NACÍ...

 

Ahora

no es que me coloque

pero metafóricamente hablando

me coloco más que nunca...

El viento me coloca,

la luna me pone,

el sol me desquicia,

la lluvia me apasiona,

el frío me hace sentirme más íntimo,

la niebla me alucina,

las setas me enamoran

el olor de la leña me eleva,

y la música...no sé como expresarlo...

me hace perder el juicio.

Soy un ser sencillo,

me gustan cuatro cosas,

me entusiasman otras dos más

y me apasiona escuchar

la lluvia contra el cristal.

Nací, 

crecí,

me hice persona

he tenido tres hijos

y ahora estoy buscando en donde por fin, acomodarme

y para morir en paz y dignamente.


PELÍCULAS...


La patria vende voluntades y crea más descerebrados con bandera que gente de bien sin fronteras. Y de bien, me refiero a gente que no piensa igual que yo, pero que me respeta como a un ser humano que soy o que pretendo ser. Además... no agredo, ni muerdo, ni la chupo a la primera de cambio y a la segunda, puede que un poco. Pero que tampoco nadie se engañe, yo no soy un chollo. Dicen las malas lenguas que verbalmente agredo y puede que sea verdad, pero también hay que entender que yo era un ser agresivo por todos mis poros y si me ha quedado alguna reminiscencia verbal...pues que le vamos hacer. Algo siempre tiene que quedar del chasis inicial. Y porque además si nos ponemos en ese plan yo empiezo a dar explicaciones y entonces, os vais a cagar patas pabajo. Podría empezar por mi puta infancia, que según me dijo aquella psicóloga infumable que parecía toda una señora de alto postín y con cara de lechuga, en mi infancia tengo el comienzo de todas mis inseguridades y problemas de comportamiento ( y como si yo fuera todo un vil asesino de serie) y porque en definitiva, no tuve una infancia feliz. Y todo porque me lo decía ella, añadiría yo.

Y ahora sería el momento de hablar de que mi madre me dio leña a destajo y que hubo un par de curas al que les gustó demasiado mi culo prieto sonrosado (a mi también, me gustaba)... y esa brecha la aprovechó la psicóloga (y con otras palabras más finas... pero vino a decir lo mismo). Y claro, yo me quedé a cuadros y porque le había narrado como si nada, mis disfunciones de niño medio rico tirando a menos, pero que siempre pude veranear y en la mejor playa de mi Vigo natal y sin más problemas mentales... y va la tía se aprovechó de esa brecha de forma descarada y entonces concluyó lo que ya quería concluir desde un principio: fui un niño mal criado que por una parte, sufrió violencia y que por la otra, fue toqueteado por las manos grimosas y asquerosas de algún desaprensivo cura lascivo.
Pues si señor, todo eso ocurrió. Pero mi diferencia con la señora psicóloga que parecía toda una princesa de sangre azul, se basaba en que yo no me había quedado colgado de aquellas historias. A los curas les mandé a tomar por el culo y por ello tuve que cambiar de colegio y de mi madre ¿qué os puedo decir?... que durante un tiempo sólo quise venganza y sangre...pero que llegados a esa especie de estado adulto donde se caen las manzanas por su propio peso, pues pasó... que le perdoné y que la perdoné a pies juntillas. Y por lo tanto después, me tocó sufrirla mucho más...y mira que mi madre era insufrible y terca y pesada y descerebrada y autoritaria y hasta donde se perdió el conocimiento, pero que una vez que yo dí el grito de tarzán y ésta es mi selva, se acabó toda aquella autoridad materna con sus putas pamplinas de películas de buenas normas y de clases sociales que solo tocaban el piano en las grandes fiestas de sociedad tipo "lo que el viento se llevó".
Pues todo esto que os acabo de contar, la psicóloga no me creyó ni una sola palabra. Yo para ella, era un payaso que no sabía en que circo había caído y ella se sintió con la obligación de mostrarme el camino correcto y no se cortó ni un pelo y venga a darle vueltas al tema de que yo había sido un niño infeliz y resentido. Y vamos a ver...y como yo podía contarle a la señora psicóloga que mis veranos fueron los mejores del mundo y que mis septiembres fueron maravillosos y que mis inviernos y junto a mi chimenea (la que había en casa de mis padres) era como encender mi nave espacial y para salir volando hacia el espacio...pues ¿qué pasó?...que yo me quedé en silencio viendo como mi nave espacial llegaba hasta el espacio y es que hay cosas que no merecen la pena de ser contadas y porque sobre todo, no se merece que se las cuente a esa otra persona.

HOY LLUEVE...


