¿quizá para desahogarme un poquito?.

 

Lunes día 8 de julio. Hoy curré todo el puto día y por eso ahora, son cerca de las 10 de la noche y sin darme cuenta me he jodido un día más o he disfrutado de la vida un día menos. Ahora ya casi ni disfruto de mi puto curre de médico, lo intento, yo juro que lo intento y me angustio por el paciente y me pongo en su lugar y yo acabo de muy mala manera. No sabéis como deseo dejar el tema  médico y dejarlo como algo que hice con la mejor de mis intenciones y que tuvo su momento y su propia historia, pero que ya tengo mis 68 años y voy como excesivamente cansado del tema problema. Cansado física, emocionalmente y mentalmente. Me gustaría poder decir, hasta aquí he llegado, pero al final me puede mi obsesión que consiste en dejar mis pobres arcas sin pufos ni putas hipotecas. Metí la pata cuando compré esta bendita casa siendo tan viejo y para poder comprarla tuve que hipotecarme hasta las pestañas y como siempre fuí un puto veleta que iba a donde me llevara el viento, pues ese viento me llevó a tener que pagar una hipoteca hasta los 75 años.

Buen negocio hice, fue cojonuda mi puta idea y vendí mi vejez por unos asquerosos euros de mierda. Y en ello estamos y estamos currando a destajo en pleno verano y así lo haré hasta que me dejen seguir currando (solo dejan y por cierto lógicamente, hasta los 70 años, más me parece una verdadera pasada) o hasta que me quede tieso como una mojama. Y murió en acto de servicio y supongo que por eso me darán una medalla de hojalata. En mi lápida pondrán los de mi empresa (los que ahora me pagan), una minúscula reseña y por la que no pagarán ni un euro y recalcando que murió en acto de servicio. Y como si eso me sirviera para algo en el otro mundo. Cuantos gilipollas habrá igual que yo, que se empufaron y por el motivo que sea, hasta el cuello y que los muy gilipollas murieron como yo en acto de servicio.

Hay que joderse y a mí cuando me contaron de que iba la vida no me dijeron que en mi vejez las iba a pasar canutas. Me vendieron la moto mientras se reían delante de mi puta cara de pringado. A veces, resuenan dentro de mi cabeza esas malditas carcajadas y como si mi cabeza fuera una verdadera caja de resonancia. Te jode el tema...pues toma dos tazas. Te deprime el tema...pues aquí lo siento y porque no me deprime, me jode que es distinto. Me jode, me molesta, me cabrea, me pica, me chirría, me resuena, me golpea sin compasión y a veces y solo a veces, me entran ganas de salir a la calle y de romperle la cara a alguien (al primero que se cruce conmigo). No sé porqué cuento estas cosas tan íntimas y personales, ¿quizá para desahogarme un poquito?.






















Que no me falte de nada

 

Que no me falte de nada

que la vida es muy corta

y hay mucho que ver

antes de irme para el otro barrio.

Sinceramente espero no repetirme mucho,

yo digo cosas

suelto pensamientos dispersos

creo historias

pequeñas historias sin mucha importancia

y las cuento y las pienso

o las pienso y las cuento

y a veces y solo a veces, las escribo

es decir para que yo escriba un poema 

tiene que pasar previamente por mil filtros

o por mis autocensuras

y quién me diga que nunca se autocensura

es muy sencillo

no le creo y punto.


























Joan Margarit.

 

"Cruzando temporales

se aprende a planear.

Sobrevolar la vida

para avanzar usando

la violencia del viento.

Igual que las gaviotas".














PENSAMIENTOS DIVERSOS


 Y con este calor insoportable, mortífero y pesado como una cruz que tenemos que llevar por la vida en días como el de hoy, se me están hinchando, aparte de lo que ya sabemos o suponemos, los pies. Se me hinchan los pies como melones a tensión, pero los zapatos o zapatillas no se ensanchan al mismo ritmo y entonces, es como si mis pies estuvieran a punto de petar o de reventar dentro de mis zapatillas. Es de suponer que todas mis partes y hasta las más íntimas y hasta ese pequeño cerebro que tengo instalado dentro de mi cráneo, estarán sometidas a ese mismo o parecido tipo de presión. Hoy no corre el aire, ni siquiera anda. Lo de los pies es algo nuevo y poco a poco y cada año, hay algo nuevo que se me estropea. Los coches viejos ya se sabe, un día falla una pieza y otro día, falla otra. La verdad es que me canso de sentirme viejo, pero si lo estoy y además, no la cosa no tiene remedio, como es el caso ¿qué otra cosa puedo hacer?. ¿Rendirme?, pues no de momento. Acoplarme, ya suena mejor y me acoplo a mi viejo cuerpo desgastado y eso significa, que me reconozco como cacharro viejo. Los viejos vamos bien como adornos y como estatuas o como viejos floreros que poco a poco se van quedando sin flores.

No me siento tan viejo y decrépito como para que me tengan que enterrar mañana, aunque estoy en una edad donde cualquier día puede ser el último. Ahora los veranos son los que marcan mi espíritu de supervivencia y según salga de este verano, podré predecir como será mi vida el resto del año. Los viejos con el calor pocheamos. Y me estoy dando cuenta, aunque en realidad ya lo sabía y otra cosa distinta es reconocerlo, que por mucho que me enfrente a la vejez ella poco a poco va ganando la batalla. En fin, debe ser que en el día de hoy, tengo mi moral por los suelos. Cuando toco fondo, prefiero esperar a mañana y para saber si fue cosa de un día o es el comienzo de una etapa nueva. Espero que no, prefiero pensar que un día malo lo puede tener cualquieray que mañana..."pelillos a la mar".

Día duro el de hoy. Día donde me acuerdo y mucho de mi padre y como de repente a los 64 años, se le vino el mundo encima. Yo, ya ando en los 68 y tengo muchas más y mejores herramientas para enfrentarme a este tema que las que tenía mi padre en aquellos tiempos. Tengo fondo de armario en cuanto a ánimos, tengo la experiencia previa de mi padre y muchas más que ahora mismo no voy a mencionar, tengo mis penas pero también tengo mis glorias, valoro la vida y creo que la vida también me valora a mí.














 

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...