Todos juntos y haciendo un semicírculo nos cogeremos de las manos y haciendo piña, pero una verdadera piña apiñada y así daremos las gracias a nuestro señor y amén y alabado sea el señor, nuestro dios. Yo que sé, yo lo digo por si acaso, por si ahí arriba realmente hay alguien que nos observa en cada día de nuestra vida y coge apuntes de nuestros desfases y de nuestras juergas y anota cada polvo que echamos en la libreta de los pecados capitales. Has fornicado, pues vas al infierno y que las llamas te quemen por dentro, pero si has violado niños o niñas, como hicieron y hacen algunos curitas, tranquilos, que dios es magnánimo.
Pero esto no es tan así, es parecido, pero no es igual. Porqué si aquí hay enchufes y se puede untar con pasta o con vaselina al que nos examina, digo yo que en el cielo pasará lo mismo, que los pringados como yo, iremos directamente a la llama más viva y reluciente de la caldera del Infierno, pero los ricos y poderosos, siempre tendrán su reservado y les dispondrán un sitio que les tueste pero que no les queme sus carnes. O sea lo suficiente, para que les ponga morenos de alta montaña, pero sin quemarse ni un pelo de sus pestañas.
Yo si fuera rico quisiera ser más rico y si fuera manco querría tener el brazo que había perdido esquiando y a todo trapo en una pista de los Alpes. Y si fuera el manco de Lepanto preferiría no haber perdido la batalla de Lepanto y porque ya conocemos el tema salchichero de que si pierdes la batalla, te pondrán una soga al cuello. Perdón por los desvíos, pero hoy tengo esa necesidad de hacer apuntes históricos y que además nos pueden valer de enseñanza didáctica. Hoy al parecer, me siento maestro o profesor de enseñanza media y doy unas pinceladas de historia macabea y otras de economía financiera y que ya sé que no sirven para nada, pero sí sirven para cubrir mi expediente de profesor de enseñanza media.
..

Yo si fuera rico quisiera ser más rico y si fuera manco querría tener el brazo que había perdido esquiando y a todo trapo en una pista de los Alpes. Y si fuera el manco de Lepanto preferiría no haber perdido la batalla de Lepanto y porque ya conocemos el tema salchichero de que si pierdes la batalla, te pondrán una soga al cuello. Perdón por los desvíos, pero hoy tengo esa necesidad de hacer apuntes históricos y que además nos pueden valer de enseñanza didáctica. Hoy al parecer, me siento maestro o profesor de enseñanza media y doy unas pinceladas de historia macabea y otras de economía financiera y que ya sé que no sirven para nada, pero sí sirven para cubrir mi expediente de profesor de enseñanza media.
..