

No sé quién me dijo un día, que me descubro demasiado y puede que sea cierto, pero no por ello me arrepiento de hacerlo. Porque el problema no está en dejarse ver las "debilidades" personales, porque a lo mejor esas debilidades yo las convierto en fortalezas o eso intento, intento revertir la valoración de las personas o  de mi persona en mi caso en concreto. Yo sólo pretendo ser humano y no ser un superman del espacio, yo adoro la debilidad humana, la imperfección, el defecto e igualmente que adoro las fortalezas, el tener una opinión clara y concisa, el analizar las cosas, el pensarlas dos veces, el decidirse y el pronunciarse.

Toda esa suma de valores hacen al ser humano y sin olvidarse de los sentimientos, o esa energía parabólica que recorre nuestros receptores más íntimos. Si al final, somos máquinas casi perfectas, con una parte de chatarra y otra parte de material nuevo y reluciente y dentro tenemos un gran disco duro y sobre todo tenemos un alma, un alma inexistente a los ojos humanos, pero que todos sabemos que la tenemos y no todo tiene que ser palpable y demostrable físicamente, siempre nos queda algo de magia y es esa magia la que carga de energía a esa parte de n0sotros llamada ¡alma!.

 




¿Como voy a olvidarte?,

 

¿Como voy a olvidarte?,

si todo lo que respiro

si todo lo que trago y beso

si todo lo que como y bebo

¡me sabe a ti!.

Es que respiro aire viciado,

y en el amanecer como de tu mano,

y vivo...y vivo dentro de tu ser,

y ese picor que nunca para, soy yo,

y ese resplandor que te alucina, soy yo,

y esa ternura que te sonroja

soy yo recorriendo la luna

y de un beso me salen un millón de besos

y de una palabra me nacen poemas y versos

y es que el aire está contaminado de tanta pasión.


















¡NO!


¡No!..., no...
el día de hoy no es un día embrujado,
no hay sapos que hablen,
no hay culebras que sisean a mis pies,
no hay duendes sueltos por las aceras,
no hay farolas con la magia de imaginar,
no quedan peatones al llegar la noche más oscura,
y todo discurre bajo la lluvia,
y tras esos golpes de intensa lluvia
todo se humedece tras el cristal,
pero casi nada se enternece dentro de mi casa,
hay aspavientos de sentimientos,
hay luces de neón difuminadas
que dibujan deseos que algún día tuvimos
mientras el aire acaricia mi cara,
y yo me quedo mirando como la lluvia cae del cielo.



















ME COMPARO


A veces voy y me comparo y me comparo con quién no debo compararme, por ejemplo con un buen escritor o con un buen y mejor pensador y claro al final, siempre salgo perdiendo, primero porque no soy nadie, segundo porque no soy escritor y solo soy alguien que escribe y tercero porque me falta léxico y demasiados libros por leer. Yo solo puedo decir, que me apaño como mejor puedo y que siempre puedo sacar mi última carta, esa que dice que si no te gusta lo que escribo no hace falta que me leas y porque además das una patada a una piedra y salen millones de personas que escriben y casi os puedo jurar, que cada una de ellas se considera el mejor escribiente del mundo y que si los demás no lo leen, es porque los demás, no le entienden. El ego puede con todo y además, cuando sale y florece, arrasa con todo y por eso en el mundo has quedado tú y tu mierda de escrito y como solo ha quedado tu escrito en pie, pues será el mejor de todos por cojones y porque no queda otro remedio. Algo de ego hay que tener y porque sino no te pones a escribir paridas y sin tener verguenza ninguna.

Hay que tener algo de ego, algo de ciego, algo de sordo y algo de sinverguenza. Con verguenza no escribes nada y con demasiada exigencia sobre ti mismo, tampoco. Hay que ser un poco calavera y un poco lanzado y que te encante el riesgo y la velocidad del vértigo. Si escribes pensando que lo que vas a decir es el novamás, el hostión al te arriesgas estará asegurado. Hay que ser un poco duro y frío y calculador y no darle importancia al ofendidito que siempre te vas a encontrar y porque digas lo que digas, siempre habrá un ofendidito que se sienta atacado o herido por tus humildes o no humildes palabras. La humildad es importante, hay que ser humilde, aunque a veces y según al que tengas delante, tendrás que tirar de tu orgullo más visceral y morderle en el cuello y antes de que te lo haga él. Al enemigo ni agua.





















Mi lengua siempre está herida

 Mi lengua siempre está herida

son tantas las palabras que salen por mi boca

además, de las que se quedan y no salen

y que escondo bajo la lengua

o en una oquedad de muela picada debido a mi maltrato.

Bajo mis sábanas

también escondo palabras

palabras que en una noche se cayeron de un sueño,

algunas serán mágicas y majestuosas

en cambio otras serán pueriles y sórdidas

y porque no todo van a ser sueños bonitos,

habrá muchas pesadillas

y sueños que empiezan bien

y acaban fatal

o al revés

y todo empieza mal

y acaba bien.

Hay tantas posibilidades

del porqué mi lengua está herida

que la única cura que me queda

es quedarme en el más absoluto de los silencios.





















