EL ORIGEN DE TU OMBLIGO


Que piensas,
que tú eres dios,
y que la tierra es el origen de tu ombligo,
y que todo el universo gira alrededor de tí
y de tus insoportables egos.
Pues me parece que no,
que no, que estás muy equivocado,
cuando tú vas... yo ya estoy de vuelta,
cuando tú naciste... yo he nacido dos veces,
que me vas a decir a mi, que yo no sepa,
me vas a dar clases magistrales sobre mis ansiedades,
me vas a enseñar el mecanismo de mi funcionamiento,
y es más y te lo digo...
ni lo uno ni lo otro.
Yo te voy a decir como van las cosas,
van, de que primero aterrices donde mejor puedas,
y que no te desmontes y que te queden los huesos enteros,
van, de que te limpies, desatasques y te enjabones
los huevos o los cojones y el mal sabor de boca,
y un buen chorro de agua dulce por encima,
y ahí quizá, podamos empezar a hablar.
Cada uno en su sitio,
yo en el mío y a la misma altura que el tuyo,
y los dos viendo de que va el mundo,
vemos, observamos y sacamos conclusiones,
entonces y a partir de ese momento,
podemos empezar a suponer de que va el mundo
y nuestra historia,
y entonces y quizás y 
por fin, 
nos demos tregua y respiro.

PESADILLAS


 Se me mezcla el deseo de tenerte,

con la música que suena al fondo de nuestra vida

y bajo los efluvios de la luna

me emborracho con la suma delicadeza de tus labios.

Se mezclan pensamientos y deseos,

y todo al final, se enturbia 

y se altera como un monstruo de dos cabezas

y me acaba subiendo tanto la temperatura,

que me salen ampollas, vesiculas y fístulas,

y por fin,

me quedo suspendido entre mis telarañas,

y doy vueltas y me enredo más con ellas,

y cuando estoy a punto de gritar, socorro,

acude en mi ayuda,

 el despertador de la mesilla.

UNA PREGUNTA

Menorca


 Perderte o no perderte,

una pregunta suspendida en una pendiente,

una pregunta más que se cuelga del perchero,
una pregunta que duele y que lastima,
y por suesto...
es una pregunta entre un millón de preguntas.
El caso... es que si te pierdo,
me perderé contigo,
seguiré tu estela de cometa
 y caminaré sobre tus huellas  de princesa,
y te aseguro y es más... te lo juro,
que yo sin tí,
 soy mas pequeño que una estrella del firmamento,
y soy un cero a la izquierda en mi expediente,
 y seré un alma en pena, 
un lamento interminable,
y un pozo seco en medio del desierto,
y de tí depende, y sólo de ti depende,
 que yo siga sintiendo,
lo que ahora mismo siento.

QUIERO...

 

Quiero que me digas, te quiero,

y que al oírlo, mi cuerpo convulsione.

Quiero volver a sentir el sabor de la duda,

y como suena mi risa en la cueva de tu boca.

Quiero que tu cuerpo se funda con el mío,

y que nos demos un baño en una noche de luna.

Quiero sentir el sabor de tu saliva

y el run run de cuando se mezcla con la mía.

Quiero quererte más que al temor de la muerte.

Quiero que tus huesos reposen a mi lado,

en mi cama y con mis sábanas,

y que al final y con sumo cuidado,

apoyes suavemente tu cabeza,

en el hueco que tengo entre mi hombro y mi cuello.

DEBAJO DE TU PIEL DE SERPIENTE


Yo no peto...yo estallo,
y acumulo mierda como diógenes,
busco y rebusco entre la basura,
remuevo ceniceros desbordados,
levanto alfombras y las sacudo,
y esto lo hago, 
delante de tu cara.

Y no me preguntes porqué,
y que necesidad tengo de ello,
yo sólo puedo decir lo que siento,
y siento como mis costuras se descosen
y como por fin, se rompen,
noto como me hincho como un pez globo,
y como floto y asciendo hacia la superficie,
y como me cabreo y me reboto
con la toma de mis peores decisiones
y es que al final
tanto almaceno,
que estallo en mil estrellas fugaces.

O eso es lo quiero,
quiero escapar y desaparecer,
esconderme debajo de unas faldas amigas,
y jugar al escondite o a la gallina ciega,
y ocultarme en el pliegue de tu ombligo,
y acurrucarme como un feto muerto de miedo,
y no escuchar nada de nada,
sólo oir el croar de tus tripas,
y el suave movimiento de tus caderas,
o te lo voy a decir de otra manera...,
quiero que me dejes un sitio
debajo de tu piel de serpiente.

TE BUSQUÉ

 

Te busqué, 

te juro que te busqué,

te busqué bajo de las piedras,

excavé túneles en el tiempo

me subí a las ramas más altas de los árboles,

y no te encontré.

Ni siquiera intuí el caminar de tus pasos 

ni percibí la sombra de nuestro pasado,

y cuando llegué al punto más alto del cielo,

pude ver que todo lo que me rodeaba,

eran desiertos en medio de la nada

y entre todos ellos,

estabas tú 

y como un espejismo en medio de mis recuerdos.

Y te juro que te busqué,

te busqué en otros cuerpos ajenos,

en cuerpos que vivían de noche,

y jugando a que algún día y por fin...

el azar me diera su mano,

pero te juro, que no te encontré, 

les faltaba tu sonrisa,

y la cicatriz que tapabas con el pelo,

y el dulce aroma de tu aliento,

y la extrema ternura de tu mirada,

y no, no eras tú,

nunca volviste a ser tú,

pero que conste...que te busqué,

y hasta volví al mismo sitio,

y en el mismo mes y en el mismo día de aquél verano,

y llovía igual que aquella tarde,

el faro emitía los mismos destellos que antes

el pinar ahora, 

estaba a punto de cerrar por defunción, 

el mar rugía como más cabreado

el cielo seguía igual de encapotado

pero faltabas tú y la brisa acariciando tu pelo.


SI REZO POR TI...


Si rezo por ti,

es para que la suerte te ilumine.

Si rezo por mi,

es para recordar como te he querido.

Si rezo por todos,

es porque a veces, dudo de todo.

Y si no rezo... será por algo,

será por la inutilidad de mis rezos,

o será porque me faltan tus besos,

y es que sin darme cuenta,

de nuevo floto junto a tu cuerpo. 


 

SÁBADO

Sábado, primer sábado después de mi cumpleaños que fue el día 5 de febrero y ese día el mundo tuvo la mala suerte de saber que en una esquin...