LA TARDE, LA NOCHE








La tarde, la noche,

la tarde noche

y ahora estoy en plena noche

a punto de tocar las campanas al cielo,

estoy muy cerca de las 12,

tan cerca que oigo su primera campanada

y retumba con sus ecos de martillo sobre el duro acero,

y me duelen los tímpanos y el cerebelo,

estoy cansado de mis ruidos y de mis voces,

oigo gritos en plena noche,

oigo voces cuando se acaban los gritos,

oigo historias que nunca debieron ser contadas,

y veo las versiones con subtítulos

que muchas veces ha rebobinado mi cerebro.

PENSANDO EN TI








A veces me como los dedos pensando en ti,

después los escupo como huesos de aceitunas 

desangelados,

y juego a ver si encesto de una puta vez

y así me anoto tres puntos en mi hacer,

a veces me como hasta los hígados pensando en ti,

me enamoro del aire que has dejado,

me enamoro más, me refiero

y con mi sangre pinto corazones de papel,

a veces me desquicio con mi vicio,

pienso en ti y la heroína se pincha hasta el fondo de mis venas,

...he comprendido... 

que no se puede evitar lo que nunca se olvida,

por eso a veces me convierto en víbora,

me arrastro, me enveneno

y yo mismo me mato pensando en ti.

RECUERDO















Recuerdo el mar dando vueltas sobre olas vaporosas,

recuerdo su espuma ocre y blanquecina y con olor a vómito,

recuerdo su arena mojada salpicando tu cara,

también recuerdo 

aquellos reflejos de simpatía mutua entre yo y el mundo de mi alrededor

y el continuo intercambio de miradas furtivas entre los dos,

recuerdo los amaneceres mirando mi ría de Vigo

y los barcos veleros surcando los mares,

y aquél faro...llamado Faro de Home...

y como los efluvios alcohólicos se arremolinaban dentro de mi estómago,

recuerdo sus nauseas y a sus ardores tocando tambores,

yo miraba la belleza del mar con aquellos barcos

(barcos de época, decían que se llamaban),

pero el mar seguía dando vueltas a mi alrededor

y las estrellas volaban dentro del caótico cielo,

total, pasaron los barcos de época,

la ría de Vigo se quedó en donde estaba

y yo me quedé dormido al sol de la mañana.

TENGO NOMBRE DE SUEÑO










Malena tiene nombre de tango

y yo tengo nombre de sueño,

me encanta el nombre de Bruno,

que no es mío y porque fue adoptado,

pero según la declaración de los derechos humanos

todos podemos cambiar de sexo y hasta de personalidad
...y...
¿y porque no de nombre?

no todo tiene que acabar en frontera,

en límites, en alambradas...

yo quiero ser del país de nunca jamás

 porque no hay amores eternos,

ni hay nombres perpetuos,

ni las ansiedades son permanentes 

ellas fluctúan como bancos de hielo en la densa neblina,

hay algo evolutivo dentro y fuera de nosotros,

la piel se descama y se transforma en piel más dura

 los párpados caen como persianas cansadas de tanta ver lo que no se ve,

 los huesos se deslustran como esponjas de mar porosas,

y todo, se hace más ciego, más cansado y más desgastado

 todo se viste de sepia y de vacíos rotos,

mis fotos son así,

rotas por el paso del tiempo,

carcomidas por hambre de ratones,

amarilleadas por tonos otoñales,

y en el medio de cualquier esquina de la foto,

aparezco yo... 

como escondido,

como medio borrado,

como si mi cara fuera volátil

y de mis hombros salieran alas de algodón,

y Malena no tiene nombre de tango

y yo tengo nombre de sueño.

YO TE DEBO LUNES







Yo te debo lunes,

pero también te debo martes y miércoles

y viernes y domingos,

te debo días sin límite y sin freno,

días en el que todo fue... la tarde,

días largos e intensos,

casi espasmódicos,

casi tetánicos,

días de azul y de gris lluvia,

de sol adormecido 

y mecido entre nubes de algodón,

días de negros nubarrones

mezclados con destellos claroscuros,

como tú y yo,

yo era el negro nubarrón

y tú en cambio ibas vestida de blanco

y así fue hasta que vino una galerna de aire y fuego,

que arrasó todo lo construido con nuestras manos y dedos,

y ahora, solo queda su esqueleto de huesos

y como un monumento a lo que pudo ser y no fue.

A VECES, LA POESÍA ANDA SOLA

A veces, la Poesía anda sola,

anda sin nadie que la quiera acompañar,

busca rincones escondidos,

obras de metro, escombros de edificios,

bosques encantados,

muelles abandonados,

soledades inquietas,

rescoldos de hogueras,

decisiones a ciegas,

pérdidas...pérdidas sin más,

y ahí, te exige intensidad,

que te dejes la piel en el intento,

que te duelan los dedos por tanto teclear,

que los nudillos se astillen

y que las articulaciones se conviertan en globos a punto de petar,

se exige el todo

y con la pasión del toro,

y con las ganas del que siempre quiere más,

....no es tarea fácil,

pero en ésta vida que nos toca,

nada nos resulta fácil

y si hay que ser poeta

que venga la poesía y que entre por mis venas.

YO ESCOGÍ ÉSTE OFICIO

Yo escogí éste oficio,

digo ser médico,

lo de escribir... vino después,

mucho después,

fue tanto después... 

que no me acuerdo del tiempo transcurrido,

sé que han pasado décadas y puede que siglos,

y yo era joven cuando estudié medicina

y ahora soy un viejo escribiendo lo que puedo,

y digo lo que puedo,

y no digo lo que me dejan,

pues hace tiempo que he pasado de imposiciones y leyes sin sentido,

yo prefiero los intercambios de lenguas

y el descubrir las cuevas interiores,

yo soy de calidez extrema

y me gusta arrebujarme como un niño perdido,

me gusta la calidez de lo humano

y esos dedos que recorren mi espinazo

y que al llegar al borde de mi culo se quedan extasiados y paralizados,

y me encanta retozarme al suave y tibio sol del invierno,

como un lagarto que necesita calentar su cuerpo,

además de encaramarme a la piedra más alta

y desde allí otear el horizonte,

me atraen las vistas lejanas y sin limitaciones,

como el rayo verde en una puesta de sol,

como tus ojos verdes en un día de sol,

como los míos,

cuando me miro a través del espejo que tengo ante mí.

POETA...

Yo una vez fui Poeta,

poeta...poeta...poeta...

poeta porque me lo creía,

poeta porque me lo decían,

poeta porque yo quería ser... poeta,

poeta entre la niebla y la escarcha fría,

poeta en la madrugada y en el mediodía,

poeta de lánguida tarde otoñal,

poeta de la noche y a la luz de la luna,

poeta de la calle y de un barrio destrozado,

poeta que un día fui

y que ahora, no sé si lo soy,

me siento poeta,

pero sentir no es ser,

yo sé que me acuesto poeta

y me levanto más poeta, si cabe,

y desayuno bellos poemas

con el delicioso aroma de un café con leche,

templado, que no queme mis delicadas mucosas,

poemas que fueron escritos por mis manos,

 me siento y espero...

 espero a que venga mi musa

y que me altere la brisa

 y entonces de entre mis dedos,

salen palabras escritas,

creo que son poemas,

creo que a veces no riman,

creo que a veces son distónicos o atónitos 

o distorsionados en medio de una selva de letras,

yo me siento poeta

y eso es lo que debe importar,

ser poeta

y a la vez

ser y sentirse poeta.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...