¡POR AHÍ, NO PASO!

A veces tengo la sensación del "hombre hueco", de vacío por dentro y aparente por fuera, de mantenerme gracias a lo hecho otros días o en otros momentos, a que si hice algo fue gracias a otros, a que vivo del cuento y a que no me encuentro... Lo dicho, sensación de "hombre hueco" y de "árbol seco"...Menos mal que esa sensación solo me dura un par de minutos y es como si de repente la sangre inundara mi cerebro. Pueden ser pequeños Ictus cerebrales, pequeñas isquemias transitorias o pequeños lapsus de sangre y claro, después de una obstrucción viene la alegría y por eso y de repente, me inundo de pensamientos positivos. Son sombras de riego, son manchas en mi cerebro, son incendios controlados...

De momento están controlados y me supongo que más adelante y cuando tenga más años, se harán más crónicos y más importantes y bueno y ahí, empezarán los problemas de memoria y que por mala suerte, suelen comenzar por la memoria reciente y entonces ya no me acordaré de estos últimos 5 años brillantes, de mis últimos amores y sus sabores y sinsabores, de como me puse a escribir sin tener puta idea del tema, de como anduve loco del coco y saltando de brote en brote, me acordaré cuando era pequeñito y un mamoncito, cuando llamaba a mamá y cuando cagaba dentro de un pañal y también como se desbordaban de mierda.

No sé, cuando empiece a aterrizar dentro de ese estado espero que me de tiempo a avisaros y a avisarme a mi mismo, quizás llame a mi psicóloga de cabecera y para contarle toda la verdad sobre mi infancia...quién sabe?..a lo mejor ella tiene razón y yo viví completamente engañado, a lo mejor mi infancia fue una auténtica mierda y quizá en mi último estertor me daré cuenta de ello...pero no creo, porque antes de cargarme a mi infancia me cargo a la psicóloga...y es que por ahí ¡no paso!.

¿QUÉ PUEDO HACER POR TI? (Poema)

¿Qué puedo hacer por ti?
puedo decirte que te he olvidado,
que ya no sangro, que ya no lloro,
que ya no siento nada,
y ¿puedo decirte la verdad?...,
que no del todo,
y que se mezclan lágrimas y sangre,
que me faltan tus ¡buenos días!,
que me aburro por el día
y que no duermo por las noches,
que me falta tu risa y tu sonrisa,
que añoro la brillantez de tu mirada,
y tus ojos, la bondad de tus ojos,
y tus pecas salpicadas por el caos,
y tu pelo de rubio acero,
y tus manos largas y afiladas,
y tu nuca deliciosamente rica,
y tus huecos, tus rincones, tus cuevas,
y tus estremecimientos y suspiros,
todo se cubre de óxido y de marrón corroído,
y ¿sabes lo que no me puedes quitar?,
los recuerdos, los momentos, los instantes
y esa mano que acariciaba mi cuerpo.

POBRECITO DE MI...

Hoy me levanté a las 6 de la mañana y como si me hubieran metido un cohete por el culo...y era de noche, de puta noche cerrada. No sé, desperté y ya está...y ya se pusieron en funcionamiento todos mi circuitos vitales, como si alguien me estuviera esperando a las 6 y cuarto y yo quisiera ser puntual. Ya nadie me espera a esas horas, hace unos meses sí, aunque fuera a nivel de mensajes y no sabéis como esperaba unos ¡buenos días!...y el ¡que te vaya bien el día!. Y ahí entendí que el ¡buenos días! es mucho más que un saludo mañanero, es también un feliz deseo, un ánimo, un estímulo. Claro que ahora, me doy los ¡buenos días! a mi mismo, pero no es lo mismo, ni de coña es lo mismo. Falta la ilusión de la otra persona, falta su amor, su pasión, sus deseos...

