Vamos a ver, no sé como explicar que me infancia fue feliz y lo digo, porque todos los psiquiatras, psicólogos y parapsicólogos por los que he pasado, que fueron bastantes, todos y sin ninguna excepción, intentaron cargarse mi infancia y por los cojones del Espartero, yo tuve que tener una infancia infeliz. Bueno, ya sabéis de que va el tema y si una depresión tirando a fuerte te asoma sobre los 30 o 40 años, es que la arrastras desde la puta infancia. Y yo y lo digo sinceramente, lo único que arrastro de mi infancia son muy buenos y magníficos recuerdos y todas mis fotografías infantiles están hechas de bonitos colores y de pinceladas muy suaves y cariñosas. Bueno y supongo que como muchos, hay momentos oscuros y llenos de malas sombras, pero insisto fueron momentos...a veces más largos y otras veces, más cortos.
Pero ¡coño! si tengo algo que salvar de mi vida, aparte de mi época actual y cuando crecieron mis hijos, es mi grandiosa infancia. Claro que ellos insisten que es porque lo malo lo tengo escondido y mira que me hicieron escribir y escribir sobre el puta tema de mi infancia y todo, para pillarme en un renuncio. Y un mal rollo, que lo había sido, se convertía en un dragón de dos cabezas y cuando a mi, el mal rollo me la había sudado y porque en mi infancia aprendí a ser muy pragmático, o sea, había un mal rollo por el medio y directamente se iba a la papelera de reciclaje y además, para eso yo tenía mis mundos, para acudir a ellos cuando yo quisiera.
Yo cuidaba y mucho mis mundos paralelos y eso no lo entenderán nunca los buscadores de antecedentes infantiles. Y como les podía explicar, que yo me elevaba y encerraba enseguida en mi mundo y con tanta facilidad que mi Madre siempre me decía: "hijo, tú siempre estás en la inopia". Y todo porque intuía rápidamente cuando un mal rollo asomaba su cabeza y por desgracia eso era demasiado frecuente, pero por eso mismo mi Madre me decía lo que me decía: "tú hijo, siempre estás en la inopia". Pues nada que erre que erre, que mi infancia había sido una mierda y eso de pequeño no lo supe interpretar como era debido y entonces ahora, me estaba saliendo toda mi mierda reseca.
Y lo siento, pero por ahí no paso y si me quieren llamar desequilibrado que me lo llamen ahora e in situ, pero por favor que no me busquen las cosquillas de mi infancia y porque ese es terreno sagrado e intocable. Y yo tampoco niego que haya casos y casos de gente que estuvo jodida en su infancia y que esa mierda les saliera posteriormente, pero si yo digo, que mi infancia fue feliz, que no me toquen más los cojones y ni complejos ni hostias benditas y ni traumas, ni asuntos aún pendientes, ni que entorno familiar no era el adecuado y no lo era, pero como deciros y explicaros, que yo tenía mis otros mundos y por supuesto, que eran mucho más bonitos que éste.