No existe nada ni nadie más allá del espacio tiempo,
no sé lo que tengo que hacer fuera de hora o fuera de sitio
o sin control ninguno,
no sé si ponerme a dar vueltas sobre mi propio eje
o a buscar las ondas vitales de mis Satélites planetarios
todos esos que gravitan a mi alrededor,
quiero conocer mi Luna,
mi Luna romántica,
mi valiente Luna que se atreve con todo,
sube y baja mareas,
remata o revive vinos,
convierte a los Lobos en hombre lobos,
desquicia más si cabe, a los locos,
aumenta el número de partos
y cuando a mi me alumbra me pregunto como...
como enciende sus luces blancas evanescentes,
como dibuja sus contornos de sombra de ojos,
como enternece desde al más iracundo
hasta la bestia más inmunda llena de rabia,
quiero saber su funcionamiento
y conocer en que se basa su extenso y potente poder,
yo a su lado, no soy nada ni nadie,
yo soy sólo su admirador apasionado
y si una noche y cuando todo se nuble bajo la espesa niebla,
espero que la Luna me deje un pequeño resquicio de esperanza
yo haría lo que ella quisiera,
si hay que adorarla, yo la adoraría sin más y sin pensarlo,
si hay que venerarla, fundaría una secta satánica y lunática,
si hubiera que adormecerla, yo la mecería entre mis Brazos,
yo amo a la Luna y por encima de todo
y que nadie ni nada ose tocarla,
ni la insulte, ni le falte al respecto,
la Luna y yo somos hermanos univitelinos,
nacidos el mismo día y a la misma hora,
pero ella se llevó la mejor parte
y yo en cambio,
me tuve que conformar con éste trozo de cuerpo.
no sé lo que tengo que hacer fuera de hora o fuera de sitio
o sin control ninguno,
no sé si ponerme a dar vueltas sobre mi propio eje
o a buscar las ondas vitales de mis Satélites planetarios
todos esos que gravitan a mi alrededor,
quiero conocer mi Luna,
mi Luna romántica,
mi valiente Luna que se atreve con todo,
sube y baja mareas,
remata o revive vinos,
convierte a los Lobos en hombre lobos,
desquicia más si cabe, a los locos,
aumenta el número de partos
y cuando a mi me alumbra me pregunto como...
como enciende sus luces blancas evanescentes,
como dibuja sus contornos de sombra de ojos,
como enternece desde al más iracundo
hasta la bestia más inmunda llena de rabia,
quiero saber su funcionamiento
y conocer en que se basa su extenso y potente poder,
yo a su lado, no soy nada ni nadie,
yo soy sólo su admirador apasionado
y si una noche y cuando todo se nuble bajo la espesa niebla,
espero que la Luna me deje un pequeño resquicio de esperanza
yo haría lo que ella quisiera,
si hay que adorarla, yo la adoraría sin más y sin pensarlo,
si hay que venerarla, fundaría una secta satánica y lunática,
si hubiera que adormecerla, yo la mecería entre mis Brazos,
yo amo a la Luna y por encima de todo
y que nadie ni nada ose tocarla,
ni la insulte, ni le falte al respecto,
la Luna y yo somos hermanos univitelinos,
nacidos el mismo día y a la misma hora,
pero ella se llevó la mejor parte
y yo en cambio,
me tuve que conformar con éste trozo de cuerpo.