LOS RECUERDOS (Poema)

Agua de Menorca. Más o menos como yo soy por dentro.
Las tripas se me revuelven,
y emiten sonidos huecos,
y hasta la bilis sale por mi ombligo,
es la mía una mala digestión,
o una digestión dificultosa,
es como si tuviera un burro dentro de mi barriga,
y me oprime tanto y tanto me oprime,
que no puedo ni tragar la saliva.

Y son los recuerdos los que me abruman,
los que se agolpan sin orden ni mesura,
y se revuelven y me producen retortijones,
y ¡que cólicos!, y ¡qué dolor visceral!,
y es tan fuerte el dolor,
que hasta la médula ósea nota su punzada,
y es que me trepanan con un berbiquí,
y parece que me sierran la cabeza,
o que me sacan los ojos de las cuencas,
y es eso, un dolor previo a la muerte,
un dolor que me vuelve loco,
y yo pasando de puntillas sobre la vida,
como una bailarina sin zapatillas,
o realmente estoy loco o yo me muero,
y me muero ahora ya y en éste preciso momento.

Los recuerdos, los recuerdos son mis aliados,
son mis amigos, son mi pareja de hecho,
ellos son los que me amamantan,
y me dan el sustento,
ellos son mis pilas ya olvidadas,
y ahora me recargan de energía,
y ellos son los que me están dando la vida,
¡ahora y para siempre!.

SECUÉSTRAME (Poema, que me dá la pena)

Secuéstrame,
secuéstrame y llévame contigo,
amordázame y átame,
y méteme en el maletero de tú coche,
y si grito no me hagas ni caso,
es el dolor, por lo que he dejado,
si, atrás he dejado asuntos importantes,
 he dejado sentimientos puros y vivos,
he dejado la cama desehecha,
y la cocina, como siempre, a medias,
y muchas sensaciones rotas,
sensaciones en añicos,
y el lavavajillas en funcionamiento,
y todo se mezcla en la batidora,
la misma que tengo dentro de mi cabeza.

Secuéstrame y átame fuerte,
no dejes ni un resquicio,
y hazme el nudo de la muerte,
ese que se pone en el cuello,
y cuanto más te mueves más se aprieta,
y si yo sigo, es quiero morir,
pues morir es libre y optativo,
y a lo mejor es lo que quiero,
morir antes que vivir dentro de un maletero.

UN GRITO (Poema gritón)

Un grito en el silencio,
un grito desgarrado,
un grito de parto,
un aullido de fiera,
y ese es, por fin,
 es mi grito de guerra.

Un grito de dolor,
un grito de pérdida,
un grito de aviso,
un grito de miedo y de pánico,
un grito que grita,
y grita hasta romper con el silencio.

Un grito que me la risa,
o grito tanto, que lloro,
o grito hasta que mi mandíbula se bloquea,
y mi cara se desencaja,
y mi grito se transforma en alarido,
un alarido de un tío que grita,
y que gritó tanto,
que un día dejó,
y de una vez y para siempre,
dejó de gritar tanto.

MIS FANTASMAS (Poema de un sueño)

Sueño con fantasmas,
fantasmas de alas angelicales,
con túnica negra y ojos de fuego,
con piel fina y de purpurina,
y son mis fantasmas de mis sueños,
o son ellos los que sueñan conmigo,
lo que sé, es que ellos se me aparecen,
y me desopiertan todos los días.

Sueño con fantasmas de fantasía,
flotan con las corrientes de aire,
y se deslizan por las esquinas,
y si me doy la vuelta en la cama,
de repente desaparecen,
es como si yo les asustara,
y mis movimientos, los ahuyentara,
pero una vez acomodado,
ellos, mis fantasmas, vuelven,
siempre vuelven,
o a lo mejor, es que nunca se han ido.

Vuelven porque quieren,
o vuelven porque yo los reclamo,
y será mi inconsciente el que los llama,
o es que mi deseo se lee facilmente,
el caso es que en cada noche,
tengo su extraña compañía,
son mis fantasmas del alma querida.

