¡HE DECIDIDO DEJAR DE SUFRIR!

 

Las cosas no pasan porque sí o porque a ti te apetezca que pasen así o asado. Las cosas tienen

su propia autonomía, como tú tienes la tuya o así debía de ser. Tú decides en lo tuyo, aunque

a veces te lo ponen cuesta arriba y te capan y por eso en esas veces, te quedas bailando en

el espeso hilo de las indecisiones...Pero en general pongamos que uno tiene el poder de

tomar sus propias decisiones (en plan genérico...como los medicamentos). Y uno las va

tomando poco a poco o dando pasos de gigante y no importa el como e importa el qué, es

decir, al final las tomas y en cuanto las tomas, piensas... pues allá las consecuencias y sin

más, te lanzas por ese precipicio. De alguna forma hay un momento en que hay que tirarse

sin contemplaciones y en ese mismo instante, es cuando empiezas a comprender que hay una

parte en tus decisiones donde vas a ciegas y "a verlas venir". Algunos lo llaman, riesgo y el

riesgo tiene esa parte de absurdo y como muestra un botón. Hoy, he decidido dejar de sufrir.

Y suena que te cagas...¡joder! que bien suena, ¡he decidido dejar de sufrir!. Y bueno faltan

las dosis de optimismo que siempre hay que poner en el candelero, por ejemplo... lo voy a

conseguir y pase lo que pase...y aunque decaiga me voy a levantar de nuevo...y ésta vez no

me voy a rendir nunca más y bla, bla, blá...

He decidido dejar de sufrir y no sé hable más y pin, pan, pung... fuego. Pues en esa decisión

hay mucha bala de fogueo, hay mucho voluntarismo y demasiado deseo. Deseo dejar de

sufrir y ¿a qué no es lo mismo?. No es lo mismo decidir que desear. Para pasar de desear a

decidir,

hay que dar todo un salto cualitativo y ese salto lo marca la toma de tu decisión. Y no es

quiero dejar de sufrir, sino que es... he decidido dejar de sufrir. Entre el quiero y el puedo

hay todo un mundo que no siempre es un mundo feliz. Más bien será lo contrario, será un

mundo árido, será un mundo agresivo y lesivo, será un mundo de ardor y lucha, un mundo de

mucho sudor y esfuerzo y un mundo que para llegar a tu decisión final, primero habrá que

tirarse por el precipicio en él que tú sólo te has metido. La actitud marca ese salto y esa

actitud debe de ser la de un suicida figuradamente hablando, claro.

También como motivación valen otras frases, por ejemplo, sino dejo de sufrir me corto los

huevos y después, me los como. Frases que algunos los acojona y que a otros nos estimula

(yo admito ser masoquista, además de otras cosas). Pero bueno, que cada uno cuide de sus

estímulos personales y sino los tiene o no los encuentra, que se dedique a la jardinería. Dicen

que las plantas segregan sustancias que te ayudan a superar la depresión. Leí por ahí y no sé

donde y además que tampoco me parece muy importante saber donde lo leí. Bueno, pues leí

que son bacterias que germinan y sueltan las flores. Yo me quedo con lo de las sustancias.

que me parece más sano y más científico y menos guarro que las putas bacterias con sus

asquerosas supuraciones. Yo esto me lo aplico a mi mismo y tengo el patio y la terraza a

tope de plantas y flores. Y lo tenía antes de que empezaran con las teorías de las sustancias

antidepresivas que tienen las plantas. Deben llevar incorporado prozac en el estigma y en el

polen...Y eso sí y aviso a navegantes, no se esnifa, ni se fuma...ni se mete en vena...sólo se

respira y sin ningún esfuerzo extra.




LA EXTRAPOLACIÓN DE LAS COSAS



No me corresponde a mi ser juez y parte del jurado y porque me niego a ello y en tal caso les corresponde a los demás juzgarme, pero eso sí, sin pasarse ni un pelo. Yo sé que soy un crédulo romántico que casi todo se lo cree y sobre todo, que soy un humanista empedernido y a veces, un poco fantasma y porque me encanta el lado grande o más exageradoamente grande de la vida. Yo distorsiono la realidad y si tengo que pedir perdón por ello, pues lo pido, pero tenéis que entender que se me va la mano con éste asunto y si delante tengo algo insustancial voy yo y lo transformo en algo pasional y sanguíneo y porque de primeras pienso  y en eso no puedo reprimirme...que no merecerá la pena. Es algo natural y normal en mi persona (lo cual no quiere decir que esté bien o que esté mal lo que hago). Por eso cuando 
cuento alguna cosa mi narración tiende a la extrapolación de los hechos y porque es una forma de darles más sabor y una cuanta demás de vida extraordinaria. 

