Menuda sopa de letras tengo dentro de mi cabeza.
Me cuesta respirar
dado su oscura y gelatinosa densidad.
Me duele la boca
por tanto farfullar con dificultad
y para hablar y no decir, ná.
Tengo hongos en las uñas de mis dedos
y una idea absurda me entumece y me paraliza...
¡no puedo dejar de pensar en ti!
y dicho esto
vuelvo a mi idea original:
menuda confusión astral
tengo dentro de mi lóbulo frontal.