CABALGANDO (Autoretrato)

Que bien me siento cabalgando de nuevo por mis fueros y por mis territorios infinitos. Me refiero al escribir, pero no por el hecho sólo de escribr, que también, me refiero a mi estado del ánimo, que es que me permite escribir de ésta manera. Mi estado del ánimo ha vuelto y ha tatdado dos largos días y como siempre llegué a pensar que no lo volvía a ver, que simplemente se había marchado a buscar a otra alma cándida. Para mí el estado del ánimo es el alma o por lo menos el alma es la que determina ese estado. Y no reivindico un estado de bulerías, me dá igual si estoy en ebullición festeira como si me arrastro por el suelo, pero el caso que el ánimo esté conmigo, el ánimo de querer escribir, contar, narrar, decir, hablar, sentir y sobre todo disfrutar de todo lo que hago. Hombre, está claro que si voy arrastrándome, quizá no disfrute tanto, pero no es verdad, pues a veces disfruto arrastrándome por el suelo y eso sólo depende de mi estado del ánimo el que yo disfrute.

                         El ánimo es caprichoso y por mucho que uno lo desee no se va a presentar, el ánimo aparece y desaparece, y entra y sale cuando lo dá la real gana. Es libre y claro, pues cuando se va, lo notas y cuando vuelve, es que te vuelves del revés. Yo relaciono y mucho, el ánimo con la claridad, y no digo la claridad del día, sino la claridad de mis pensamientos, si yo estoy espeso, eso me indica que el ánimo no está conmigo.

                         De todas formas el día es más largo de lo que parece y hay días en que te levantas espeso y conforme pasan las horas te despejas de esas nubes tormentosas. Incluso pasa que, cuando estás a punto de irte al sobre, ¡zas!, viene y entonces te vuelves loco, ya no quieres sobar, sólo quieres pensar y escribir y volver a pensar y escribir y que la noche se estire como un chicle. Ahora tengo esa paz interior que sólo se tiene cuando estás conforme contigo mismo, debe ser el karma o ese estado entre el ying y el yang o el aura que se tiene justo antes de ponerte a convulsionar y es verdad, ahora ya estoy convulsionando.

HE SIDO YO (Poema)

He sido yo, dice un mensaje,
he sido yo ¿de qué?,
que he hecho, para ser reconocido,
una mísera firma y ya está,
y ya me puedo ir contento.

Pues no sé que decir,
que a veces no haces casi nada ,
y va y te felicitan,
y otras veces, te dejas la piel,
y que te vayan dando por el culo,
¿quién sabe como funcionamos?.

Los humanos somos contradicción pura,
nos dan y nos quejamos,
nos quitan y lo agradecemos,
nos insultan y agachamos la cabeza,
nos pisan y nos morimos de la risa,
así somos los humanos,
somo la esencia de lo impredecible.

Y nos gusta ser como somos,
nos gusta reir cuando debíamos llorar,
nos gusta gritar en un silencio sepuscral,
nos gusta lo más difícil de conquistar,
lo que no se ve y no tiene cuerpo,
lo intangible, lo etéreo,
y por eso nos gustan tanto, los sentimientos.

A mi me gustan las cosas,
me gustan las personas sinceras,
y las que irradian,
 y las que rien porque tienen ganas,
o lloran o cantan o sufren o padecen,
pero lo hacen porque así lo sienten,
y también me gustan los objetos que nos rodean,
los animados y los inanimados,
y los rios y los puentes,
y los mares y los barcos,
y el viento y la luna y las montañas,
a mi me gusta todo eso,
y lo digo y lo reivindico,
y lo expreso y lo siento,
y lo grito con todas mis fuerzas,
y mejor, si es al borde de una acantilado,
y con el mar embravecido,
y con el viento desatado,
y cerca tener un faro que me ilumine,
y que me indique que camino seguir.
Soy humano, y lo digo, tal como lo siento.

