EL APARECIDO (pensamiento)

  No hay muchas novedades, no las hay en número, pero si en peso. Por fin he entregado las llaves de mi casa, parecía "misión imposible" llegar a la meta y como siempre en el último día y en el último instante. El agobio se me hizo insoportable, empecé con entereza y como capataz de la obra y acabé de peón albañil y pidiendo papas y menos mal que al final me echaron una mano los que siempre me la echan, mi familia adoptiva o sea la familia de mi ex mujer, que mal suena lo de ex, pero es eso lo que hay. Bueno pues entre una ex cuñada, dos sobrinas, mi ex mujer y uno de mis hijos y mi amigo Miquel y el menda, pudimos acabar la tarea y la acabamos por los pelos. ¡Menuda enchenta!. Ayer ya fue la hostia, acabamos a la 1 de la mañana después de faenar todo el día y de nuevo a las 5 en pie y a seguir currando. Yo pensé que me iba a pasar lo de siempre, que iban a llegar los inquilinos y me iban a pillar guarro, sucio y asquerosillo, pero sobre las 8 y 15 minutos dimos por finalizado y los inquilinos llegaban  a las 9. Me dió tiempo a maquearme, ducharme y acicalarme y hasta pude cagar antes de su llegada.

                                Por cierto, los inquilinos encantadores y de nuevo el río poco a poco vuelve a su cauce y yo de nuevo aquí, al pie del ordenador y contaros cosas. Aunque todo hay que decirlo, estoy un tanto oxidado y sólo han pasado dos días, y es que aún noto mi cabeza llena de muebles, de camas, de pinturas y de esquinas llenas de polvo y de cagarme en quién me hace y de vez en cuando la limpieza de éste santa casa, los oídos aún le estarán zumbando.  Porque uno cuando vive en su casa, se hace a vivir entre sus cuatro esquinas y hasta lo acumulado le parece imprescindible y cuando rebasas tus fronteras del día a día,  es cuando penetras en selvas extrañas y si parte de ello se lo encargas a una segunda o tercera persona, a la cual pagas, por supuesto y ves que la tía se ha pasado, ya no tres pueblos, sino 5 o 6 y sigue tan campante, y tú echando los belfos y dando bufidos de foca. Pues que va a pasar, que simplemente te cagas en ella y en toda su parentela.

                               Ahora ya conseguí tener más distancia y después de un merecido descanso o una buena siesta ya empiezo a mirara para adelante, durante varios día me había quedado atrapado entre cuatro paredes, las mismas que delimitan mi casa. Gracias familia, y gracias amigo Miquel, gracias por salvarme de la quema, gracias por mucho y gracias por todo. Ahora  soy como el aparecido que resurge de sus cenizas y cuidado conmigo, pues tengo demasiadas cosas que contaros y os juro que no me voy a cortar ni un pelo. El aparecido vuelve por sus fueros. Perdonadme si aún no estoy a tope, por favor un poquito de paciencia.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...