LA FURGONA (Sueño de verano)

Acabada la faena de pintar la mona, digo el sótano, que menuda pasada como ha quedado y lo que había en él acumulado, trastos y trastos y más trastos. Pues de nuevo me siento ante el teclado. Ahora ya son cerca de las 9 de la noche y el ambiente está recalentado, hace mucho calor o yo tengo mucho calor y yo que sé lo que tengo. Y es que estoy cabreado conmigo mismo, mira que pringar la noche de San Juan y ahora sólo me queda un día para que empiece la tortura. Si por mi fuera me pondría enfermo y en consecuencia de baja, pero tengo la mentalidad del pringao y no soy capaz de hacerlo. O sea que desechemos la idea, porque sino me voy a volver loco.

                       Tengo la sensación de que cada vez que hago algo, algo nuevo surge. He encalado el sótano, he pintado los muebles y ahora que está todo recién pintado, se me ocurre que tengo que pintar el suelo con clorocaucho y es que éste caserón nunca se acaba, parece el palacio de Versalles en reformas. Y aún no puedo quejarme, pues por lo menos tengo un caserón, aunque en estos tiempos que corren, tener un caserón es tener un buen marrón encima y debajo, y en la proa y en la popa de éste barco en el que navego.

                       El otro día ví una propaganda de una furgona que te cagas, que pasada de bicho. Era una Volswagen furgona, no sé el modelo, pero lo que sé es que su parte de atrás se desglosaba y así se hacía el doble de espacioso. Después se levantaba el techo y tomaba forma de tienda de campaña. Llevaba cocina y demás avios para vivir en ella y todo en una furgona de mierda. Lo que no ví o no quise ver es el precio que tenía y ni quiero saberlo, ya estoy yo bastante asfixiado de pelas, como para hacerme que me crezcan los dientes. Pero mirar es de momento gratis y la verdad es que no paré de mirarla.

                       Ya me veía viajando por todos los rincones del mundo y con la casa a cuestas, igual que hacen los caracoles con su caparazón. Además el símil es perfecto, yo soy igual que un caracol, por ser baboso, arrastrado y ser un cornudo. Lo siento caí en el chiste fácil, es que lo tenía tan a huevo. cambiaría la casa por una furgona así, a mí el espacio me llegaría, pero claro tengo hijos, y ellos también necesitan su espacio vital. Así que nada, un sueño es un sueño y ya está, por fin ya he aterrizado de nuevo y lo he hecho sobre la puta realidad, la realidad de cada día y ahora me toca lidiar con la cena y mañana será otro día.

JARTIBLES (Fiestas populares)

No sé por vuestras tierras, pero aquí cae un sol de justicia, de justicia ciega, pues no se compadece de ningún ser mortal. Es lo de siempre, si querías sol pues toma dos tazas, y a ver si te callas. Somos pesados los humanos, somos pesados y jartibles (me encanta ésta palabra, jartible o sea que jarta o dicho bien, que harta). Y esa palabra viene de mi querido Cádiz, que se usa para todo, estoy jarto, no seas jartible y hasta se usa para los carnavales gaditanos. Para los que nunca quieren que se acabe el carnaval y cuando éste acaba, entonces hacen un mini carnaval, el carnaval de los jartibles, le llaman. De todas formas, las fiestas tomadas así a lo grande, todas son muy jartibles, pues en Cádiz se vive todo el año para el carnaval. Pero aquí en Menorce y en concreto, en Ciutadella, se vive para las fiestas de Sant Joan.

                           Supongo que en Pamplona se vivirá todo el año para los San Fermines y en Valencia para las Fallas. Y todo el año con la misma monserga, como que cansa un poco, sino es que cansa demasiado o sea que jarta y sobre todo jarta a los de fuera, a los foráneos que tienen que convivir con los aborígenes. Sino, no cansa, pues se limitaría a ir dos días a cualquiera de éstos eventos y ya está, todo muy bonito y bien puesto y todos tan contentos.

