Ser mucho más que hoy
Yo no me convertiré en ti
no te seguiré como un perro en celo
no iré a bailar contigo porque no sé bailar con nadie
nunca aprendí a bailar
aunque tampoco le dediqué tiempo
y porque en mi vida tuve otras preferencias...
preferí hablar, escuchar música,
reírme hasta de mi propia imaginación
ver el mar desde todos los ángulos
apoyarme en un faro y ver pasar los barcos
bañarme desnudo en una playa de ensueño
mirar y contar estrellas fugaces
ver los reflejos de la luna y de la hoguera
que acababa de encender
dormir sobre la arena húmeda y fría
pensar que mañana siempre sería un día mejor
y cuando el sol me despertara con su luz suave
sería otro ser que reclamaría ser más
ser mucho más que hoy.
Pobre Caribe
Pobre Caribe y lo digo, porque por cualquier sitio que voy, siempre aparece una playa muy linda y muy preciosa con arena muy blanca y aguas increíblemente cristalinas, siempre hay el graciosillo de turno que nos dice: esto no es el Caribe y es una playa de aquí y que se llama "la concha de tu madre" y por ponerle un nombre sin más. Después te ponen la foto y la verdad, es que es una playa preciosa, pero que culpa tiene el Caribe con que esa playa sea preciosa. Pues ninguna y el Caribe tiene unas playas que te cagas y alguna de las de aquí, pues creo que te podrías cagar una o dos veces. Pero el tema problema no está en cual de ellas es más bonita, aunque para algunas mentes demasiado estrechas, la playa que está a lado de su casa tiene que ser la mejor del mundo mundial. Y jamás van a salir de ahí y no pueden ni son capaces de hacerlo y porque su falta de miras es tan impresionante, que lo suyo de su terruño tiene que estar por encima de lo demás. Es parecido al que va de viaje al culo del mundo y cuando empieza a observar tanta belleza a su alrededor, piensa y dice, que tampoco es para tanto y que en su tierra hay por ejemplo, playas mejores y se come mucho mejor y un largo suspiro de pena inmensa me entra...
Que pena de Caribe. ¿Qué culpa tiene el pobre?. Bueno eso mismo le pasa por ejemplo a Venecia y porque vayas por donde vayas, siempre hay una Venecia autóctona que es completamente diferente a la original, pero como es de aquí y como hay algo de agua entre sus calles, hay que decir que es mucho mejor que la auténtica. Hasta los fiordos noruegos están en esa lista tan penosa. O las mismas cataratas del Niágara o las cataratas del Iguazú y porque en tu tierra hay una catarata que tiene varios metros de altura, pero como es de aquí y de confianza, para que te vas a desplazar al otro lado del mundo y para ver una de las más grandes maravillas del mundo.
Claro que ahora y en estos tiempos en que vivimos, lo de desplazarse en masa y haciendo de turista típico, tiene sus grandes problemas para que se mantenga sano el ecosistema por donde pasan, pues arrasan más que pasan. Pero eso pasa aquí y en Roma y en Noruega y Suecia y en Grecia y hasta en Croacia que ahora la han puesto de moda y por eso dentro de poco, será otra mierda pinchada en un palo. Somos masas de carne con ojos desplazándonos por todos los más lindos rincones de la tierra madre y como los lugareños viven también y sobre todo de ello, ¿quién puede para esa máquina de destrucción masiva?. Pero eso no quita y para nada, que no dejemos de intentarlo y todo y para nuestra desgracia, hay que ir limitándolo y para que en cada día no se exceda de un número determinado de turistas y de coches de alquiler y de barcas y yates en el mar y un muy largo etc...
Mi sueño de pequeño era ser...
