A VECES PASA...(Poema)

Pues a veces pasa...
pasa que lo que más quieres, se aleja
y todo se acaba en un simple adiós y un hasta siempre,
una despedida pobre, sin fiesta, sin testigos,
solo con palabras escritas,
los dos y en la distancia,
los dos en pijama y llorando,
los dos en distintas camas,
la tuya, que conserva tus aromas
y la mía, que es como una nevera fría,

¡QUÉ MÁS DA!

¡Qué más da!, muchas veces pienso en eso, ¡qué más da!...claro, que ese pensamiento sólo me dura una segundos, yo no estoy hecho para pasar de las cosas y porque todo importa, absolutamente todo importa, algunas cosas más que otras, pero todo importa. La cuestión no es que importan más o menos las cosas, la cuestión es que esas cosas no te lleguen a paralizar, por tanto lo que importa, es la forma de como te tomas las cosas, bueno, salvo la muerte y algunos asuntillos más, que son un tanto peliagudos. Pero el resto de temas y de problemas se supone que son relativos y transitorios, pues ya sabemos que todo es solucionable, repito, salvo la muerte...por tanto si hoy no puedes, mañana podrás.

La verdad es que no veo soltando discursos positivos y no porque no piense en positivo, lo que pasa es que sé que hay mucha gente atrapada entre sus pensamientos y eso me hace sentirme incómodo, porque ya lo dije muchas veces, no hay peor remedio para animar, que decir que la puta vida es maravillosa, porque hundes más al que está hundido. Y no penséis que soy tan altruista, que lo soy, que cada vez que pienso en positivo me entran las penas por los demás, bueno, por una parte sí, pero por la otra pienso en mi mismo, en mi cuando yacía desmotivado por mi depresión y claro, cuando un capullo positivista me soplaba un mensaje con aires de que la vida es muy bella, me cagaba en todos sus muertos.

Respecto, yo sólo pido un respecto para los que están jodidos y alicaídos, no pido que nos los llevemos a la cama y que les demos cariño y esas cosas, pero si un apoyo moral, un ánimo desde el ánimo, un ánimo tranquilo y comprensivo, un ánimo con suma delicadeza...y porque todos hemos pasado por ello. Y no hablo de los plastas llorosos, de los que te meten insufribles coñazos, hablo del que está jodido realmente, del que no tiene ni ánimos para hablar, del que prefiere estar sólo y mascullando su soledad...porque es bueno recordar que hubo otros tiempos y que de aquellas no se acordaba de ti, nadie...Pues mirar, hoy me he acordado de todos ellos y me siento orgulloso de ello.

Y ASÍ, SOY YO (Poema)

Dedos cortos, manos suaves,
dientes de acero, mandíbula de hierro,
cadera de titanio, músculos finos,
barriga de batracio, cuello de toro,
pies..., pies para que os quiero,
rodilla renqueante, tobillo dislocado,
hombro de hombre, piel de terciopelo,
ojos verdes, pupilas puntiformes,
versos al viento y poemas de viento,
mar, lluvia, sol, luna, faro, plantas, árboles,
tierra, astros y nebulosas...
y así, soy yo,
soy de todo un poco,
soy verso y soy verbo
y a veces, hasta soy adverbio.

AGUA Y AIRE (Poema)

Si crees que mis lágrimas son agua,
no te equivocas...
son agua y aire,
agua, porque soy agua,
y aire, porque procedo del aire,
soy agua y aire,
soy líquido y soy etéreo,
soy tu brisa y soy tu sonrisa,
soy el que te doy los ¡buenos días!,
el que te levanta, el que te acuesta,
el que te arrulla y te arropa,
soy el que te hace flotar sin alas,
sin manos... sin nada...
sólo con el poder de los sentimientos
y la magia de nuestros besos,
yo y mis manos, yo y mis labios,
yo y mi entusiasmo
y esas inmensas ganas de vivir,
y esas son mis armas, mis únicas armas,
¿qué más quieres?,
¿quieres mi cuerpo?, yo te lo he entregado,
¿quieres mis ojos?, ellos viven dentro de ti,
¿quieres mi alma?,
mi alma te la entregué el mismo día en que te conocí,
y ahora y ahora...
y ahora siento que mis lágrimas vuelven a ser agua y aire.

