Me dijeron...tú sigue
y yo seguí y por eso estoy aquí.
También me dijeron
si te caes levántate y vuelve a levantarte las veces que haga falta
y entra en bucle con lo de caer y levantarse
y por eso y solo por eso, estoy aquí.
Aunque nadie me dijo
que en esta vida hay momentos que son como agujeros negros
no ves el fin de esa historia en la que andas metido
ni sabes hasta donde llega el fondo
y si te quedas atrapado en ese fondo oscuro
es mejor que no acudas al psiquiatra o al psicólogo o al terapeuta de turno
y porque no tendrán ni puta idea de lo que pueden hacer contigo,
unos, te atiborraran de pastillas que te dejaran tonto perdido
otros, te dirán que todo empezó con los traumas de tu infancia
y los que quedan, te dirán que te faltan cien sesiones
para así doblegarte a su estilo y a su manera
y por cierto y antes de que me olvide...
cada sesión serán cien pavos
y prefiero que me los pagues por adelantado
y una vez tocado el techo de las cien sesiones
te volverán a decir que vas por buen camino
y aunque tú ni lo notes
pero que aún te faltan cosas por pulir
y en tu horizonte tendrás otras cien sesiones
y ese ciclo nunca será capaz de pararse por si mismo
salvo que tú lo pares y de una vez por todas.