John Mayer - Free Fallin' (Live at the Nokia Theatre)

Tom Waits - I want you

DEMIAN (Herman Hesse)


DEMIAN (Herman Hesse)
«El estigma fue lo que existió en un principio y en él se basó la historia. Hubo un hombre con algo en el rostro que daba miedo a los demás. No se atrevían a tocarle; él y sus hijos les impresionaban. Quizás, o seguramente, no se trataba de una auténtica señal sobre la frente, de algo como un sello de correos; la vida no suele ser tan tosca. Probablemente fuera algo apenas perceptible, inquietante: un poco más de inteligencia y audacia en la mirada. Aquel hombre tenía poder, aquel hombre inspiraba temor. Llevaba una «señal». Esto podía explicarse como se quisiera; y siempre se prefiere lo que resulta cómodo y da razón. Se temía a los hijos de Caín, que llevaban una «señal». Esta no se explicaba como lo que era, es decir, como una distinción, sino como todo lo contrario. La gente dijo que aquellos tipos con la «señal» eran siniestros; y la verdad, lo eran. Los hombres con valor y carácter siempre les han resultado siniestros a la gente. Que anduviera suelta una raza de hombres audaces e inquietantes resultaba incomodísimo; y les pusieron un sobrenombre y se inventaron una leyenda para vengarse de ellos y justificar un poco todo el miedo que les tenían. ¿Comprendes?»

 

LA LUNA Y YO...



No existe nada ni nadie allá en el espacio tiempo del infinito.
No sé lo que tengo que hacer fuera de hora o fuera de sitio.
No sé si ponerme a dar vueltas sobre mi propio eje
y buscar ondas vitales entre mis satélites.

Al mismo tiempo quiero conocer mi luna,
mi bella luna romántica,
mi valiente luna que con todo se atreve,
esa luna que se atreve a subir y bajar mareas,
que convierte a los lobos en hombre lobos,
la que desquicia, más si cabe, a los locos,
la que aumenta el número de partos...

Esa luna que cuando me alumbra me pregunto...
como enciende sus luces blancas evanescentes,
como dibuja sus contornos de sombra de ojos,
como enternece desde al más iracundo
hasta la bestia más inmunda
quiero saber su funcionamiento interno
y conocer en que se basa su potente poder,
pues yo a su lado, no soy nada ni nadie,
sólo soy un admirador apasionado
yo haría lo que ella quisiera,
yo amo a la luna y por encima de todo
y que nadie ose tocarla,
ni la insulte, ni le falte al respeto,
la luna y yo somos gemelos
con el mismo epitelio
nacidos el mismo día y a la misma hora,
pero ella se llevó la mejor parte
y yo en cambio,
me tengo que conformar con este trozo de cuerpo.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...