OS JURO (Poema vitalista)

Descansa en paz, dice mi epitafio,
y sientelo todo, dice mi manual ideológico,
y yo digo, que mientras viva,
no quedará nada sin que yo lo intente,
nada escapará a mi radar vital,
y juro por mis muertos,
que a todo le daré la vuelta.

Siempre quedará algo,
algo que no pude alcanzar,
algo que se me escapó entre mis manos,
y que se fué como un pez entre los dedos,
pero eso lo dejo como irremediable,
pues no soy dios en la tierra,
soy un ser humano como cualquiera,
y por tanto asumo mis limitaciones.

Soy raro y soy extraño,
pero soy un ser humano,
tengo mi parte buena y otra parte mala,
tengo mis pecados inconfesables,
y mis secretos de alcoba,
tengo penas y momentos de gloria,
y a veces me quiero y en otras me odio,
y soy hombre de una sóla palabra,
y es que cuando juro, juro sobre la biblia,
y esa es mi palabra más sincera,
yo juro y cuando juro, cumplo.

Por eso ahora os juro,
os juro, que seguiré por éste camino,
que no quedará piedra sobre piedra,
que revolveré todo lo que veo,
y que al final, cumpliré mi epitafio:
Descansa en paz, querido Bruno,
que tú juramento de sobra lo has cumplido.

"EL QUE CALLA, OTORGA" (Disiento en parte)

"El que calla, otorga". Bueno tampoco es así, es verdad que muchas veces uno calla por cobardía o por miedo, pero en otras uno se calla por cuatela o porque simplemente se lo está pensando y no quiere precipitarse en tomar una decisión de la que más adelante pueda arrepentirse. O también y es tan respetable como el resto de las opciones, el que uno se calle porque le sale de los cojones. A unos les sale de sus adentros nunca callarse ante nada y a otros les puede salir el silencio mudo. Esto viene a cuento, porque ultimamente estoy observando la moda de los dedos acusadores o sea de esos carteles o pintadas que te señalan con el dedo y te llaman cobarde a la cara o sea te señalan como partícipe y culpable de todo lo que está pasando.

                                  Y ya sé que debajo de ese dedo que te señala, aclaran que el verdadero culpable es el gobierno del PP, pero también es verdad que el dedo te señala a tí y por tanto eres parte de esa culpabilidad, por lo menos lo eres para quienes hicieron el cartel o la pintada. Pues señores yo no estoy de acuerdo, pues aunque yo pasara de todo, cosa que no hago, yo no me siento culpable. Éstos señores son los mismos que día tras día nos inundan con problemas, que ellos no los crean, existen, claro que existen, pero a lo que voy yo, es a donde quieren llegar. A lo mejor ellos sobreviven perfectamente rodeados de problemas y se sumerjen en los problemas a todas las horas y en todos los días y se han adaptado a vivr bajo el agua y respiran por sus agallas. Pero a lo mejor muchos de los demás mortales aún no tiene las agallas tan desarrolladas y necesitan salir a la superficie a coger aire vital. Es decir, por lo menos a mi lo que me pasa, es que puedo asumir unos cuantos problemas, pero de vez en cuando necesito airearme, pues yo no sobrevivo todo el día en medio hostil. Y para mí medio hostil es estar sumerjido en un mar de problemas.

                            No se trata por tanto, de bombardear todos los días con uno o varios problemas y si no quieres caldo, pues toma dos tazas y si no me apoyas, pues eres un cobarde de mierda. Es el problema de los que luchan pensando que están haciendo un gran favor al mundo, cuando en realidad, están luchando día y noche porque ellos quieren, nadie les obliga a ello. Si a uno de ellos, tú le preguntas que tal le va, te contestará que bien, que sigue luchando. Como si los demás no lucháramos y fuerámos una panda de aburguesados. La lucha para éstas personas es un medio y una forma de vivir y se valora todo bajo esa perspectiva, estoy bien porque lucho o estoy mal porque no lucho. Pues yo estoy bien y sólo lucho a veces, eso lo digo yo y a lo mejor tengo que luchar más o menos, quién sabe, pero tengo otros parámetros en mi vida que son tan válidos como luchar. Aparte que lo de luchar se queda en un campo, en la lucha social, de reuniones y manifestaciones y ¿las demás luchas?, que les pasa.