LA COMIDA

Bueno, llegó mi hora de cocinar, de cocinar porque es mi puta obligación, de cocinar porque tengo tres hijos a los que alimentar, de cocinar porque dios me dio esa misión, de cocinar a regañadientes y porque no me considero ningún Master Chef, simplemente soy un puto pringado que tiene que cocinar y yo a eso, no le veo poesía por ningún lado, ni arte en las fogones. Es que no soy un cocinitas, un tío que disfrute con ahora pongo cebolla caramelizada y confituro el pescado y le doy un ligero toque con salsa de roquefort...lo mío no es así, lo mío es mucho más burdo y bestia, es como más primitivo.

Pues nada, que llegó la hora de mi tortura, de mi particular tortura...lo jodido de éste tema, es que a mi me encanta el buen comer o el buen manjar. Disfruto comiendo y más ahora con el paso de los años, antes pensabas que si ahora no comías bien, ya comerías bien otro día o más adelante, tiempo tenías y ahora no, ahora sé que sino aprovecho bien cada majar que pruebo, puede que me lo pierda para siempre, porque dudo y mucho, que en la otra vida haya muchos cocinitas. Ya se sabe, unos nacen para cocinar y otros nacen, para comer sus delicias y a mi me tocó ser uno de éstos últimos.

Ahora, ganas le hecho, porque ya puestos intento hacerlo lo mejor posible, pero eso sí, sin pasarme, vamos, que no se me va la vida en ello. Hago lo justo y necesario para que la comida esté rica y sabrosona y hasta ahí, es a donde llego. Y como todas las cosas que cuestan, el problema está en el principio, en el arrancar, porque después, todo se desliza. Bueno, pues vamos al hoyo...que ante lo que hay hacer, sólo se puede tener una postura: hacerlo y a tomar por culo.

CELOS

A veces el alma puede más que el cuerpo, bueno, en mi caso eso pasa muchas veces, porque yo cultivo más mi alma que mi cuerpo, me gusta abonarla, me gusta regarla, me gusta darle motivos para estimularla y me preocupo de ello, me preocupe todos los días y a todas horas, porque de alguna manera me siento con la obligación de compensarla, durante algunos años le regalé demasiado maltrato y ahora, siento que tengo que darle cariño y besos. Compensarse, nos pasamos la vida compensándonos y tengo que hacer esto, porque le he dedicado demasiado tiempo a lo otro y como si las cosas tuvieran celos y no son las cosas, somos nosotros los que somos celosos, porque queremos el todo y al mismo tiempo, queremos la nada.

Celos, malditos celos, aunque yo tengo que reconocer que pocas veces tuve celos, pero cuando los tuve era un hervidero de malas intenciones, porque todo se retuerce con los celos, lo más estúpido se convierte en una gran afrenta y deformas las actitudes y malinterpretas la más sencilla de las palabras. Menos mal, que yo me he librado mucho de ese tumor en la cabeza y que cuando sentía que crecía, yo me retiraba a mis aposentos y para joderme in vivo y en calentito, no soportaba ese dolor tan inhumano, no soportaba esos pensamientos tan miserables, ni entendía de donde venían y que monstruo los había hecho.

Hay cosas que no, hay cosas por las que yo no paso y los celos debían estar aniquilados. No hay cosa más rastrera, que tener celos, porque indican que tú te sientes propietario de la otra persona y no sólo eso, te sientes su amo. Yo siempre apliqué el mismo cuento con los celos: "con los celos tolerancia cero" y mira por donde, al final me fue bien. Digamos que ahora los celos ni ocupan el 1% de mis pensamientos y por una sencilla razón: yo no soy dueño y propietario de nadie, yo soy persona y lo otra persona, también lo es y además, ahora pienso que si alguien me quiere es porque quiere quererme y no joderme y sino fuera así...siempre está la puerta abierta y a otra cosa mariposa...

