La verdad es que no me preocupa en demasía lo que digan de mi.
Aunque también es verdad que antes me preocupaba bastante,
pero el paso del tiempo cambia las cosas
y a veces invierte la importancia que le das a cada cosa
y ahora el orden importa menos
y las hogueras de las vanidades las enciendes más veces
y porque de cada vez quieres aligerar más tu equipaje
y porque hay cosas que sobran
y en cambio antes eran imprescindibles
Pero para este corto viaje que se llama, vida
no hacen falta demasiadas alforjas
y con lo puesto y con cuatro mudas más
vas ligero como el viento y puedes aterrizar donde quieras.
Y el único problema que tiene todo esto
es que el viajar no es como antes,
está más masificado
y la masa destroza todo lo que toca
y porque son un millón de manos haciendo y tocando lo mismo
y eso desgasta las piedras, las rocas, los arenales,
los desiertos, los mares, los ríos,
los ochomiles y hasta al Everest lo están convirtiendo en un basurero.