Realmente hay pocas cosas que contar, por lo menos en donde yo vivo y por eso tiene más arte sacar la cosas de quicio o de su sitio y sino y llegado el momento, la invención también cuenta. Como se decía de García Márquez (lógicamente sin ningún ánimo de comparaciones), el representaba al realismo mágico. Pues eso, que yo curro y como un mono y ese es mi realismo mágico y no es mágico, es muy jodido.

Porque medio mes me echo fuera de casa y creo que eso significa, día de curre y día de asueto y la montaña rusa sigue su curso. El Hospital en donde estoy, nos dan de comer aparte y tenemos nuestro sitio de estar y por tanto las relaciones con el personal del resto del Hospital son mínimas, a nosotros solo nos activa el puto teléfono y a través de él nos dicen que tipo de asistencia tenemos que ir y punto y pelota. Y no hay más, después hay conducción temeraria y con las sirenas puestas y como si fuéramos los reyes de la fiesta.
Y cuando llegas al sitio, haces un desembarco de materiales, muchos aparatos y muy variados y mucha parafernalia discotequetera o sea muchas luces de colores, que así impresionas más y más, ¡hombre! y porque algunos aparatos también son necesarios, tampoco hace falta que nos pasemos. Pero yo sé que asustamos, asustamos a la gente de los alrededores, asustamos a la familia del paciente, asustamos a los caracoles y a las hormigas y acojonamos al paciente y claro, con tanto desembarco, al final, nos acojonamos nosotros mismos y porque tenemos que demostrar que valemos tanto ruido
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Pero eso pasa en los servicios y actuaciones que se basan en el subidón adrenalínico. No hay nada más frustante para un bombero que el ir a una actuación y en cambio de un incendio hay que abrirle a un señor la puerta a un señor gilipollas que perdió sus llaves. Pues nos pasa lo mismo a nosotros, que vamos con la adrenalina cargada y cuando llegas, al tío solo le duelen las muelas. Te dan ganas de matarlo y de que se joda en su dolor punzante. No es que busquemos la sangre, pero en parte sí y porque estamos preparados para ello. Pero bueno, tampoco somos perros policía y entonces también se agradece los servicios más tranquilos. Yo solo quería explicar de que iba la cosa, la cosa adrenalínica..