                          Pero lo de ser foráneo tiene su aquél y es una pasada ver la evolución de sus habitantes oriundos, cuando se aproximan las fechas. Les cambia todo, les cambia su mirada, que pasa a ser la mirada de un niño, les cambian sus conversaciones que siempre giran sobre lo mismo, de como va a ser ésta año la fiesta, les cambia su estado de ánimo y se ilusionan por todo, cuando todo es la misma fotocopia de todos los años. Y todo gira y gira sobre la venidera fiesta y... y... y que ¡éste año va a ser la hostia!. Pero así somos los seres humanos, nos ponen la misma película todos los años, pero con nuestra imaginación y una buena dosis de ganas, la convertimos en una película nueva. Mientras nos produzca placer, lo demás ¡qué importa!.

INCAPAZ (Poema)

Incapaz, incapaz me encuentro,
estoy incapacitado total,
no me salen las palabras,
y las letras las confundo,
no veo el horizonte lejano,
y en la cercanía, me enredo,
como una mosca
atrapada en una telaraña.

La confusión de los astros,
la superposición de los sentidos,
los deseos se me agolpan,
y juegan para hacer una pelota,
y yo me veo y no me reconozco,
y la confusión me enciega de pleno,
y al final, noto como todo,
se mezcla y carece de sentido.

Me siento incapaz,
incapaz de sentirme confundido,
todo me ahoga en un vaso de agua,
todo es un todo infinito,
la arena no es arena,
son grandes trozos de piedra,
mis ideas no son ideas,
son desperdicios de mierda,
o son restos de comida basura,
o de comida que queda entre los dientes,
o a lo mejor, es lo que queda de mi naufragio,
de mi naufragio en éste océano,
que aún hoy sigo desconociendo.

SOY UN ATONTADO DE MIERDA (Realismo soviético)

O sea que luna llena en san Juan, o sea, que soy más imbecil y os aseguro que no nazco. Me pierdo la fiesta de Sant Joan el Ciutadella y una fiesta que hay en un sitio mágico, en la costa sur de la Isla, en que se celebra la llegada de la luna llena. Menudo gilipollas estoy hecho y para más inri, no sólo eso, pues a la fiesta de Ciutadella tengo que ir, pero estando de guardia y lo que ya no tiene nombre, es que YO, sí yo escogí esa fecha. Debía tener resaca ese día o los primeros síntomas de un cáncer de cabeza o me había drogado y no sé muy bien con qué, pero ahora me cago en ese día y hasta me cago en la madre que me parió. A la fiesta de Ciutadella no pensaba ir y más que nada por el mogollón que se monta, no me siento con muchas ganas de meterme en la boca del lobo, el alcohol y sus efectos colaterales. Pero la otra fiesta, que es más recogida y en plan de menos gente, me hubiera apuntado con todas mis ganas y como telón de fondo la luna llena, ya es para morirse de pena.

                A partir de ahora me integro en el gremio de los descerebrados y es más, me autoproclamo su presidente. Y la noche que me va a tocar currando, agobio de gente, agobio de borrachos, agobio de malas historias, agobio de sangre fresca derramada por el suelo. Pero bueno cada uno tiene lo que quiere y yo quise esto y por tanto me vuelvo a cagar en todo. Así que a joderse y a aprovechar el tiempo que me queda, que es un día y medio, después me espera la guillotina. De todas formas para lo que me sirve la cabeza, prefiero que me la corten de una sóla tacada.

LOS TREPAS (Homo ladillens)

Me encanta ver la evolución de las personas, como se transforman y como se produce su metarmofosis, como pasan de capullos a lindas maripositas. Al revés es más difícil que ocurra, pues la transformaciones sólo se producen si hay algún tipo de medallas por el medio, medallas figurativas pero cargadas de simbología. Y esta simbología les pone a tope y les pone tanto que lo que era blanco ahora es negro. Son los pequeños trepas, tan abundantes por éstas tierras. esa especie en peligro de extinción, pero que nunca desaparece, si no los de arriba como iban a dormir tranquilos. Su función es de hormiguita, un poquito aquí y otro poquito allá y poco a poco van tejiendo su telaraña.

                       Al pricipio de su mandato aún se sienten próximos a las de abajo y en cierta medida apoyan las causas de los pringaos, pero el tiermpo todo lo puede y donde dije digo ahora es diego y ahora que ya soy un jefecito os digo que estabais equivocados. Gracias enorme ladilla por iluminarnos, pero los de abajo ya te han visto el plumero y ese plumero atufa y atufa demasiado. Así que cada uno en su sitio y así se ven mejor las cosas, vamos que se despeja el campo de batalla. Desde ese momento ya no hay apoyos que valgan, la plebe es la plebe y yo soy otra cosa, piensan para sus adentros.

