Cuando me late la vena es que voy por buen camino y ahora tengo la yugular saltando sola y a su libre albedrío. Estoy que me salgo, noto como la sangre me hierve y mi cabeza echa humo por los oídos y mis dedos se agotan de escribir tanto. Cuando estoy así, como ahora, soy un volcán en erupción incontenible y soy un terremoto de ideas, y claro, te preguntas porque no puedes estar así todo el día, pues yo vendería mi alma al diablo, si él, a cambio, me dejara en éste estado. Pero bueno, después lo pienso un poco más y me digo: tío, todos los estados de exaltación tienen un tiempo, porque sino brotarías. Pues me da igual, me contesto, yo vendería el alma al diablo y es que me reafirmo en ello y si tengo que brotar como brota un tallo en primavera, pues broto, pero dejarme en este estado, este estado entre espacial y alucinógeno.
Los que aprenden el arte del teatro, entre otras cosas les enseñan a desinhibirse y para ello practican y entrenan técnicas de relajación y de romper la vergüenza. Tienen que romper cantidad de clichés y estereotipos y reír, gritar, llorar y cabrearse y poner cara de poker, pues saben que por sus gestos, movimientos y rictus, va a depender el que espectador puede llegar a creerse lo que está expresando con las palabras. Pues aquí, escribiendo pasa lo mismo, hay que desatar los nudos de tu cabeza y soltarlos a su aire. Difícil también, pues aquí no hay guión hecho, el guión es el que va saliendo en crudo y en calentito y hay que atinar con las palabras para que expresen lo que sientes y padeces y uno no se puede acompañar de gestos o movimientos de manos o de una sonrisa o una lágrima, todo se tiene que hacer con el juego de las palabras.Yo pretendo desinhibirme escribiendo y para ello no hace falta contar, si hoy has cagado mal o bien o si has meado fuera de la taza, no hace falta ser tan detallista, llega con ser sincero y decir lo que piensas y sientes. Los detalles ya sabéis que para mi son fundamentales, pero su exceso es nocivo si es repetitivo y además hay detalles que son tan tuyos, que a lo mejor poco a poco los vas contando. Mejor poco a poco, porque de golpe a alguno le puede dar un Ictus o una Apoplejía y tampoco la cosa es para eso, digo yo, que la cosa no es para eso..











