Dormir poco y acariciar lento,
solazarse al sol invernal de tu mirada,
caminar sin tocar suelo...levitar entre Algodones,
cobijarse y anidar en los remolinos de tu Pelo,
señalar la mancha indeleble de cada pecado,
rendirse ante la evidencia de la impotencia,
pero sobre todo,
insistir, persistir y nunca desistir,
e insistir, persistir y nunca desistir...