¡Joder y joder!, ayer fue el día del Padre y solo me enteré yo y me enteré de puta casualidad y porque por la radio vendían algún producto que relacionaban con el día del Padre. De todas formas no penséis que me he quedado todo frustrado y porque esos días tan inventados me los paso por el forro de los c... y ahora, que ese forro lo tengo muy grande y por el crecimiento de mi huevo derecho, me da para pasármelo todo, varias veces...Y no sé de donde se sacó esa manía de que todo tiene que tener su día y fecha y hoy celebramos el día del niño desamparado y mañana será, el día del yonqui desintoxicado.
Y lo malo, es que nos vamos acostumbrando a ello y ya no solo nos tenemos que fijar en que día estamos de fecha y hay que saber la dejadilla que tiene cada día y si nos olvidamos no hay problema, porque para eso están los fabricantes y vendedores y cada día con dejadilla lo transforman en un gran producto de venta. Me recuerda a aquellas camisetas con la efigie del Che Guevara y que en principio solo las hacían y las vendían cuatro pringados que iban de revolucionarios o de casi... y cuando se dieron cuenta los grandes fabricantes de que aquello iba a ser un chollo, empezaron a aparecer camisetas del Che Guevara hasta debajo de las piedras.
Y ya veis, hasta las revoluciones y sus revolucionarios son susceptibles de venderse y de entrar en la gran máquina del consumismo. Y no sé que iba a decir...porque me perdí. Bueno sí hablaba de todo es susceptible de poder venderse y hoy en día, hasta se venden los mejores y más brillantes deseos y las mejores ideas y los mejores momentos y lo que parecía ser un fusil que portaba un revolucionario, se convierte en moneda de cambio y para comprarse otra cosa...
Y lo malo, es que nos vamos acostumbrando a ello y ya no solo nos tenemos que fijar en que día estamos de fecha y hay que saber la dejadilla que tiene cada día y si nos olvidamos no hay problema, porque para eso están los fabricantes y vendedores y cada día con dejadilla lo transforman en un gran producto de venta. Me recuerda a aquellas camisetas con la efigie del Che Guevara y que en principio solo las hacían y las vendían cuatro pringados que iban de revolucionarios o de casi... y cuando se dieron cuenta los grandes fabricantes de que aquello iba a ser un chollo, empezaron a aparecer camisetas del Che Guevara hasta debajo de las piedras.
Y ya veis, hasta las revoluciones y sus revolucionarios son susceptibles de venderse y de entrar en la gran máquina del consumismo. Y no sé que iba a decir...porque me perdí. Bueno sí hablaba de todo es susceptible de poder venderse y hoy en día, hasta se venden los mejores y más brillantes deseos y las mejores ideas y los mejores momentos y lo que parecía ser un fusil que portaba un revolucionario, se convierte en moneda de cambio y para comprarse otra cosa...