Mi sueño de pequeño era ser...era ser que no me acuerdo de lo que quería ser. Yo era de los que me gustaba todo y de los que no me gustaba nada, pero querer ser de mayor algo en concreto, es algo que aún ahora me sigo planteando. Lo de ser médico no entraba dentro de mis opciones, aunque la única alternativa en la que pensaba, era que quería ser biólogo. Pero me temo que era porque a los humanos los apreciaba bastante menos que a los animales y a las plantas, aunque claro había numerosas excepciones y por eso socialmente, no era un puto marginado. Yo me basaba más en lo que no quería ser y no quería ser bombero, ni policía, ni socorrista, ni cura pederasta, ni farmacéutico, ni matemático, ni astronauta ni investigador de la Nasa y entonces pocas opciones me quedaban y para estaba la moneda al aire y cara era medicina y cruz era biología y salió cara y por esa gran razón y por ese inmenso motivo, me puse a estudiar medicina. Y para ser del todo sincero habría que añadir una tercera razón y era que como de aquellas era un ferviente de la revolución pendiente, me dijeron (mis jefes revolucionarios) que hacía más falta y para darles la brasa, en medicina.
O sea que ahora que ya me he jubilado, ya puedo dar las verdaderas razones porque las que estudié medicina. Al segundo año, estuve a punto de abandonar la carrera y pasarme a otra cualquiera y en donde no hubiera que estudiar tantas cosas aburridas, En tercero de carrera, ya cambió la cosa y porque empezaron las asignaturas a ser más interesantes y bonitas. Tuve una época en que quise ser psiquiatra y porque el tema del coco era muy interesante y porque de aquellas pensaba que yo podía aportar mi granito de arena. Tuve otra época en que quería ser dermatólogo y debía ser porque yo tenía la piel demasiado fina y por eso era tan sensible a todo. Tuve otra pequeña época en que me gustó y mucho la radiología, pero esta vez era por culpa del profesor que tenía, pues transmitía pasión por el oficio.
Claro que después hice una rotación de unos meses por radiología y la cosa cambió dentro de mi cabeza y no me veía metido toda mi vida en un cuchitril de mierda y para ver todo el tiempo, una radiografía tras otra y sin tener ningún contacto con el paciente problema. Al final de la carrera, me daba igual lo que fuera y era un médico y de ahí partía y hasta donde llegaría nadie lo sabría. Pues aquí estoy 45 años después y tengo que decir que intenté no reducir la medicina a un puto protocolo, pero resulta y por cosas que así tiene la vida, que fui a dar con una rama de la medicina que ama como nadie, los protocolos (medicina de urgencias y emergencias) y entonces y al mismo tiempo que trabajaba estaba dentro de una lucha constante y porque a veces no me quedaba otra que tirar de los protocolos y en las veces restantes siempre traté de ser flexible, observador y así aplicar lo que yo creía más conveniente para esa situación determinada. La lucha entre el yin y el yan. Que lo consiguiera sería una discusión aparte y creo que daría para escribir un libro o dos...pero ese es oro tema que no toca hoy.
JOSÉ SARAMAGO
Nunca fui un verso suelto
Nunca fui un verso suelto
quiero decir
que más bien, no lo era
y porque no era de abrirme el alma en canal
y de soltar toda mi mierda.
Yo era un ser raro y extraño,
apocado, a veces
y explosivo, otras veces.
Era como muy metido dentro de mi cueva
y cada paso que daba para decir lo que sentía
era demasiado corto y tímido
y por eso muchas veces,
no llegaba a darlo
y sin darme cuenta volvía a estar de nuevo dentro de mi caparazón.
Con el tiempo me fui haciendo más suelto
más amigo de mis amigos
más compañero de los que se ganaban mi confianza
más solidario
más comprensivo y más expresivo.
Ahora y en estos momentos,
sí que soy un verso suelto
estoy abierto a lo que venga
y mis únicas armas son mis palabras.
Con ellas no mato a nadie
y en cambio me ayudan y mucho
a interpretar todo lo que pienso y siento.
PODRÍA
NOSOTROS
JAROSLAV SEIFERT
PATRICK WHITE
Yo, si viviera en otra tribu
Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...