Hoy llueve sobre mojado. Bueno se supone que va a llover y porque lo dicen "los del tiempo", que ya no son como eran en mis épocas jóvenes y cuando fallaban más que una escopeta de feria. Ahora en general aciertan más o menos y para ser más concreto, aciertan más veces que las que fallan. Balance positivo para el tema problema. Yo en cambio y en el terreno de los sentimientos, si que tengo más fallos que aciertos (proporción 10 fallos por 1 acierto, 10 a 1). Pero bueno, no es el momento de ponerse a llorar y venga a darle vueltas "al pobrecito de mí". A lo hecho pecho y el que no quiera verlo así, que se vaya a tomar por culo. Uno tiene que ser radical consigo mismo y sino quieres lentejas...pues las dejas. Nada es imposible, pienso a veces. Todo es una mierda, pienso otras veces. No me vengas con gaitas templadas, me digo cuando sin darme cuenta, me estoy reconciliando.
Porque mi tendencia natural es buscar el conciábulo del entendimiento con la buena palabra, pero coño, pasa que el camino (nuestro camino vital) es muy intenso y muy contradictorio y eso suele traer muchas interferencias... que precisamente no te dejarán oír bien lo que dice la otra persona. Bueno, eso es lo que se dice para el quedar bien y todas esas cosas, porque en realidad yo no escucho a quién no quiero escuchar y que además me toca los cojones tener que hacer que le escucho. Por tanto, directamente no le escucho y adoto el gesto del que te vayan dando muchacho. Ahora mismo, estoy escuchando a unas golondrinas dando todo un recital con sus trinos guturales (sonidos de la puta calle, que muchas veces es mucho mejor sonido, que el tener que escuchar a una persona plasta) y a veces, me encanta escucharles (como ahora) y en cambio otras veces, odio su puto de trinar de pájaro resentido que además las muy cabronas, suelen cagar en mi coche. A según como te pille, decía el otro y va a tener razón el otro. Porque si te levantas cruzado de cables tendrás un día horrible por delante y por detrás y eso, no hay quién lo cambie.
Pues yo partiendo toda una lanza a favor de los que predicen el tiempo y mirar por donde, hoy no tiene ninguna pinta de que vaya a llover. Estuvo negro y estuvo el cielo muy oscuro, pero debió venir el encargado de limpiar el cielo y cuando volví a levantar la cabeza y esperando ya el primer gran chaparrón, pues resultó que el cielo estaba más limpio que una patena. Y ahora entre el trinar de las golondrinas y el maravilloso cielo azul sería el momento ideal para hablar de filosofía barata. La mía es una puta filosofía barata de mala que es. Lo mío es... o lo coges o lo dejas y si lo dejas atente a las consecuencias. Y eso es todo lo que tengo que decir. Mi tintero está seco de ideas...Y otra más... o te vas o te quedas y si te vas, diría lo mismo que antes (atente a las consecuencias) y si te quedas yo me quedaré contigo (parezco el llanero solitario de simple que soy). Filosofía llorona y deprimente, filosofía de pobre gatito mío ven con tu dueño y mientras el gatito ronronea de tanto gusto y de tanto amor y después hablamos de que las putas fotonovelas son un pasteleo vil y torturador (que lo son), pero mi ñoñez es cuando menos que repulsiva. Para eso, sería mejor tener una puta mascota que por lo menos me acompañara en los momentos más deprimentes. ¡Coño! que me sacara a pasear el puto perro... y que......y mejor no sigo...porque yo sé perfectamente hacia donde voy.

TUTE 2


 

TUTE 1


 

FRIDA KAHLO

 


Gabriela Mistral


 "Los tiempos felices en la humanidad son las páginas vacías de la historia".

MI CASA


 

ALLENDE (Eduardo Galeano) . 11 de SEPTIEMBRE.



Por valija diplomática llegan los verdes billetes que financian huelgas y sabotajes y cataratas de mentiras. Los empresarios paralizan a Chile y le niegan alimentos. No hay más mercado que el mercado negro. Largas colas hace la gente en busca de un paquete de cigarrillos o un kilo de azúcar; conseguir carne o aceite requiere un milagro de la Virgen María Santísima.
La Democracia Cristiana y el diario «El Mercurio» dicen pestes del gobierno y exigen a gritos el cuartelazo redentor, que ya es hora de acabar con esta tiranía roja; les hacen eco otros diarios y revistas y radios y canales de televisión. Al gobierno le cuesta moverse; jueces y parlamentarios le ponen palos en las ruedas, mientras conspiran en los cuarteles los jefes militares que Allende cree leales.
En estos tiempos difíciles, los trabajadores están descubriendo los secretos de la economía. Están aprendiendo que no es imposible producir sin patrones, ni abastecerse sin mercaderes. Pero la multitud obrera marcha sin armas, vacías las manos, por este camino de su libertad. Desde el horizonte vienen unos cuantos buques de guerra de los Estados Unidos, y se exhiben ante las costas chilenas. Y el golpe militar, tan anunciado, ocurre.
Le gusta la buena vida. Varias veces ha dicho que no tiene pasta de apóstol ni condiciones para mártir. Pero también ha dicho que vale la pena morir por todo aquello sin lo cual no vale la pena vivir.
Los generales alzados le exigen la renuncia. Le ofrecen un avión para que se vaya de Chile. Le advierten que el palacio presidencial será bombardeado por tierra y aire. Junto a un puñado de hombres, Salvador Allende escucha las noticias. Los militares se han apoderado de todo el país. Allende se pone un casco y prepara su fusil. Resuena el estruendo de las primeras bombas. El presidente habla por radio, por última vez:
—Yo no voy a renunciar…

PIEDRAS



 Tú,

no me entiendes,

yo soy de piedra

además, tengo hongos en la cara y cuello

y llevo siglos mirando tu rostro de piedra caliza.

