DOS (Poema)

Si hoy me dijeran, ¡te quiero!
 lo dejaría todo,
dejaría mi casa, dejaría mis sueños,
dejaría mis prisas, dejaría mis miedos,
dejaría de comer y de hablar a solas,
pues en ese justo momento, 
seríamos ¡dos!
y dos, son más que uno
y dos, son dos igual a dos,
y en mi alma y en mis sueños,
dos se cogen de la mano, 
dos se besan la boca, 
dos se acarician con sus dedos,
y por eso yo quiero,
¡qué seamos dos y nada más que dos!

¡¡¡MERECE LA PENA!!!

Es que yo no tengo la culpa de haber nacido así de compulsivo y lo que veo, lo quiero y lo que toco, me lo como y sin que sobre nada y lo que escucho, lo grabo y por si acaso están hablando mal de mí. Bueno y como comprenderéis a éstas alturas de la película me la refanfinfla el que hablen mal de mi y porque perdí la vergüenza hace mucho tiempo y precisamente hablando de esto, me acuerdo perfectamente del día en que la perdí y la perdí, cuando nací. Bueno y bueno y menos globos caperucita y lo digo porque por el medio de mi vida pasé ciertos períodos en que me avergonzaba hasta de mi propia existencia. Pero eso tengo que decir, que mi vida no fue una puta línea recta ascendente y en plan cohete.

Mi vida y como supongo, que la de todos, tuvo altibajos y épocas tristes y melancólicas y otras en cambio, fueron y son geniales y mágicas. Ahora, estoy en época mágica y porque lo que veo lo transformo con mi mirada y lo que toco, lo deformo y creo una preciosa escultura de palabras y por eso, voy a mi puta bola y a mi puto aire. Hoy toco y transformo, hoy llueve y me mojo, pero no me importa mojarme y porque me encantan los charcos y porque quiero saltarlos. Y si hace viento, pues lo mismo y cojo el viento del norte y le doy dos besos y al del sur le abro mi puerta y para que pase y se lleve el mal fario y las malas sombras.

Es que lo mío con los fenómenos de la naturaleza no tiene nombre y todo, porque me encanta todo lo exagerado y lo que no tiene límites, me entusiasmo con las cosas desatadas y un tanto desquiciadas. Claro que después pasa que...que haber quién tiene cojones de seguirme en mis locuras o quién puede quererme de esa manera tan loca o quién me aguanta en mis baños de sueños y palabras o quién me escucha todos mis desatinos y paridas... Pero en el fondo yo creo y estoy convencido de que : ¡¡¡¡merece la pena!!!! y porque sino ya habría cerrado mi chiringuito y por defunción.

EN ALA DELTA

Pues pasa que el silencio me está visitando y que poco a poco todo se tiñe de silencio mudo y espeso. Y ¿porqué los silencios pueden ser espesos?, pues porque los silencios pueden ser incómodos y porque ese silencio es obligatorio. Y es que un silencio voluntario es volátil y ligero y tal como vino, se va...y sin más historias. Yo amo los silencios, aunque reconozco que para estar yo en silencio, se tienen que cumplir todas mis condiciones y esas son: silencio voluntario, silencio reflexivo, silencio respetuoso, silencio ante un muerto, silencio ante algo inverosímil, silencio sepuscral, silencio en señal de duelo y el silencio del estar sintiendo y porque para sentir, se necesita del silencio...

Como veis hay muchos tipos de silencio, pero con todos esos tipos me quedo y porque al fin al cabo, nacemos en silencio y morimos en silencio. Y ahora que estoy en el puto silencio de la noche, oigo mis teclas y escucho los coches. Claro que, claro que no hay mejor silencio que el del campo y porque en ese silencio se escucha mucha vida y el viento y la brisa marina y los árboles hablando entre ellos y la paloma torcaz tocando los cojones de uno, pero ese es el silencio de campo y no el que tengo ahora aquí. Aquí se escuchan coches, se oyen voces y de vez en cuando, llegan los gritos de las sirenas del mar.

Y es que para alucinar, alucinar, sirve cualquier sitio y en cambio para rezar, pues ya no. Y ¿para querer?, pues para querer sirven muchos sitios, pero para mí, todos tienen que estar sin gente y sin cotillas que te toquen los cojones. Una casa, un apartamento, la trastienda de un coche, el water de un avión (que eso lo he visto yo en una película), la mesa de la cocina, la escalera de incendios, el balcón del vecino, la mesa camilla, la ducha, la bañera, la encimera y por supuesto, el sofá y la cama. Aunque mi mayor ilusión en éstas lides, es hacer el amor llegando en Parapente o en Ala Delta y entrando por la ventana de la habitación y bum¡¡¡ en la puta diana...pero eso sí, con mucho amor y delicadeza.

SIEMPRE HAY QUE DEJAR ALGO DE MISTERIO

No sé, hoy el alma me pide reposo y el cuerpo, creo que también. Hoy pido apagar la luz de mi mesilla y que al mismo tiempo se apaguen todas mis luces por dentro y quedar fundido y dormido y hasta que salga el sol. La verdad es, que pido mucho y porque no todo transcurre en la paz del señor y antes y justamente antes de dormir, viene tu puto demonio y te empieza a comer el coco y venga si pudiste hacer esto y venga si te la pudiste llevar al huerto y venga si tengo que cambiar de muñeca hinchable y porque ya está pinchada y descuartizada. Bueno, son las cosas del amor o del querer o simplemente, de estar muy salido y sin saber porqué...Bueno, tampoco es tan complicado y si la mojas poco, pues estarás salido y salidísimo y punto y pelota.