No pretendáis objetividad en mis descripciones, porque soy totalmente lo contrario, soy como dicen algunos, demasiado subjetivo y pasional y por esa razón tiendo a deformar tanto las cosas. Y quién me conoce un poco sabe que lo hago a la mínima oportunidad y bueno, hay quién se lo toma a bien y me deja seguir libremente la narración de mi cuento o historia y hay, quién se toma al revés y se siente con el deber de corregir mis continuas exageraciones casi infantiles y venga a tener matizar lo que digo: "tampoco es para tanto y ¡joder! no seas tan exagerado y de una puta vez cuenta bien las cosas".

Pues yo creo que las cosas siempre las conté muy bien, muy a mi manera (eso sí), pero que cuando las cuento, todo dios se da por enterado que en el guión va incorporada una buena dosis de exageración, porque yo no lo disimulo, ni intento que parezca verdad lo que digo, simplemente lo digo y que cada uno recoja lo que quiera y pueda. Los hechos objetivos no siempre mandan y a veces es mejor tener una visión más personal y más visceral de las cosas, ya digo que no siempre, pero yo lo que intento decir hoy aquí, es que por eso no acepto la narración absolutista de los hechos medidos y controlados con su estricto realismo. Deformar la realidad es uno de los mayores placeres que tiene la vida y si sabes añadirle un poco más de magia 
a las narraciones, con otro poco de fina ironía y si además, sabes jugar con las palabras adecuadas, entoncesy sólo entonces tienes en tus manos el maravilloso poder de una fórmula mágica.

Pero que conste en acta, que yo soy más partidario de las descripciones deformadas y subjetivas o como mucho, apoyo las dos formas, la objetiva y la subjetiva y de esa combinación, es de donde debe salir la interpretación de las cosas o hechos. Y mirar lo que os digo: "ojalá tuviera más magia para describir las cosas y más pasión exagerada"...Pero bueno, tengo lo que tengo y a quién no lo guste mi forma de ser y de estar por la vida, ya sabe lo que puede hacer...

LOS NEUTROS

 

Y ya que estamos aquí y aquí con lo puesto...pues hagamos balance del día: ¿fue positivo, fue negativo, fue una mierda de día o fue maravilloso?. Pues en principio fue y con eso lo digo todo, fue y pudo ser mejor o peor, pero ante todo no fue un día neutral. Porque los días neutrales no existen, solo parecen que son neutrales pero en realidad están cargados de tinta negativa que
 a veces resulta ser explosiva y pasado el tiempo, te acabarás dando cuenta de ello. 

Es que la neutralidad no existe y por mucho que enseñes una bandera blanca. Es decir, 
puedes dar el pego de pacifista neutral que nunca se moja ante nada, como los suizos que presumen de su neutralidad esperpéntica, pero no es una neutralidad verdadera y porque sino como se explica que allí puedan actuar los Bancos más ladrones de la tierra y del universo. Bueno, junto a  los llamados paraísos fiscales, que por desgracia, ahora están tan de modaentre los que poseen la pasta.

Por tanto, no presumamos con tanto descaro de la neutralidad. Y en la vida pasa lo mismo, en nada o en casi nada se puede se neutral. Es que ni los dioses son neutrales, porque siempre barren para casa o mejor dicho, para su casa o para sus templos que le han construido con tanta fe sus aduladores o lameculos. No existen los espíritus puros que no se mojan jamás. O 
si existen, pero que me da igual su existencia y porque a ellos les da igual que yo exista (tema de correspondencia). Y yo entiendo que a veces hay que saber flotar, porque no siempre tenemos las cosas tan claras, pero lo que también digo y afirmo, es que no se puede hacer filosofía de la mezquindad del mediocre y hacer de los neutros o de los que dicen que van de neutros unos héroes sin sentido o por decirlo de otra forma, hacerlos unos santurrones.

