DIFERENTES SENSACIONES

No todo fluye y sale a la superficie, no todo es esperar y el tiempo te lo dirá. Para mí el tiempo es un aliado, es decir, el tiempo suaviza o agudiza las cosas, pues el tiempo no es un factor neutro y que de por sí, tenga esa capacidad de amortiguar las cosas, pero sí es verdad, que si tú quieres puede ser un gran aliado. Por lo menos es mi forma de ver las cosas y cuando las cosas duelen y te superan, tiene que haber un punto de pausa y de meditación (hablo de mi propia experiencia) y eso requiere un tiempo muerto. Ya digo que hay muchos métodos para superar las cosas, pero yo tengo éste y no puedo hacer otra cosa (lo cual no quiere decir ni de coña, que sea el mejor método). Pero digamos que mi primera obligación como persona, es respetarme a mi mismo.

Y fijaros que yo nunca hablo de olvidar y por tanto, que razone que el tiempo es un aliado idóneo para poder olvidar las cosas...porque no, porque yo nunca quiero olvidar y porque una gran parte de mi vida la forman los recuerdos y tanto sean los malos como los buenos. Yo más bien hablo de revivir antiguos momentos, de volver a ellos, de regocijarme y sufrir con ellos y de intentar entender porque de aquellas actué de aquella determinada manera y si al final y aunque hayan pasado 20 años, hay que pedir perdón, pues se pide y porque yo sé el peso que uno se quita de encima.

Claro que a veces te llevas sorpresas y tú pensabas que eras un ser importante para esa otra persona y después resulta que sí lo fuiste pero no tanto...pero bueno, lo mismo pasa del revés y alguien te dice que tu fuiste en aquél momento alguien fundamental en su vida y tú pensando en ¡qué bonita fue aquella amistad!...Y os aclaro una cosa, ésta es una de las partes más bellas que tienen los recuerdos: la diferencia de sensaciones y las distintas percepciones...

LA CALIDAD

Hoy es Domingo y llueve y hoy han tenido conmigo un precioso detalle, me han regalado un algo (un vaso de cerámica y una pequeña cajita de bombones) por haber conseguido estar 18 días sin fumar. Y ya veis lo que hace un pequeño detalle, me pone tierno y agradecido, sumamente agradecido y porque también me doy cuenta de que llevo años de profundo aislamiento. Es decir, antes tenía más número de amigos y amigas y de vez en cuando y como el que no quiere la cosa, caía un pequeño detalle...pero como por el medio hice limpieza, el número de amistades se ha reducido a la mínima expresión...digamos que si ahora hago recuento me sobran los dedos de una mano. Pues ya veis, escogí la calidad.

Bueno, todos son momentos y hay momentos en que te dejas querer por todos los que te rodean y sin condiciones y hay otros momentos en que es mejor que nadie te toque...y hay que saber respetar ambos momentos. Pues sí, yo pasé hace muy poco por una etapa depurativa o por una etapa de hacer selección de mis amistades y al final no me quedé sólo de puto milagro, pero no penséis que me asustaba la posibilidad de quedar sólo, al revés me puse tan extremo que ahora pienso que realmente estaba buscando la soledad más radical. Bueno, esto es como lo de los discos duros y a los que de vez en cuando hay que hacerles una limpieza.

¿Qué si me pasé?, pues si señor, me pasé y me pasé unos cuantos pueblos y corté cabezas y manos y despellejé a personas y yo que sé...hice y causé verdaderos estropicios...pues aquél ser todo calladito, simpático y casi siempre borracho, se había convertido en un ser claro, huraño y abstemio y en cambio de tomarnos juntos una copa del peor licor y del que más coloca, nos vamos a tomar una dosis de sinceridad y claro..., no todo el mundo estaba preparado para semejante transformación

MI BALANCE QUINQUENAL

No sé lo que me pasa últimamente, bueno sí, me supongo que estoy haciendo muchas cosas a la vez y por eso de que se dice "de que muchas cosas confunden". Y pongo esas palabras entre comillas, porque estoy seguro que dependiendo del momento en que te encuentres, las mismas cosas pueden aumentar o disminuir tu confusión. Es decir, hace unos pocos años tenía frentes abiertos por todas partes y porque quería y necesitaba tenerlos y por esa simple razón, podía con todo. Y poco a poco han ido disminuyendo el número de mis batallas, quizás porque me canse estar todo el santo día luchando o quizá, porque simplemente me guste alternar momentos de paz con momentos de guerra. En el fondo el porqué no importa mucho, porque en éste caso lo que importa de verdad, es mi poder de adaptación a cada no de esos momentos.

Y ¿porqué digo todo esto?, pues muy fácil y os lo voy a demostrar claramente y para que veáis que en ésta vida todo tiene su explicación torticera. Mi esencia o mi fondo del armario sigue siendo el mismo o sea, me encuentro en uno de los mejores momentos de mi vida y la verdad es que con ésta base tan sólida, me importa muy poco lo guerrero o lo pacífico que me sienta o que sea. Por eso me siento tan fuerte dejando de fumar y haciendo dieta y ejercicio, claro que todo esto requiere un tiempo, pero no porque dude de mis metas, sino porque necesito un tiempo humano de adaptación.

Sí, hablamos o mejor dicho hablo del puto yin yang de la vida, pero en éste caso hablo de sus formas secundarias, porque repito una cosa, mi esencia o mi forma principal presenta muy pocas oscilaciones en estos últimos 5 años y si tuviera que pronunciarme por algo, tendría que decir que llevo 5 años instalado en el lado feliz de la vida y a pesar de todos los malos rollos por los que he pasado. Por tanto mi plan quinquenal ha sido netamente positivo y mi silencio se debe a eso, a esa pausa tan necesaria para planificar el siguiente...

JULIO CORTÁZAR