Para olas...¡las mías!.
No soy aburrido
No soy aburrido
pero tampoco soy el tío más divertido.
Tengo mis momentos
y disfruto de mis bellos atardeceres...
que por supuesto
siempre tendré que agradecer.
A veces tengo la dicha
y la risa floja,
y en otras me contengo con una sonrisa maliciosa.
Me gusta sonreír ante mi propia desdicha,
(en la ajena...ahora no me meto)
pero en la mía
soy mi propio dueño
y es mi dicha sonreír ante tanto infortunio
y hay veces que hasta me digo
¡que pena me doy!
mientras vuelvo a sonreír con la sorna que me caracteriza...
porque en realidad
ni me doy pena
ni tengo miedo
y me importa una mierda
que muy pocos me quieran.
Anne Carson (Blog "Glup 2.0")
Anne Carson
XIII. ES UN MONOTIPO DE DEGAS EN EL CUAL SE VE UNA CABEZA DE MUJER VISTA DESDE ATRÁS TITULADO EL PENDIENTE AZABACHE
Información privilegiada.
Él la buscó. Él la buscó en todas partes. Por la desnudez
de su imaginación. En el dolor. En las trincheras. Como los venados destellan lejos en un bosque al final
del invierno.
Él supo que destruiría a los venados.
Él la buscó en su virginidad en toda ella (raída y fugada) de arriba abajo
en los pequeños telares y el verde blanquecino y el temblor.
Él la buscó en la cinta de su misal.
En el olor negro desteñido de su raso.
En la puntualidad.
Él la buscó en la palabra amante pero no estaba allí, él debería
haberse guarecido en ese umbral desde el comienzo pero ahora
ya era de noche.
Él hizo que la noche la buscara también.
Noche posible, noche imposible, estacas, hilos, hilándola a su propia
imitación de
él.
La mano de él barriendo una marca en su cara era la cara de ella.
Titubear,
oh titubear.
Anne Carson
Gabriela Mistral
Yo no tengo soledad
Es la noche desamparo
de las sierras hasta el mar.
Pero yo, la que te mece,
¡yo no tengo soledad!
-
Es el cielo desamparo
si la luna cae al mar.
Pero yo, la que te estrecha,
¡yo no tengo soledad!
-
Es el mundo desamparo
y la carne triste va.
Pero yo, la que te oprime,
¡yo no tengo soledad!
Loco me tienes
Loco me tienes
y me tienes loco.
Me tienes loco de atar,
loco de ir tras tus huellas,
loco de quererte con esa locura sin razonar,
de amarte en el más profundo silencio,
de besarte en la almohada una vez más,
loco de perseguir tus sombras, con voracidad,
y sobre todo,
loco por querer olvidarte...
de querer olvidarte
porque me tienes loco de atar,
y cada idea loca... es una tragedia más
y el olor de tus cabellos,
es miel de azahar,
y el sabor de tus labios,
es una herida sin cerrar,
y todo es una mentira y es un plagio,
en fin, todo es un beso a la nada
y ni siquiera el aire me comprende,
pues loco estoy en ésta burbuja donde ya no queda ni el aire.
TE INFORMO
Te informo:
mis labios están sellados,
mis dedos son de acero fundido,
mi alma está deforme y dolorida
y mi cuerpo con fiebre, ¡te reclama!.
Son días otoñales,
son días de agua y viento,
son días de recuerdos bajo sábanas,
son días de profusos sudores,
de inciertos temblores,
y de sentimientos
que se han colado por la puerta de atrás.
"el que no se consuela, es porque no quiere"...
Estaba pensando que de tanto pensar me está cayendo el pelo. Y no es verdad porque caer ya no me cae, porque la nada adorna lo que fue en mis jóvenes tiempos, mi cuero cabelludo. La nada o la casi nada de pelo, que no de pensamientos. El pelo no tiene sus raíces en el pensamiento, el pelo va por libre y sus raíces arraigan y crecen en la capa freática y entre el hueso duro y el hueso esponjoso. Y es que sin pelo también eres persona y es que sin pelo no es que pienses más, pero si que tus visiones se hacen más claras y clarividentes. Y como dijo el otro: "el que no se consuela, es porque no quiere"...
CHARLES BUKOWSKI
No soy Shakespeare
pero puede ser que algún día ya no escriba más,
abstractos o de los otros.
Siempre habrá dinero y putas y borrachos
hasta que caiga la última bomba,
pero como dijo Dios,
cruzándose de piernas:
veo que he creado muchos poetas pero no mucha poesía.
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Yo, si viviera en otra tribu
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