"Quédate en Casa"
Día 20 de prisión preventiva.
Todos
absolutamente todos
estamos condenados,
unos por buenos,
otros por malos
y otros por gilipollas
y algunos,
se pasan la prisión por su mismo forro,
y la pasan en cárceles con barrotes de oro,
poseen hectáreas y hectáreas de terreno
para poder cabalgar a sus anchas,
correr, pasear, nadar,
jugar al tenis,
solazarse al sol que más calienta,
aburrirse y bostezar con desgana a media mañana,
y en el extremo de ésta película que os estoy contando,
están los que te pasan estos lujos por la cara,
porque piensan que eres un payaso de mierda,
y se autofilman o se hacen selfis
mientras se ríen en tu puta cara de pringado.
En éste mundo de dios siempre hubo imbéciles
a los que le gusta más presumir
que disfrutar de lo que tienen,
y claro en mi,
se produce el efecto envidia
que enseguida se convierte en ira iracunda,
y me cago en todas sus castas
y porque no decirlo,
me cago hasta en su puta madre...
Estamos a día 20 de encierro
y ya se empieza a notar sus efectos,
hoy me tocó ir al super
y la de los fiambres (fiambres de comer),
me decía que:
que el médico le tuvo que recetar ansiolíticos,
y hasta ahora parecía una tía tranquila y comedida (ja, ja),
además cortaba muy bien el fiambre
y bueno, como ella habrá muchos
que necesitan contención química o farmacéutica
y entonces viendo como va la cosa,
os puedo augurar algo:
de éste encierro van a salir más drogadictos dependientes,
menos pasta...más pastillas,
todo el tiempo en casa...más pastillas y un poquito de alcohol
que por supuesto, irá in crescendo...
más sol primaveral...entonces, ya viene el mezcladillo...
muchas más pastillas con mucho más alcohol...
y al final,
va a pasar lo que os dije antes,
alcohol más pastillas dormideras a espuertas
en un batiburrillo bestial
y el que no sufrió el coronavirus
saldrá drogadicto,
sino será las dos cosas
y todo esto, si antes no se ha muerto.