Pero también mi madre me decía: "hijo tiene que saber adaptarte a todo" y mira por donde y a éstas alturas, salen todas las puñeteras frases de mi madre. Aunque algunos dicen y teorizan que con la vejez se regresa hacia tu tierna infancia y puede y solo puede que yo esté regresando a mi período del paleolítico. La verdad es que las regresiones me gustan e incluso me gustaría llegar más lejos que mi infancia. Por cierto y ahora recuerdo que mi psicóloga me dijo que mi infancia fue triste y melancólica y que si yo pensaba que mi infancia había sido feliz, es porque no profundicé suficiente en ella y que me quedé con la superficie.

Al final da lo mismo, pues como a una tía de éstas, como a una psicóloga que se lo cree, le entre la paranoia de que tu infancia fue una puta mierda, no te librarás de ella hasta le digas que sí, que tu infancia fue una auténtica mierda, porque en eso consiste su historia..., en destrozarte la tuya. Pues acabé escribiendo su versión de los hechos y bueno, mi infancia fue terrible y pobrecito de mi y que infeliz fui y que amargado y que mala era mi madre y que buenecito era yo...Si al final no es para tanto, les das un poco de manteca y se quedan todas contentas...y pobre cito de mi...

OTRO GALLO CANTARÍA...

¿Como transmitir la emoción de las historias?, ¿como trasmitirlas?, pues no sé, supongo que escribiendo y escribiendo y escribiendo y hasta que le cojas el punto o no sé lo cojas, porque no siempre se puede llegar a él. Saber transmitir tus emociones, qué quimera y yo daría un brazo o una pierna por saber como coño se hace. De todas formas siempre está bien guardar o tener ese misterio y porque sino lo tuviera quizá a éstas alturas estaría subido a la parra y bueno, quizá y también fuera un escritor de fama. Bueno podía pero no es y esa es la puta realidad, soy un principiante con 60 años y eso me marca, no tengo toda la vida por delante. Y de ahí, que tenga tanta prisa, que devore el tiempo, que para un minuto es para otros una hora. Yo no pido a los demás que se adapten a mis tiempos, pero si pido que los demás acepten mis tiempos o mi voracidad o mis prisas. Yo tengo que aprender a toda hostia y ese es mi signo y es mi bandera.

Mirar, yo he aprendido mucho en estos 5 años, pero ese mucho no me complace ni me deja satisfecho...yo quiero más, mucho más y es que en éste aspecto mi ambición es ciega. Y hay que ver por donde ha salido mi lado más ambicioso y es que yo pensaba que no era excesivamente ambicioso, que lo era algo pero no tanto y mira por donde saltó la liebre y ahora me doy cuenta que acabé cumpliendo el gran consejo de mi a veces amada y otras veces odiada madre: "Hijo sé ambicioso, porque sin ambición no serás nadie". Pues madre, he tardado 60 años en darme cuenta que había que ser ambicioso. Nunca es tarde cuando la dicha es buena, dice uno de esos refranes tan patateros.

Y es que, el que no tiene prisa es porque le sobra el tiempo o es porque se muere de aburrimiento, pero los que estamos activados por sustancias anfetamínicas (metafóricamente hablando) necesitamos que los días duren el doble o el triple. Yo ahora voy como una moto, llevo 5 años hiendo como una moto y de gran cilindrada y no quiero pararme ni para follar...primero, porque no me dejan y segundo, porque o me pongo a follar en plan conejo o no pierdo ese tiempo tan preciado. Claro que esto lo digo porque ahora no tengo ninguna posibilidad de follar...porque si realmente la tuviera, otro gallo cantaría...


NUNCA RUEGO

No sé vosotros, pero yo me encuentro distinto, distinto a hace tres días, distinto en solo una cosa: que ahora fumo menos de la mitad que antes, casi dos tercios menos. Si antes estaba por encima de los 30 cigarrillos al día, ahora ando sobre los 13 y a pelo y sin tomar nada de nada y quiero llegar a 10 y ahí empezar con medicación de apoyo y estoy seguro que saldré hecho un hombre nuevo. Yo tengo que animarme o acaso va a venir alguien a decirme que bien lo haces, eso no ocurre y eso solo ocurre utópicamente, bueno, hablo de mi caso y no hablo del de otros. A lo mejor algunos tiene apoyo del Gobierno o de su Sindicato o de su círculo de amistades y les colman de ánimos y de ofrendas florales, pero en mi caso eso no ocurre y porque Gobierno y Sindicatos lo tienen muy claro conmigo y además, yo no tengo ningún círculo de amistades, yo cabalgo solo por ésta puta vida, soy como el Llanero solitario.