Belén Reyes ( SUCEDE QUE MI BOCA ES UNA HERIDA)


Los ojos de las monjas son medallas.
Mirando al mar de espaldas a la vida.
La espuma es una novia destrozada.
Sucede que es muy tarde para todo
Los niños saben cosas y se callan
Mirar el mar sin ti, me da tristeza.
Soy la costra de un sueño, si me levanto sangro.
Sucede que me duele aquí, en la tinta.
La radio tiene manos y te abraza.
Tengo que irme ya, me necesito.
Copular con la luz, de sombras, me embaraza.
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NO PUEDO DEJAR DE PENSAR EN TÍ

 

No puedo dejar de pensar en tí,
no puedo dejar de pensar en tu cara,
en tus ojos,
en tus labios,
en el aleteo de tus pestañas,
en tus pechos pequeños pero valientes,
en la suavidad de tu pelo,
y en tu mirada llena de vida,
y todo y todo lo llevo dentro,
y lo llevo en el almacén de mis sentimientos.
Si pienso en tí,
a veces me pierdo,
pues no me encuentro a gusto,
tengo un resquemor o una inquietud,
o una corriente eléctrica recorre mi espalda,
y se desplaza desde los pies a la cabeza cabeza.
No puedo dejar de pensar en tí,
no puedo, por mucho que quiero,
es como un tumor dentro de mi cabeza,
o como una obsesión maldita,
y si me lo extirpo, me duele,
y si no lo hago, me escuece,
entonces, ¿que hago yo?,
si no puedo dejar de pensar en tí,
aunque me ponga del revés,
y aunque me retuerza como una serpiente,
la idea sigue persistiendo en mí,
está dentro de mi esencia,
y está clavada en el centro de mi alma,
y escuece, duele y sangra,
y eso me produce hemorragias que me desangran.
No puedo dejar de pensar en tí,
pero sí puedo pensar en otras cosas,
puedo sentir el paisaje de una montaña,
o ver como desciende un río todo atrevido,
o notar como las olas me mecen,
o como la luna me enternece,
puedo sentir tantas cosas,
que a veces se me olvida,
que no puedo dejar de pensar en tí.
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Yo soy "BLR"

 

Pues ahora que está tan de moda poner iniciales a los nombres de las personas, yo paso a llamarme "BLR" (Bruno Lamoso Rey) y os juro que soy mejor que los tridentes de ataque del Real Madrid y del Barcelona, léase la BBC (Bale, Benzema y Cristiano) y la MSN (Messi, Suárez y Neymar). Soy mejor en todo, menos claro está, jugando al fútbol. Pero tengo más coco que los 6 juntos, tengo más inteligencia emocional y soy mucho más listo y además, con algo me tengo que compensar, porque por pasta no es, pues ni 20 como yo y currando hasta la muerte, le llegaremos a uno sOlo de ellos, a la altura de sus talones.

Porque cabría preguntarse: ¿quién es más listo?, ¿ellos o yo?. Ante un jurado popular ellos ganarían por goleada y que a mí que me fueran dando por el culo con mis listuras de inteligente. ¿Pero ante Dios;?, ante Dios ya depende de los rezos que cada uno haga y de si te confiesas o comulgas y de si no te dedicas sólo a pecar. ¿Y ante una persona sesuda y con principios?, pues depende de que principios hablamos, porque los hay que sólo quieren tener la pasta por delante y los hay, que prefieren ver el arco iris desde una playa pública y bien protegida, que desde la terraza de un chalet privado.

Y yo lo que prefiero es ver el arco iris desde una playa privada y con un wiski en una mano. Yo no quiero una simple parcela, yo quiero que hasta donde llega el horizonte, que todo eso sea mío. Y ni público, ni privado, sólo mío. Chalet de lujo, playa virgen y de arena blanca y fina y con unos cuantos cocoteros y por eso de que si tienes sed y no te apetece levantarte, pues le das a un coco y lo abres sin más en dos partes. Vamos que me gustan las playas naturales como la vida misma. Porque una cosa si que es verdad: qué hay muchos que ensalzan lo público y cuando en realidad estás deseando que todo eso, sea suyo y muy bien acotado. Y yo soy uno de esos, pero lo digo a la cara y además os juro, que no tengo remordimientos.
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Georgina Herrera. Blog "Glup 2.0"



"Oriki para las negras viejas de antes"
En los velorios
o la hora en que el sueño era ese manto
que tapaba los ojos
ellas eran como libros fabulosos abiertos
en doradas páginas.
Las negras viejas, picos
de misteriosos pájaros,
contando
como en cantos lo que antes
había llegado a sus oídos,
éramos, sin saberlo, dueñas
de toda la verdad oculta
en lo más profundo de la tierra.
Pero nosotras, las que ahora
debíamos ser ellas, fuimos
contestonas,
no supimos oír; teníamos
cursos de filosofía,
no creímos,
habíamos nacido demasiado cerca
de otro siglo. Solo
aprendimos a preguntarlo todo
y al final, estamos sin respuestas.
Ahora, en la cocina, el patio,
en cualquier sitio, alguien,
estoy segura, espera
que contemos lo que debimos aprender.
Permanecemos silenciosas,
parecemos tristes
cotorras mudas.
No supimos
apoderarnos de la magia de contar
sencillamente
porque nuestros oídos se cerraron,
quedaron tercamente sordos
ante la gracia de oír.
Todas las rea

























Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...