Un neutro es un flojo y un cobarde. No se atreve a decir que sí o a decir que no, porque él siempre quiere quedar bien o como un señor que reparte bendiciones... Hay mucha prepotencia en los neutros. Hay mucha prepotencia y hay mucho desprecio. Odian la pasión de la entrega desmedida. No soportan los sentimientos pasionales y viscerales. No quieren salpicarse de sangre inocente o no tan inocente y porque les da igual la inocencia que tenga cada uno. Odian la inmensa pasión de la sangre y del latido extraordinario que se superpone al latido normal. 

MASCOTAS


 


¡Buenos días! y lo de buenos. Esto es por decir algo...Hoy ardo entre mares de fiebres y tubos de analgésicos y me sube y me tomo uno y después, me baja y me vuelve a subir y me tomo otro y esperando que sea el definitivo y así vamos caminando por 
la senda de las fiebres de origen desconocido, que voy descartando a groso modo y porque no nos queda otro remedio.

Porque en medicina y en otros muchos temas (que ahora no corresponde tocar) el tema vírico es un saco sin fondo y en donde cabe de todo y más. Y como decía el 
otro ¡qué más da!...si al final te tienes que atiborrar de analgésicos y antiinflamatorios y hasta que el virus o lo que sea, le salga de sus pelotas salir de tu
 cuerpo y buscando otro huésped vecino. Hay que pensar que estos bichos viven de eso, de ir parasitando cuerpos humanos y se fortalecen chupando tus defensas y destrozando tus barreras inmunológicas y por eso de cada vez, se hacen más grandes y más agresivos. Y hasta hay algunos que de grandes que se hacen, coge su dueño y les acaba convirtiendo en mascotas.

Si al final, vamos a aterrizar en el tema de las mascotas, que en realidad me impor-
ta una mierda éste tema, pero ya sabéis que yo solo lo hago por dar el coñazo a los que pregonan que no hay amor más fiel que el de una mascota y ahí sí que entro y además, disparo. Vamos a ver, que a uno le guste su puto perro, gato o culebra,
 tiene su pase, porque es su puto problema y que casi se enamore de él, también lo es...pero otro tema es hacer apología del amor hacia las mascotas y comparándolo con otros tipos de amor humano (como el amor entre dos personas o hacia tus hijos) y como si eso fuera posible de comparar...Bueno, para estos señores amantes de sus
 mascotas, eso es totalmente posible, pero lo es porque no tienen las santas narices 
de reconocer que han fracasado con las relaciones humanas y a modo de puto consuelo, se buscan el amor hacia sus perros, gatos o boas constrictor.

Claro que...que no todos los que tienen mascotas lo hacen, porque hay algunos que 
ni te enteras que tienen un perro o un gato. En realidad y ya lo dije antes, a mi me 
da igual, pero lo que no soporto es que me hablen y me pregonen que no hay amor más puro que el que se tiene hacia una mascota o al revés. No sé...a veces pienso que dentro de su concepto del amor va englobada la fidelidad del esclavo y te hacen o 
eso intentan, que confundas  y mezcles el amor con fidelidad, obediencia ciega y por supuesto, con un intenso tufillo a sentirse propietario de alguien.

SUEÑO

 


Yo sueño y por eso ahora sé... 

que estoy despierto y no estoy dormido.


Yo sueño entre dulces sueños,

yo sueño dormido, 

sueño despierto,

sueño en cada momento de mi vida,

sueño en cada minuto, 

en cada segundo,

en cada flor que germina

y en cada idea que me ilumina.



Y es que sin sueños ¿yo qué sería?

quizás una calabaza vacía y deshuesada,

quizás arena del desierto  volatizada,

o quizás sería simplemente YO

un YO en medio de un mar de sueños,

sería un sueño dentro de un humilde sueño

y a su vez, 

sería un sueño dentro de otro gran sueño.

IDIOTA


La rebelión de los idiotas,
es la que ronda dentro de mi cabeza de idiota.

Empezando porque yo,
soy el más idiota de todos los idiotas,
y he tardado demasiado tiempo,
en enterarme de que soy un idiota consumado.

Esto lo digo como aperitivo,
pues si tiro del hilo,
iría a juicio por ser el más idiota que he conocido.

Un idiota sin remedio
es como yo me siento,
y es que a veces,
me pueden las ganas,
y lucho y lucho como un condenado,
y cuando me paro durante un rato,
resulta y compruebo, 
que no me he movido del sitio.

