CRISTALIZARSE

 

Cristalizarse es

es enredarse entre reflejos finos y delicados

y entre diminutos átomos de cristal

 en fin...

es hacerse sólido pero frágil,

es hacerse transparente u opaco...

y hasta que una piedra solar

te rompa en mil pedazos

y de ti

no quede nada.

ME TEMO QUE VA A SER IMPOSIBLE

 

A mí me gustaría contar cosas preciosas y bonitas...

y amables y sencillas y entrañables

y para describir ésta mierda de tierra donde hemos nacido

como un trozo de cielo desprendido de otro cielo mucho más grande

pero me temo que va a ser imposible,

yo miento y tengo esa capacidad en el tintero de mi mente,

pero esa mentira es tan grande y tan inmensa 

que no soy capaz de llegar tan lejos,

además,

ni tengo ganas de mentir tanto y tan alto,

ni poseo la magia suficiente

para cambiar la cara del monstruo en que nos hemos convertido.

VIDA DE LAGARTIJA (Ana Merino)

 


Yo quise ser animal casero
con vistas a la playa
pero soy lagartija y habito entre las grietas
de una roca volcánica en medio del desierto.

A veces alguien corta el final de mi cola
y allí quedan mis sueños moviéndose nerviosos
creyendo que están vivos.

Yo soy como las horas que pierden los domingos
acaricio el descanso metido entre las sábanas
y espero a que amanezcan los días de diario.

La vida es un enigma del que sólo descifro
un trozo de esperanza
lo miro de reojo y nunca me detengo
porque temo al acecho de los tirachinas
o la sombra de un gato.

HASTA AHORA

 


Decía no sé quién 

y tampoco me importa quién lo decía:

 "lo más importante en ésta vida

es saber compensarse" y eso conlleva:

cuidarse, 

mimarse,

quererse, 

a veces odiarse

y sobre todo, analizarse de forma constante

y darse duro (no flagelarse sin motivo)

y hoy tocaba...

 pasar una mano por mi hombro contrario

y decirme a mi mismo 

eres lo mejor que he conocido

-hasta ahora-

y ¿porqué no decirlo?

creo que 

¡hasta siempre!.

TUTE


 

EMILIANO SÁNCHEZ

 

MARIO BENEDETTI


 

A PARTIR DE AHORA

 


A partir de ahora...

voy a cambiar de rumbo y de historia,

seguiré siendo yo pero menos yo que antes,

me esconderé más entre mis miedos y temores,

seré más inteligente con los hechos y sus demostraciones,

seré más tierno, suave y amable de trato,

y mucho más pensativo

y en fin, infinitamente más dubitativo.


A partir de ahora

voy a jugar en el terreno resbaladizo de las indecisiones

jugaré al ahora si y al ahora no,

al puede y al no puede

al es y al no es

al no te voy a decir que no,

pero tampoco te voy a decir que sí

mis indecisiones serán una eterna duda suspendida de la rama de un árbol

dormiré sobre un colchón relleno de interrogantes y puntos suspensivos,

y las dudas serán mis mejores certezas en el día a día

y en el techo de mi bóveda palatina,

dibujaré una estrella alucinante con forma de interrogante.

DE LADO...

 


De lado...de lado...

a veces tengo que andar de lado,

silbando y disimulando como mejor se hacer,

pareciendo ser lo que no soy, ni he sido

ni lo que nunca voy a ser,

colándome por cualquier fisura que se abra en mi camino,

abriendo ventanas,

sacudiendo puertas,

moviendo tierra sin levantar polvareda,

borrando la huella de mis perdidos pasos,

certificando que yo he nacido de lado,

primero fue un hombro

segundo, cuello y cabeza

después, el otro hombro

y por fin y como un supositorio,

el resto de mi cuerpo.

En consecuencia sé que a veces he vivido de lado,

pues ahora mismo estoy de perfil

y viendo la vida pasar

y como sino fuera conmigo.

Aunque también sé

que algún día tendré que dar la cara

y mirar de frente a la vida o a la muerte.

Querida vejez, dos puntos

 

 




Querida vejez, dos puntos:

Me he pasado más de media vida suspirando por ti,

porque contigo veía un futuro feliz y sosegado 

y me sentaba plácidamente en un banco del pueblo,

mirando la vida pasar y a las moscas volar

y con el mar al fondo

(en todos mis fondos siempre está y estará el mar),

sentado, 

tranquilo, 

absorto,

un poco amodorrado,

y de vez en cuando me veía intranquilo e incómodo

por el ruido de algunas motos que usan trompeta con altavoz,

y jurándome que un día cualquiera,

tendría que quemar una o todas a la vez

y para acabar celebrando una fiesta en la plaza del pueblo.


En fin, querida vejez,

te tenía en un pedestal

y ahora que estoy a tus puertas

me estoy dando cuenta

de que no todo es tan perfecto,

que el banco del pueblo luce medio podrido y le falta una pata,

que el ruido de las motos es parte de una tortura pública

y que yo no me encuentro

 con esas fuerzas tan necesarias

como para ponerme a quemar motos.


Lo único que soy capaz de quemar a éstas alturas de mi vida,

es otro trozo de leña que arde en la chimenea y poco más...

ME CONSTA...

 

Me consta

que hay días

en donde no merece la pena levantar cabeza.

Me consta que hay que quedarse tieso y mudo

hacerse muñeco de cera

cubrirse de varias capas de mierda

y poner cara de que aquí no ha pasado nada.

Hay días que sangran

porque alguien abrió su grifo

y a posteriori,

se olvidó de cerrar.

JULIO CORTÁZAR