Pero hoy no, hoy estoy tan cansado que ni follar quiero, pero si quiero dormir a tu lado y buscar ese huequito de tu espalda y acariciarlo y quererlo y amarlo y chuparlo...y no sigo y porque me va a dar un pasmo. Estoy tan desatado que quién me tire de un hilo me deshilacha enterito y es que lo que realmente me pasa es que hasta la última célula de mi cuerpo es susceptible de convulsionar y a lo mejor un sólo beso actúa de gatillo o una preciosa caricia o una bonita palabra. Y me vale cualquier cosa que me cree una corriente eléctrica o espasmódica y para ello, no hay mejor alternativa que las caricias y los besos.

Y si me acarician por la espalda yo noto como todos mis nudos se desatan y es como si alguien tocara el acordeón sobre mi espalda. Hombre también tengo puntos G o puntos gatillo que se disparan nada más tocarlos, pero creo que esa clase la daré otro día y porque tampoco quiero que sepáis demasiado y hoy, con ésta introducción ya tenéis bastante y porque siempre y siempre hay que dejar algo de  misterio.

LA AMBIVALENCIA

Y hoy ¿como me como?, me como de lado, me como de culo o empiezo por el dedo gordo del pie derecho o por el Occipucio, que por cierto me encanta esa palabra: OCCIPUCIO o Coronilla de la cabeza. Yo el Occipucio lo tengo casi despejado o calvo y debe ser porque cuando me dan por el culo, me dan tantas besos en ese sitio y con tanta pasión..., que poco a poco se fue aclarando. Bueno, son cosas del amor, del amor de hombres y de sus pasiones desatadas. Y hoy la verdad es que no estoy para grandes reflexiones filosóficas y prefiero caer en el pragmatismo más voraz y si una más una son dos, hoy serán dos y a tomar por culo.

Hoy estoy como si me hubieran follado 50 veces y sin que me la quitaran. Y la verdad es que hoy no me han follado, ni me han dejado follar y todo, porque el destino es muy cruel conmigo y el destino que me ha dicho que: que hoy no está el horno para bollos. Bueno, son las cosas de la carne y del querer...y además yo en esto, soy un ente extraño, pues me gustaría follar en los sitios más raros y más alucinantes, pero a la hora de la verdad, me olvido del follar por una simple y cariñosa caricia y unos cuantos besos con lengua y frenillo.

Yo, me acuerdo del día en que me conocí, me acuerdo perfectamente de aquellas melenas al viento y de aquella Trenca medio guarra y de aquél sempiterno cigarrillo entre mis labios y venga a fumar y venga a charlar y venga a decir tonterías...y porque decir tonterías es mi santo y seña y porque en definitiva, me gusta reírme hasta de mi propia sombra. Eyyy!! y que nadie piense que voy de puto payaso de la vida, pues lo mismo me río de algo, como que al mismo tiempo me revuelvo y le meto una hostia que le parto la cara y le saltan los dientes de su puta cara de payaso. La ambivalencia, la famosa ambivalencia y un día, soy una flor delicada y otro día, soy un cardo borriquero.

¡NO PIDO TANTAS COSAS!

Y hoy ¿qué pasa?. Pues pasa que es Viernes y como si fuera Lunes o Martes y porque me da igual y que es día 26 de Febrero y por tanto, ya estamos liquidando éste mes. Y pasa eso y no pasa mucho, pero si pasan cosas por mis interiores. Por mis interiores pasan corrientes y tsunamis y erupcionan demasiados volcanes, aunque siempre es muy bonito observar la convulsión de los volcanes, pero es bonito desde la distancia y sin que tú seas la puta lava incandescente. Pero bueno, no me puedo quejar de la vida y porque me extiende bajo mis pies, bellas alfombras de flores y sentimientos. Y como observareis hoy me encuentro blandenge y un tanto fofo, pero es que no todos los días puedo estar brotando por las verdes praderas.

A veces la cosa requiere calma y para que te atragantes con tanta vida. Claro que, si por mi fuera arrasaría los campos de trigo y los convertiría y por arte de mi varita mágica, en campos llenos de amor, pero de amor carnal y desaforado y todos a follar a lo loco. Y decía que hoy me siento más tranquilo y ya me estaba disparando yo solito. Pues empecemos de nuevo, hoy es Viernes y es día 26 de Febrero y el día está precioso y el mar, ya no digamos y bueno, mi karma me dice que debía hacer unas sesiones de meditación y no sé para qué...pero si mi karma me lo dice será por algo.

Y yo sigo empeñado en ejercitar mi alma junto a mi cuerpo y si quiero un relax para mi alma, también lo quiero para mi cuerpo y por eso mi ideal sería irme unos días a un preciso, bonito y entrañable Balneario. Y tengo muchos en mi lista, pero como tengo tantos yo pondré unas condiciones mínimas y esas son: primera, que sea decadente y antiguo, que tenga techos muy altos y que conserve ese aire colonial venido a menos. Segunda, que el agua transcurra cristalina y pura. Tercera, que tenga un amplio y precioso jardín en sus alrededores y para así, ejercitar mejor mi meditación profunda. Y cuarta y la más importante, que el Balneario esté lleno de tías en pelotas y claro, que todas me miren y que estén locas por mí. Y ya veis que en realidad ¡no pido tantas cosas!.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...