DEPORTE

Ahora estoy en modo DEPORTE, tengo que hacer deporte, que ya lo hacía, pero no era suficiente, es decir, tengo que mamar sudores todos los días, tengo que ponerme cachas tipo tío hipertrofiado, tengo que segregar barriles de endorfinas, tengo que llegar a pensar que si no hago deporte todos los días, me pondré asquerosamente blandengue y fofo. Y ya sé, lo que pensáis muchos, que aproveche la moda del correr, pero lo siento no soporto a los que su gran hazaña en la vida es el correr. Y corre y corre, pero no te hagas tonto, corre lo que te salga de los cojones, pero si a mi me va bien el ir andando, pues que le vamos hacer, tú correrás y yo andaré y además, ya me buscaré otras formas de sudar a lo bestia.

Modas y modas y más modas y mira que a lo largo de mi puta vida, no he visto pasar modas y más modas. Sin ir más lejos yo viví la moda del no hacer deporte, es decir, no hacer ningún tipo de deporte era toda una cualidad que por supuesto, estaba sobrevalorada. Es decir, si tú de aquellas querías ligar, tenías que aborrecer el deporte y mirar a los pobres deportistas con todo tu desprecio, bueno como más o menos ocurre en todas las modas, porque si te sumas a ese carro, serás el amo y sino te sumas, pues no te irá tan bien, te irá jodido y te sentirás despreciado.

Y el tema de las bambas o zapatillas y un pantalón de deportes y ya está, ya tienes todos los complementos para ponerte a correr. No sé, es como si los que corren tuvieran la necesidad de mostrarte que su deporte es muy sencillo de realizar...y yo creo que en la sencillez no está el tema y el tema está en que correr es un puto aburrimiento, que sí, que debe aumentar la autoestima y porque has corrido 150 kilómetros, pero señores, la autoestima también se gana pensando y sintiendo o mordiendo y a lo que yo voy, cada uno tiene su fórmula de bienestar.

AMANECERES

Viernes, mi gran día o mejor dicho mi gran noche, mi gran noche heredada de antiguos tiempos, cuando la noche del Viernes era el despiporre y porque así, tenía que ser, no podía estuviera escrito o establecido, sino porque la palabra Viernes significaba descontrol y borrachera y hasta que el gallo cantara, que más o menos coincidía con el amanecer del Sábado. De todas formas y dentro de la nebulosa en que estaba mi cerebro o lo que quedaba de él, recuerdo amaneceres dorados, preciosos amaneceres que me hacían soñar que mi vida podía cambiar de signo. Recuerdo especialmente los amaneceres en los puertos, yo sentado o medio tirado viendo la actividad del puerto, supongo que los currantes se estarían cagando en mi  y mira el niñato éste todo borracho y todo colocado...pero bueno, yo estaba lo suficientemente colocado como para poder pasar de los comentarios y de las asesinas miradas.

El sol, como siempre salía de la línea del horizonte y aquel decorado cogía un halo mágico, un halo romántico y eso me hacía navegar por los mares. Son sensaciones que tiene uno en esos momentos tan especiales y no sé el porqué, pero necesitaba que fueran compartidas con alguien...como si ese alguien cada día estuviera más cerca...como si esperara un gran advenimiento, que nunca se produjo, porque esas sensaciones son tuyas y sólo tuya y que cuando por fin las compartí con alguien, me quedé decepcionado, no sé, pensaba que iba a explotar conmigo o mejor dicho con esa sensación y con uyyy!! qué bonito, el asunto se daba por zanjado.

Y que decir de los amaneceres en los Faros, si los Faros en sí, ya son preciosos y hermosos y si le añadimos un maravilloso amanecer, la suma no es suma y es una multiplicación. Los Faros y cuanto más escondidos y alejados, mejor y por eso quizá recuerde que en los Faros no iba tan puesto, porque previamente había que andar y había que andar mucho y digamos que la nebulosa alcohólica se convertía en simple neblina, por lo que aquí los sentidos estaban mejor colocados y se subía el telón: mar, barcos, rocas, playas, arena, cormoranes, asquerosas gaviotas, graznidos, más barcos, deseos reprimidos y la guinda del pastel, era cundo acampábamos a la vera de un Faro, porque eso significaba un montón de orgasmos.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...