ESTOY EN LA TARDE NOCHE













Estoy en la tarde noche,

más noche que tarde

aunque nunca es tarde cuando la dicha es buena,

(eso dicen)

pero tampoco es noche

en las calderas del infierno más oscuro,

...son las 10 de la noche...

mientras el gato de enfrente

bosteza desconsoladamente

yo en cambio solo espero,

la presencia de las ausencias.

CASI TODO O CASI NADA









Yo entiendo que no me entiendan,

entiendo que entiendo casi todo,

pero no todo

y porque el todo y la nada

son verdades de fe ciega y absolutista,

y como la fe no va conmigo

ni con mis huesos,

entiendo que lo correcto sería decir...

casi todo o casi nada

y así siempre quedaría un resquicio

para poder opinar lo contrario,

el casi es una puerta abierta al otro lado

y por si no te gustara lo que hay en este lado del mundo

y esto pasa

cuando tu único deseo sería

desaparecer cuanto antes del mapa

y aparecer, por ejemplo...

en la cara oculta de la luna.

EXPRESIVIDAD CORPORAL









Yo he intentado presentarme en un slam poetry

y de hecho me presenté hace cuatro o cinco años

y le eché ganas y valor

yo creo que le eché mucho valor y muchas ganas,

y no hice el ridículo pero casi,

estuve muy cerca de ello,

hay mucha expresión corporal en el tema,

aparte de saber leer un poema

y de entonarlo adecuadamente,

y al final,

me quedé tieso como una mojama

y leyendo un folio escrito y fuera de tono

y fuera de sitio...

pero aún así y todo, 

me juré hacer otro intento

y entonces me dije

la expresividad corporal se puede aprender,

pero no hubo manera,

los cursos que había sobre el tema,

eran para respirar mejor cuando se canta,

pero nada al respeto de la expresividad recitando...

con el paso del tiempo


me he dado cuenta

que quizá algún día lo vuelva a intentar,

pero mientras tanto

yo sigo mi rumbo y mi vida

y de momento

no tengo ningún proyecto de volver a recitar en un slam poetry

hasta de hacer el ridículo se puede aprender

y yo he aprendido

que sin expresividad corporal

no habrá otro slam poetry.

EM CERTAS MULHERES (Biel Vila)

Biel Vila (Em certas mulheres)




De algunas mujeres me gusta
lo que se ve con la luz apagada y
los ojos cerrados. Aquel brillo. Esa luz.


Biel Vila




Em certas mulheres gosto
é do que se vê de luz apagada e
olhos fechados. Aquele brilho. Essa luz.

NO HAY DOS SIN TRES




No hay tristeza que no se convierta en veneno,

como no hay mordedura que no se haga con 

rabia,

como no hay dos sin tres

ni tres sin cuatro,

como no hay un sólo momento

en que no respire algo de ti,

estás en mi memoria más primitiva,

junto a la hipófisis

y sentada en la silla turca,

tienes las manos cruzadas

y las uñas pintadas de negro,

tu mirada es tibia, tímida y aterciopelada,

en cambio, tu sentir

es algo que no se ve,

pero que yo sé,

que está ahí

y porque lo quieras o no lo quieras,

es imposible

que te olvides de mí.

¡¡¡ESTOY COJONUDAMENTE!!!






Domingo,

domingo 14 de junio

mañana preciosa

luz espectacular,

suave brisa del norte

fresca y amable,

un tipo no para de hablar por el móvil,

la radio del vecino no para de sonar,

pero yo insisto

y quiero seguir de ventanas abiertas a la calle,

aunque hay veces que me entran ganas

ya no de encerrarme en mi mismo,

si no de no volver a salir a la calle

y dejar esa normalidad de ruidos, voces y conversaciones,

para los que son considerados como normales,

ellos se saludan y se reconocen,

les gusta olisquearse como perros en celo

y así saber si el vecino le pone los cuernos a su mujer

y con quién y cuando y donde,

o si ese otro vecino bebe a escondidas y al por mayor

y no sé como no va a alcohólicos anónimos,

la normalidad cotidiana de cada día,

suena la radio,

otro ve la tele,

el otro sigue su conversación telefónica,

al fondo de la calle

se empiezan a escuchar gritos de discusiones

(nunca pueden faltar)

y por el medio se cuelan

algún llanto entrecortado de un niño pequeño,

unas carcajadas sonoras y sueltas,

el sonido de un timbre de una casa,

un fragmento de un diálogo televisivo,

el trinar de algunos pájaros,

el ronroneo de motor de un coche,

y ahora se empieza a escuchar,

la campana de la iglesia

que anuncia que estamos en domingo

y les recuerda sus fieles,

que hoy deben acudir a misa

y yo como no creo

estoy exento y libre

yo estoy en domingo

pero en domingo después de una guardia de 24 horas

y tengo que decirlo claramente,

¡¡¡estoy cojonudamente!!!.

JULIO CORTÁZAR