¡LA SUFRO!

Oí tu nombre,

y claro, no eras tú,

y entonces recordé...

que tú y tu cuerpo están en una esquina escondida de mi Alma,

en el rincón de los olvidos más retorcidos

y cerca del área de la incomprensión,

y ocupabas lugar y sitio, 

ahora en cambio, 

eres un mancha en mi expediente vital, 

ahora me avergüenzo de mi participación en aquél circo, 

se hablaba de amor y de maravillosos viajes,

y que a lo mejor juntos, podríamos conquistar el mundo,

y ¡hola mundo! como dice una compañera de trabajo

y yo diría, hola imbéciles del mundo

y porque para escuchar lo que dice la tía por las redes,

hace falta ser imbéciles

y yo el primero...pero yo no la escucho

pero en cambio... ¡la sufro!.

MI PATIO

                        Día raro donde los haya. Calor a espuertas. Cocido por dentro. Sudando como un cerdo. Mi Cabeza parece una fuente de la que emana el sudor con toda su belleza. Y la guinda del pastel es el fuerte dolor de articulaciones con el que dios me ha regalado en el día de hoy. Cualquier movimiento me duele, pero me duele a conciencia. Y lo peor de todo, es que no tengo motivo, es decir, ayer no me maté a hacer ejercicios, ni cogí la bici, ni jugué al padel, ni hice traslado de cosas pesadas. Estuve buenamente sentado (como casi todos los días) delante del ordenador. Y la única razón que se me ocurre, es que mi cuerpo después de 20 días de vacaciones, se esté quejando por tener que volver a currar. De alguna manera, que yo sé que no podré demostrar, cobra peso éste último argumento. 

                        Y dicen que el dolor es un signo y síntoma de que algo está pasando, que se supone que ese algo no es normal. Claro que mi vejez empieza a ser normal, pero como todo en ésta vida tiene sus días malos y sus días peores y en cambio, los días buenos empiezan a ser escasos. Tengo escasez de días buenos entre otras carencias y en que lo único que se puede hacer, es ir reconvirtiéndolas y adaptándolas al factor edad. Físicamente no es lo mismo, pero hay deportes y ejercicios que se pueden hacer perfectamente en la edad adulta de viejo rechumido. Pero eso sí hay que hacerlos, e insisto con fuerza porque es en lo que fui pecando últimamente. Llevo meses oxidado como una vieja caja de lata y de hojalata. Me chirrían las juntas y me arden las articulaciones.

                       Bueno, también me estuve currando mi casa y de abajo a arriba. Y pintando a todo trapo y arreglando desfeitas (cosas rotas). Desde puertas a paredes y desde paredes a patios...Porque me acabo de hacer un patio precioso y entrañable: todo lleno de flores, pintado con delicada conciencia, con una sombra que te cagas, con una mesa y sillas preciosas (que no caras, pues son de segunda mano) y además por ese patio, corre el aire y la brisa marina y el viento...y sino es el Palacio Real, pues se le parece...

¡SILENCIO!

Eso quería Yo,

el puto silencio

y de nuevo y de nuevo... 

reivindicando el silencio,

 mirar, yo sólo quiero escribir

y poner lo que me plazca

y para eso me he inventado un Blog,

bueno ¿inventado?

(pero ya me entendéis...todo es relativo),

un blog que guste o no guste, es mío,

por tanto, pondré lo que vaya saliendo

y si hay algo que no le gusta a una determinada persona,

perdone señora,

hay otros blogs, hay libros, hay películas,

hay teatro, hay óperas,

hay mucha gente que escribe sobre la bondad del amor

y hasta recrea fotonovelas de tonos pastel,

ya está bien de inmiscuirse en terreno ajeno,

usted cuando me vea siga hacia delante,

haga como sino me hubiera visto,

hay mucho mundo de dios fuera del mío.

por ejemplo el suyo,

un consejo, cultivelo y cuídelo

y sino quiere hacerlo es su puto problema,

pero que le iba a decir,

que nunca más cuente conmigo

y por no entrar en terrenos más pantanosos,

vuelvo a pedir... 

¡silencio!

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...