Podría, debería, tendría que ser otro y porque siendo yo mismo, se podía decir: que hasta aquí he llegado. Y es que el panorama desde ésta altura es bello, pero fue bello y es bonito y es espléndido, pero también lo fue y ya no es amable y ya no es cariñoso. Ahora el paisaje es árido y desértico, es duro, es frío, es ácido. Ahora las cosas duelen mucho más que antes y además, las cosas te dejan la huella o la marca de Lucifer, porque de joven te sobreponías a los malos rollos con otro buen rollo u con otra aventura y cuando te dabas cuenta, ya estabas dentro de otra historia, pero ahora tienes que mascar ese mal rollo hasta que viva tu último gusano. Y menos mal que yo estoy contento conmigo mismo y porque me siento mejor que nunca, pero de alma, que no de cuerpo, pero el buen sabor de alma es el mejor de los estímulos.
Por tanto, me siento espléndido y como decía el otro, me siento dentro de mis cabales, aunque haya algunos que piensen lo contrario, pero a esos señores les diría: que han tenido toda una vida para comprender que la normalidad se la hace uno mismo y que algunos se encuentran bien dentro de su traje de pijo relamido y en cambio otros, solo nos preocupa el disfrutar de las cosas y para eso no hacen falta los sellos, ni los estigmas, ni siquiera hacen falta los apellidos, solo hace falta ser, humano. Aunque a veces es más fácil de explicar esto a una puta piedra, pues para ellos es como quitarle a un edificio los pilares. Y por eso de vez en cuando les meto caña, porqué sé que se morirán jodiendo al personal y a mi entre ellos.
Ya quisieran algunos mi lucidez y mi atrevimiento y porque es muy importante el atrevimiento (la lucidez, por supuesto), pues para ser atrevido hace falta tener muy claras las cosas y al mismo tiempo, haber perdido la vergüenza, la maldita vergüenza que a través de mi vida me hizo demasiado daño y por eso ahora, me estoy vengando. Y la ventaja que tiene el no tener vergüenza es que filtras personas y sin mover un dedo, pues ellas mismas cuando te leen se autoeliminan, pero no sin antes concluir: que éste tío está loco. Pues si estoy loco, me alegro y si vuelvo a estar loco, me pongo más loco y que se muera la cordura y es que en el otro lado ¿qué te vas a encontrar?, acaso ¿un Infierno lleno de cuerdos? o ¿unos locos con cuernos y rabo?. Yo realmente pienso que no hay peor infierno que un Psiquiátrico y entonces y como yo ya pasé por ello, el Infierno será como unas vacaciones en el Caribe.
Por tanto, me siento espléndido y como decía el otro, me siento dentro de mis cabales, aunque haya algunos que piensen lo contrario, pero a esos señores les diría: que han tenido toda una vida para comprender que la normalidad se la hace uno mismo y que algunos se encuentran bien dentro de su traje de pijo relamido y en cambio otros, solo nos preocupa el disfrutar de las cosas y para eso no hacen falta los sellos, ni los estigmas, ni siquiera hacen falta los apellidos, solo hace falta ser, humano. Aunque a veces es más fácil de explicar esto a una puta piedra, pues para ellos es como quitarle a un edificio los pilares. Y por eso de vez en cuando les meto caña, porqué sé que se morirán jodiendo al personal y a mi entre ellos.
Ya quisieran algunos mi lucidez y mi atrevimiento y porque es muy importante el atrevimiento (la lucidez, por supuesto), pues para ser atrevido hace falta tener muy claras las cosas y al mismo tiempo, haber perdido la vergüenza, la maldita vergüenza que a través de mi vida me hizo demasiado daño y por eso ahora, me estoy vengando. Y la ventaja que tiene el no tener vergüenza es que filtras personas y sin mover un dedo, pues ellas mismas cuando te leen se autoeliminan, pero no sin antes concluir: que éste tío está loco. Pues si estoy loco, me alegro y si vuelvo a estar loco, me pongo más loco y que se muera la cordura y es que en el otro lado ¿qué te vas a encontrar?, acaso ¿un Infierno lleno de cuerdos? o ¿unos locos con cuernos y rabo?. Yo realmente pienso que no hay peor infierno que un Psiquiátrico y entonces y como yo ya pasé por ello, el Infierno será como unas vacaciones en el Caribe.