Hay momentos y momentos, como hay días y días.... y meses y meses... y años y años. Y hay años que fueron tremendos y de buenos o de malos, como hay otros que fueron amorfos y más bien fueron de corcho o como hay algunos que fueron especialmente buenos o malos o que no lo fueron tanto pero en cambio dejaron impreso un sello o un recuerdo que ahora resulta que es imperecedero y es más, a veces pienso que ese recuerdo o recuerdos han crecido y porque el paso del tiempo, no siempre borra las cosas y a veces, las deposita en un sitio donde se multiplican. No todo es paz y armonía, hay tiempos para todo, hay tiempos de paz aburrida, hay tiempos de paz maravillosa, hay tiempos de guerra que nunca será aburrida, lo que no hay y repito, lo que no hay son tiempos de guerra maravillosa, porque la guerra es la guerra y dentro de su concepto no entra ningún fenómeno que para nosotros (los humanos) sea maravilloso...porque la guerra, es hambre, porque la guerra es miseria, porque las guerras son ríos de sangre y porque la guerra nos hace ser menos seres humanos y por eso afloran los instintos más primitivos e inhumanos y se hacen cosas que nunca se han hecho.
Y es que volvemos al principio y hay momentos y momentos... y hay momentos mejores y otros peores y hay momentos en que te olvidas de todo, incluso de que existes y porqué existes y para qué existes....y hay otros en que todo se vuelve contra ti y entonces vienen las preguntas: ¿porque me pasa a mi y no a otro y porque me pasa a mi, si yo no hice nada?...y me supongo que se referirá a que yo no hice nada malo...porque el no hacer nada también tiene su punto de delito y porque el mundo y la vida están llenos de "nadas" que nunca mataron ni a una Mosca, ni nunca se pusieron de pie y dijeron al mismo tiempo por aquí no, por aquí nunca pasaréis o pasaréis por encima de mi cadáver. Los "nadas" que a veces nadan, pero no siempre nadan, porque algunos andan y sobre dos patas y dicen que tienen ojos que no reflejan la vida...porque su Humor Acuoso es opaco y su Cristalino es de color gris nublado.
Y de nuevo, volvemos a lo mismo: hay momentos y momentos... y hay momentos que son prometedores y porque lo prometido nos llena de esperanza y quizá, de sentimientos y es que en lo prometido siempre hay muchos sentimientos, es decir, se depositan muchas esperanzas sentimentales que nos recargan por dentro y puede que por fuera....y por eso, hace falta tener el componente sentimental de nuestro lado...bueno, si nos dejan, porque los sentimientos son de uno, pero pasa que en el fondo se tienen hacia algo y a veces, hace falta que ese algo o esa persona nos responda de la forma adecuada y para que se mantengan firmes y vivos esos sentimientos...porque sino a la larga, esos sentimientos se deforman y se convierten en viejos recuerdos oxidados y morirán tristes y languidecidos y agobiados por las penas...