                      No penseis que es fácil de dignosticar los primeros síntomas de la ladillitis, no señor, es tarea difícil y muy sibilina. Pues ellos juegan con las buenas intenciones de los demás, aparte que conocen a las personas, al fin y al cabo y hasta hace nada eran plebeyos. Claro que jugar con las buenas intenciones de la gente tiene un límite, como todo en ésta vida, y llega un momento que de tanto poner uno el culo, al final te escuece y lo que escuece ya se sabe, te hace ser más cauto y por tanto ser más desconfiado o sea que en la vida todo tiene un límite, pero también tiene un precio (enseñanza confuciana). Y aquí vienen las primeras demostraciones de su poderío pueril y empiezan los reproches, los pequeños detalles que enmierdan las relaciones laborales y personales. Los trepas se suben con mucha facilidad a la parra y una vez instalados en ella ya no hay nada ni nadie que los baje, su vida girará siempre bajo los mismos parámetros, de carguito en carguito y tiro porque me toca.

                  Y cuidado, porque un trepa puede ser el compañero de todos los días, el que te saluda y te hace las gracias y habla contigo cosas transcendentes y hasta personales. Puede, no quiere decir tiene, pero por si acaso yo aviso y el que avisa no es traidor. La única manera que se me ocurre es ofreciéndoles un pequeño caramelito o una información privilegiada y observar su comportamiento. Si el sujeto a estudio se empalma, o le crecen sus incisivos y empieza a babear por su boca como una babosa, entonces es que le vá la mandanga y  ya sabemos que hay otro trepa en ciernes, vamos que ya está infectado por el virus de los trepas y aunque de momento sólo tendrá forma de larva, por lo demás seguirá tan normal. Pero ya conoceis la teoría de la metamorfosis..., vamos por la que empecé al principio.

DESCEREBRADOS DEL MUNDO, ¡UNÍOS! (Malos pensamientos)

Descerebrados hay muchos y hay muchos más de los que pensamos. Hay los que nacen descerebrados, pero esto lo determina la ley genética: entre dos descerebrados que va a salir, otro descerebrado más. Después hay los que se descerebran por el camino o sea que nacen con un poco y eso poco le degenera o se le atrofia. Los hay que en su nacimiento tienen el cerebro entero y es más le funciona correctamente, pero por el camino se pierden y por ejemplo se meten drogas o se meten en política, que es la droga más fuerte y dura y éste factor exógeno los descerebra de inmediato. Y por fin, los hay que con su poco cerebro se arrastran por la vida y sin molestar a los demás, estos si que merecen todos los respetos, son los descerebrados que admiten su carencia.

                           Estaba pensando en poner un día mundial de descerebrados, como hoy se hace con todo y voy a proponer una campaña con muchas firmas, espero que firmeis por esta buena causa. Y es un problema más grave de lo que pensamos, pues el cerebro es irremplazable y de momento no se puede hacer transplantes. Tampoco hay neuronas sustitutivas y no valen, para este caso, las de los cerdos, así que nada, el que es descerebrado, descerebrado se queda. Un buen día del almanaque es el día en que se reunen los del G8 y si me apurais el G20 y de paso aprovechamos la convocatoria del evento, con ese despliegue policial a lo bestia, para hacer congresos y demás gaitas festivas, además que tendremos asegurada la presencia de los más descerebrados del mundo mundial.

                            Los del G8 o G20, ya sabíamos que su cabeza estaba vacía, pero por si quedaban dudas del Obama y alguien pensaba que le quedaba un poco de cerebro negro (pues blanco es imposible), pues nada se ha pasado a los que se descerebraron por el camino y ahora apoya y defiende que está bien y es necesario que se espie a través de las redes sociales. Y dentro de poco nos pondrán cámaras en nuestras casas, no vaya a ser que se esconda un terrorista debajo de la mesa de camilla o en el fregadero o en la taza del water, quén sabe donde se puede esconder un terrorista, hasta se puede esconder dentro de un cerebro vacío. Haber descerebrados del G8 o G20, haber si el terrorista lo teneis en vuestro coco y habrá que haceros un TAC preventivo. Y por supuesto una extirpación "preventiva".

JULIO CORTÁZAR