                               Es tan válida cualquiera de las posturas que he mencionado anteriormente, y si no lo es, tampoco es motivo de reproche. O sea que lo que yo critico, es que haya dedos acusadores, tanto en carteles, pintadas o dedos ideológicos incrustados en los cerebros de algunos. No se trata de restar, sino de sumar y para sumar hay que saber respetar a los demás. Ya llega con el dedo acusador del gobierno de turno, pues nosotros somos los culpables de la crisis, porque hemos gastado mucho y compramos televisores de plasma y demás películas. Puede y creo que hay parte de razón, pero lo que aseguro es que los principales culpables no hemos sido nosotros, han sido ellos, el Gobierno y su sistema económico.

EL QUÉ Y EL COMO (Filosofía barriobajera)

Hoy tengo que subirme a la cúpula del cielo y darle una mano de pintura. Está sin brillo, desgastado y apagado, más o menos como estoy yo, aunque me cueste reconocerlo. No sé pero lo que pasa alrededor de mí, es como si ya no me importara, o a lo mejor no soy yo, y es lo de alrededor las que perdieron su brillo. Puede que sea cualquiera de las dos cosas o las dos a la vez, pero el resultado es el mismo, mi espesura mental.

                           Entonces lo que importa es el resultado final y no como se ha producido, el qué, puede sobre el como. Esto viene que el otro día leí una frase lapidaria, que venía a decir: "lo importante no es el qué, lo importante es el como". pues mira por donde me está pasando lo contrario y en mi caso lo importante es el Qué y no el como. Claro que es el peligro de todas las frases lapidarias, que sólo recalcan lo que les interesa en ese momento y no por ello dejan de tener su gran parte de verdad o sea son una verdad relativa. Pues dependen como te pillen, en que momento y en que circunstancias, y te verás identificado con una de ellas o con ninguna o con lo contrario de lo que transmiten.

                          El qué y el como, el objetivo y los medios para llegar a él, distintos denominaciones para la misma cosa, la vieja lucha entre algo que persigues y lo que tienes que hacer para conseguirlo. Y es verdad que en la sociedad en la que vivimos, el qué o el objetivo, están por encima de los medios, es decir, lo que predomina es el objetivo y los medios se ponen en función de conseguir el objetivo. Y éste principio filosófico ha creado una ideología que permite el uso de cualquier medio para conseguir el fin. Y lo malo es cuando los medios se contradicen con la filosofía vital de tú objetivo.

                         Para concretar con un ejemplo, si tú fin es conseguir una sociedad mejor y en donde participe más el pueblo, pues te planteas usar los medios que hoy existen, que no son otros que los votos y la participación en el parlamento o sea usas los medios actuales para intentar llegar a alguna parcela del poder y desde allí cambiar las tornas. Lo malo es que estás acepatando previamente unas reglas de juego con las que estás en contra, por lo menos parcialmente. Además que después pasas por el filtro del poder y eso sí que es contradictorio, ¿a cuantos se le olvidan sus progamas electorales?. por tanto en éste ejemplo los medios determinan el fin, los medios hacen cambiar la ideología y entonces el como marca claramente al qué y al final el qué acaba desapareciendo.

                        Supongo que todo se arreglaría aumentando el poder del pueblo sobre los elegidos y el que incumpla su programa directamente a la trena. Y a lo mejor habría que judializar a los candidatos y a sus programas electorales y así mataríamos dos pájaros de un sólo tiro: dejarían de mentirnos con sus programas de estafas y falsas promesas e iríamos llenando las cárceles de chorizos políticos y lo más importante antes de que metieran la mano en los dineros públicos. Y ahí queda una idea o propuesta o pensamiento, para que entre todos le demos vueltas...Yo se les he dado y se las sigo dando.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...