SACRIFICIOS

Pues ya vamos progresando, el día va avanzando con su lastimera realidad, que no llega a ser patética, pero casi. Bueno, dicen que hay que saber pasar, que hay que ir al grano o a lo importante y para eso hay que saber sacudirse las ladillas del cuerpo, pues ahora con los profundos calorcitos, proliferan a destajo. Vamos, que hay que saber discernir o desglosar lo importante de lo absolutamente banal y entonces aquí entra de pleno ésta frase: vayamos por partes.

Sin perder de vista y nunca el objetivo, vamos a ir resolviendo problemas. Primero, tengo que ducharme y porque tengo que ducharme. Segundo, tengo que hacer uno de esos recados que tanto me gustan. Tercero, tengo que pensar en el tema comida y para 4 personas. Cuarto y el más importante, tengo que hacer la maleta para el famoso viaje y llenarla de ropa y sobre todo, de deseos y hasta los topes. Quinto, hoy tengo que vender la misa del billar y por quitarla del sótano y por ganar ese espacio, mis hijos y yo ya no jugamos a meter las bolas, jugamos a meter otras cosas. Bueno que no me oigan, porque les entraría vergüenza ajena.

Día como otro cualquiera, sólo que hoy es Miércoles y es como otro día cualquiera del Verano, sólo que hoy es Miércoles y exactamente me quedan dos días para emprender mi aventura. Esto es importante, pues en éste viaje se decide el destino del mundo, por lo menos de mi mundo, que no es menos importante que el resto del mundo. Necesito recargarme para el largo Invierno que me espera y decidir unas cuantas cosas pendientes, que aunque sé que no decidiré ni un huevo, por lo menos sé que les daré vueltas. Total las decisiones se toman en un momento y además cuando les cojes el truquillo, las decisiones se toman como chorizos. Y además, tanto decidir ¿para qué?, acaso para hacerte el interesante y demostrar que eres un tío decidido y no un vainas indeciso y dubitativo. La mejor hora de tomar decisiones, es de buena mañana y con un buen y sabroso desayuno y eso de consultar con tú almohada ya está anticuado, en la cama y sobre ella, sólo se deben ejecutar sacrificios humanos o sexuales.

¡QUÉ NO SE DIGA!

Repasados los correos y una ligera visual al Facebook y ya estamos en marcha con el Blog. Son las 9 de la mañana y de ,momento calienta el sol pero no tanto, ahora el día va ser de bandera. Desayuno en el bar de la esquina y los pertinentes saludos mañaneros de ¡buenos días! y pensando por dentro y que os vayan dando o por lo menos a algunos. Tostada de tomate, aceite y jamón serrano y dos cafés con leche y por supuesto, una ojeada a la prensa local. Llevar a uno de mis hijos al Aeropuerto, pues se iba de viaje a mis tierras gaditanas y el cretino no se quiso añadir a parte de mi viaje, pues podía empalmar viaje el día 12 conmigo y seguir hasta el día 18 de Agosto.

Él se lo pierde, se pierde unas buenas cuchipandas y el rico fresquito del Norte. Estoy haciendo tanta propaganda de mi viaje, que a lo mejor estoy poniendo el renglón demasiado alto. Tío, es un viaje y es un viaje como otro cualquiera, aunque voy sólo y no sé el porqué, pero eso me anima más. Quizá porque hace siglos que no viajo sólo y sin establecer un rumbo fijo. A lo que diga la moneda, si sale cara, voy para un sitio y si sale cruz, voy para el otro. Vamos igual que yo decidí estudiar Medicina, cara, era Medicina y cruz, era Biología y salió cara...sólo que pasó que a los 2 años de carrera ya me estaba gustando la Medicina.

Si en ésta vida casi no se puede decir nada, porque hasta el juramento más oscurantista se puede romper o cumplir. Y quién lo iba a decir que yo sea Médico porque salió en la moneda. Mira que si sale Biología, ahora estaría dedicado a una cosa, a la Enseñanza y porque casi todos los Biólogos no tienen otra salida. Sería el maestre Liendres, el que todo lo sabe sin prepararse un temario, pero eso sí, tendría mis 5 meses de vacaciones al año. O sea tendría mucho tiempo y poco dinero, poco dinero para rellenar 5 meses de vacaciones y no para vivir normalmente. Pero ahora sabemos que no fue así, que soy Médico o soy Médico y casi que hasta que la muerte nos separe. Me pienso jubilar cuando me salga mi primer gusano o sea cuando esté medio podrido y hasta ahí seguiré impartiendo mis enseñanzas magistrales. ¡Qué no se diga!.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...