Y todo esto, es porque no me entero,
creo que sí y me convenzo de ello,
me marco fechas y objetivos,
me juro y perjuro su estricto cumplimiento,
y hasta le ruego a dios (si hace falta) que me ayude,
y le imploro y le lloro,
 y al final... ¿para qué?,
¿para qué?...si yo no tengo remedio,
y mi epitafio siempre acabará de la misma forma 
soy un idiota comprobando que soy un idiota sin remedio.

Sé que es fácil decirlo,
y que lo más difícil es asumirlo.
Ah! ahora... otra cosa me queda en el tintero,
y tengo el deber de tener que elegir 
entre asumir que soy un idiota y de una vez por todas
o será mejor que me retire al monasterio de la orden de los idiotas.

Por mi parte, 
voy sintiendo y notando
la sensación que da el ser un idiota,
y siento como me duele en las tripas,
y como esa idea se retuerce dentro de mi cerebro,
pero es mejor así,
más vale ser un idiota sin remedio,
que un idiota deprimido.

¡QUÉ NO ME AGUANTO MÁS!


En mi agujero tengo de todo y en gran cantidad.

Hay adoquines que un día arranqué 

con toda mi rabia incomprendida, 

del puto suelo de cualquier pueblo o ciudad.

Hay un cartel de una película

robado en una noche de bochornosa borrachera

que ni siquiera sé como coño lo robé. 

Hay cicatrices que se hicieron grietas y agujeros húmedos

donde me supongo que habitan 

los habitantes de mi soledad.

Hay preciosos cuadros que un día colgué

y con el propósito de mejorar mi visión del mundo

aunque tampoco hay tantos,

con 2 o 3 a mí me llegan,

pero a decir verdad,

en poco ha mejorado mi visión del mundo.

Hay muchas tardes de leña en mi chimenea,

hay demasiados monólogos que acabaron en discusiones

y es que a veces, no me soporto ni yo mismo,

intento estar en ese equilibrio que nos hace a la vez

 ser más tontos, más aburridos y más predecibles

y hablar cuando hay que hablar

y al mismo tiempo intento soñar como un poseído

pero al final busco ser oveja obediente y equilibrada...

y lo siento... pero lo tengo que decir

hay veces... ¡que no me aguanto más!

NUNCA...


 

Jorge Novak Stojsic Sarac


 Huele a fresca

la mañana


amaneció desperezándose


de mentas


y de albahacas


y caminaban las manos


ávidas


abiertas


casi gritando


 

así de hermoso era

 




AUTORRETRATO EN TONOS GRISES (BEATRIZ ALICIA GARCÍA)


 
A veces hablo sola,
es decir, conmigo misma.
Los solitarios
tenemos esas mañas,
esos hábitos raros.
A veces, también, grito,
porque no me oyen,
o no me oigo.
Suelo encerrarme
a repetir femeninos rituales
ancestrales
-limpiar la casa, ponerme bella-.
no soy bruja, pero parece
que doy miedo,
soy diestra con la escoba y los cacharos,
sí.
También soy diestra
en decir verdades
en los momentos más inoportunos,
y en perder objetos y personas.
Ya no río mucho, ni lloro
tampoco, en exceso.
Cada vez soy más dada
a la soledad
y a defender mis convicciones
y desvaríos.
(¡Qué broma!).
Finalmente,
no saldré viva de esta historia,
no volveré a tener 20 años,
no volveré a vivir
cada minuto que pasa,
nunca más.
Entonces, ¿para qué complacer a extraños?
Mi efímera belleza aún me conmueve,
mis tontos deseos de amar
y ser amada.


DE NADA Y DE TODO


De nada y de todo,
yo nunca me voy a quedar a medias,
ni me voy a quedar colgado cual telaraña del techo,
en tal caso...en tal caso...
buscaré la osadía de un precipicio,
o la quimera del que vuela alto y a cielo abierto,
yo no busco puntos intermedios
ni busco bamboleos y dudas entre luces y colores,
yo busco la negrura de la vida
y al mismo tiempo
la brillante lucidez del día a día.
Yo me busco y a veces me encuentro,
y otras veces, doy un paso
y me caigo por las escaleras del otro lado
y hasta que toco fondo
y por fin, remonto...
porque siempre remonto,
porque siempre me agarro en el último instante,
yo sobrevivo
pero sobre todo, vivo...

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...