Yo soy de querer de querer,
yo quiero, después amo
y al final, vuelvo a querer,
(aunque a veces, ahí empieza el desquerer)
yo quiero al cuadrado
yo amo los límites más lejanos, los bordes más angulados,
las aristas más cortantes,
la Epidermis más descamada y más desgastada que nos envuelve,
lo claro oscuro tirando hacia un lado o hacia el otro,
la ciencia libre y la ocultista que no deja ningunas pista,
yo amo lo más extraño, lo más raro, lo más intrépido y sin ley,
lo más intuitivo y apasionado,
lo más pasional descontrolado,
lo meditado en apenas una décima de segundo,
lo difícil y lo trabajado a toda máquina y a la velocidad del sonido,
pero también amo lo más fácil, lo más sencillo,
lo más simple de simple,
lo más complicado y enrevesado,
la parte más difícil del equilibrio,
lo imposible de ser cumplido,
lo deficitario y lo desechado por exceso de uso,
y es que yo no quiero amores de paja,
que parecen... pero que no son,
que te dicen "te quiero" o "cariño"
en cada minuto y en cada segundo
y cariño por aquí y cariño por allá
y mientras en sus oscuras mentes tejen telarañas de engaños
y planifican las mil maneras que tienen de joderte,
yo prefiero lo cortante y lo seco,
lo duro y lo esculpido a base mucho sudor y mucho callo,
me gusta más la bofetada en plena cara
que la dulzura del cariño envenenado,
yo soy de querer de querer
y no me gustan las medias tintas,
ni las palabras suspendidas en el medio ambiente,
en realidad, yo soy ambidiestro,
soy zurdo cuando necesito la fuerza constante del martillo
y soy diestro, cuando tengo que hilar muy fino
por supuesto y siguiendo en ese mismo hilo,
soy ambidiestro, si ambos hemisferios me lo reclaman al mismo tiempo,
uno me suele pedir que luche a muerte con mi espada
y el otro, que seleccione lo mejor que pueda, a mi enemigo
y en el querer me pasa lo mismo,
uno, selecciona al mejor objetivo
y el otro, me muestra cual es su táctica alucinante,
después vendrán momentos desbordantes,
por último, aparecerán los ríos teñidos de sangre...
porque señores y señoras y sea como sea,
la sangre siempre llega al río...
y eso está y siempre estará demostrado.
yo quiero, después amo
y al final, vuelvo a querer,
(aunque a veces, ahí empieza el desquerer)
yo quiero al cuadrado
yo amo los límites más lejanos, los bordes más angulados,
las aristas más cortantes,
la Epidermis más descamada y más desgastada que nos envuelve,
lo claro oscuro tirando hacia un lado o hacia el otro,
la ciencia libre y la ocultista que no deja ningunas pista,
yo amo lo más extraño, lo más raro, lo más intrépido y sin ley,
lo más intuitivo y apasionado,
lo más pasional descontrolado,
lo meditado en apenas una décima de segundo,
lo difícil y lo trabajado a toda máquina y a la velocidad del sonido,
pero también amo lo más fácil, lo más sencillo,
lo más simple de simple,
lo más complicado y enrevesado,
la parte más difícil del equilibrio,
lo imposible de ser cumplido,
lo deficitario y lo desechado por exceso de uso,
y es que yo no quiero amores de paja,
que parecen... pero que no son,
que te dicen "te quiero" o "cariño"
en cada minuto y en cada segundo
y cariño por aquí y cariño por allá
y mientras en sus oscuras mentes tejen telarañas de engaños
y planifican las mil maneras que tienen de joderte,
yo prefiero lo cortante y lo seco,
lo duro y lo esculpido a base mucho sudor y mucho callo,
me gusta más la bofetada en plena cara
que la dulzura del cariño envenenado,
yo soy de querer de querer
y no me gustan las medias tintas,
ni las palabras suspendidas en el medio ambiente,
en realidad, yo soy ambidiestro,
soy zurdo cuando necesito la fuerza constante del martillo
y soy diestro, cuando tengo que hilar muy fino
por supuesto y siguiendo en ese mismo hilo,
soy ambidiestro, si ambos hemisferios me lo reclaman al mismo tiempo,
uno me suele pedir que luche a muerte con mi espada
y el otro, que seleccione lo mejor que pueda, a mi enemigo
y en el querer me pasa lo mismo,
uno, selecciona al mejor objetivo
y el otro, me muestra cual es su táctica alucinante,
después vendrán momentos desbordantes,
por último, aparecerán los ríos teñidos de sangre...
porque señores y señoras y sea como sea,
la sangre siempre llega al río...
y eso está y siempre estará demostrado.