Nunca has respondido a mi mirada,

has permanecido impasible, frío y pétreo

siempre mirando el suelo

y recelando de la dulzura de mi mirada.

Yo te digo

que si rascas dos piedras y una contra la otra,

pueden salir chispas

que quizá, podrían iluminarnos

o darnos calor humano.

Y eso es lo que debimos hacer:

prendernos chispas,

encender nuestra hoguera,

iluminarnos como dos faros

y al mismo tiempo

bailar desnudos con nuestros cuerpos de piedra.

HAY ARROGANTES Y ROGANTES


Estos últimos (los rogantes), son los que ruegan y van implorando por la vida sin desconsuelo y toda su vida (son los rogantes o suplicantes), es decir, son unas lindas ladillitas vestidas de seres humanos. Y los primeros o arrogantes, son esos individuos altaneros, que dicen estar por encima de todos y de todo. En consecuencia te tratan con el desprecio de que le otorga su arrogancia y como si fueran poseedores de un título nobiliario nombrado por la gracia de dios. Después hay los regantes, pero estos sólo riegan y además no se meten con nadie.
Rogantes hay muchos por la vida, los hay ladinos y son expertos simuladores o sea que ruegan pero parece que no lo hacen y los hay descarados y estos últimos ruegan con todo su desparpajo. Yo de preferir a alguno de ellos, prefiero a éstos últimos (a los descarados), por lo menos van de frente y dando la cara. Los rogantes ladinos o ladillas escondidas, son bichos asquerosos y grimosos que van de lindas mariposa y en el fondo son unas larvas que se arrastran por el lodo.
Los arrogantes son prepotentes y presumidos, les gusta demostrar sus logros y ostentarlos con todo su orgullo de macho alfa. Pero además les gusta el despreciar. Es decir, cada logro de ellos es un insulto para los demás y porque para ellos, en cada fracaso tú decreces o te encoges, mientras ellos en cada logro o triunfo, se agigantan como pavos reales. Por lo menos es lo que pretenden (su primera intención es pasarte todos sus logros por delante de tus narices y para que así... te hundas y no levantes cabeza nunca más). Pero el que lo consigan, también depende de si tú les dejas. Es decir, cuando un gallo de éste tipo empieza con su alardeo y despliegue de plumas, justo en ese momento, hay que tener la agilidad de cortarles el rollo ipso facto, porque si no después ya irán más sueltos y más creciditos y será más difícil poder parar su prepotencia...
La peor "cualidad" de un arrogante es su desprecio. Te ven como ve un gigante a una pequeña hormiguita toda desprotegida. Te ven con cara de perdonavidas y su mensaje es más que claro... él viene a ser dios y tú una mierda pinchada en un palo. Se debería de usar la táctica de ser mucho mejor que él (que no siempre se hace y no siempre se consigue). O sea, si él tío alardea de algo y piensa que es el no va más del universo, pues tú siempre vas a ser más (siempre tendrás que ser más que él) y le cuentas un hecho o historia que hiciste y que en realidad no hiciste, pero que siempre y siempre, tu cuento supere a su puta historia de fantasma. Como decía el otro: "Para chulo mi pirulo", lo mismo pero con otras palabras más finas.
Al arrogante le gusta tener público, pues su humillación hacia ti casi carecería de sentido. O sea que en plan personal pasan de humillarte, pero cuando están en grupo, ahí es donde demuestran su verdadera condición de víboras venenosas. Les encanta el tema de la humillación y poner el pie sobre el cadáver del que ellos consideran su enemigo. El único consuelo, es que el arrogante se gusta demasiado y tanto se gusta que al final, se dejará llevar por su instinto asesino de los más débiles y entonces, llegará el momento en el que traspasarán la frontera de la humillación. Y ahí, es donde se le puede pillar y es el instante idóneo para dejarlo en ridículo y así bajarle sus putos humos de cabrón (y con redobles de tambor). Es su punto más débil, pues cuando se sienten creciditos se ponen blanditos. Cuando pillas a uno bien, te quedas satisfecho para muchos años y siempre te quedarás en disposición de que si viene el siguiente con su arrogancia de mierda, ya te pillará preparado y entonces sí que se le caerán los anillos y los dientes al suelo. Y sin dientes, son como lindos tiburones de agua dulce que no muerden ni ladran ni nadie les va a hacer caso.

CARMEN LAFORET


 

WITTGENSTEIN


 

SEPTIEMBRE


"Septiembre...
y sigo esperando.
Lo malo y lo peor de todo
es que no sé a lo que espero.
Lo único que parece cierto...
es que seguirá lloviendo
bajo las densas nubes de septiembre"

ME ABURRO POR AQUÍ, ME ABURRO POR ALLÁ...

  Me aburro por aquí, me aburro por allá, haciendo esto o lo otro me aburro igualmente. O sea me aburro por los cuatro costados y me siento ...