¿Y estoy orgullosos de ello?, pues no, porque yo tuve mi círculo de amistades y me lo fui cargando porque soy así, bueno, alguno de ellos también me ayudaron. Pero sí, yo fui muy descuidado con mis amistades y la falta de detalles fue lo que carcomió esos vínculos afectivos. Yo pasaba y a mi que me las dieran todas, digamos que mi teoría de tener detalles cuando me saliera de los cojones, cosa que me sigue pareciendo muy bien, pinchó y entonces, los pequeños detalles pasaron a ser ilusiones ópticas. Detalles cero y así me fue. Hace 5 años intenté reconstruir toda ésta historia y pedí perdones y me harté de decir "lo siento"...

Y ¿qué pasó?, pues que nadie me respondió...No sé, quizá pasó demasiado tiempo sin saber nada de mi, quizá las personas amigas me ven de otra manera a como me veo yo, quizá me ven más fuerte, más integro, más completo de lo que yo me veo, quizá piensen que yo no necesito a nadie, que voy de sobrado, que soy más que autosuficiente, que en general los demás me estorban, que cuando digo "te quiero" es por quedar bien y que realmente no lo siento...pues lo siento mis queridos amigos, porque todo ese montaje es una puta mentira: necesito de los demás como cualquiera, quiero y mucho y son completamente sincero, ahora sí, jamás me veréis rogando vuestro cariño. Yo nunca ruego y solo pido.

QUEDA MENOS...

Bueno, pues aquí estamos de nuevo. Hoy es Miércoles y es día 5 de Octubre y por supuesto queda menos para Navidades...la gran referencia anual, buena esa y la del Verano, pero la de las Navidades es más entrañable y familiar...es más cariñosa, más íntima, más de vuelve a casa por Navidad...y la, la, lá...Antes y cuando era un puto adolescente y de esto han pasado varios siglos, no me gustaban las Navidades y porque las veía como el colmo de la hipocresía. Bueno, era la visión que yo tenía del mundo y en donde todo era una puta hipocresía y además yo de adolescente era sumamente radical, ahora también lo soy, pero creo que me he suavizado un poco y además pensaba que mis experiencias eran las de todos, es decir, trasladaba mis malos rollos hacia los demás y si yo tenía una muy mala historia con las Navidades pensaba que todo dios la tenía.

Pensaba que todo era un montaje y una parodia y en cierta forma lo sigo pensando, pero también sé reconocer que no todo dios tiene que pasar por las mismas experiencias, que la vida no es solo cara A y cara B, que hay más caras y más historias. Y creo que en esto ha pasado una cosa, una gran cosa, que he tenido tres hijos y así he conseguido ver las Navidades desde otra perspectiva. Digamos que he visto su lado más entrañable y que si tu quieres y los demás también, seguro que le encuentras su lado afectivo. Los hijos te hacen cambiar en todo y menos mal, porque consiguen que seas o que te conviertas en una persona más flexible, más humana, menos rígida y más maleable.

Que sí, que lo puedes conseguir igual con o sin hijos, pero que en mi caso así fue. Tampoco penséis que me he hecho adicto a las Navidades, porque volvemos a lo mismo, no todo es cara A y cara B. Pero bueno, aprendí a cogerle su rollo, su parte amable y familiar. Aún tengo a mi hijo pequeño que se frota las manos cuando habla de las Navidades y es alucinante ver como se le iluminan los ojos...y yo ante esto ¿qué puedo decir?, ¡pues que vivan las Navidades y la madre que las parió!. Ahora sí y ya puestos en el tema, las quiero a todo trapo, con luces por todas las calles, con música empalagosa de villancicos, con copos de nieve, con trineos, con camellos, con.......

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...